Capitulo 1 parte 5

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Mordí el interior de mi mejilla, negándome a volver de nuevo a ver la verdad detrás de sus palabras.

Torciendo el pomo de la puerta, Austin la abrió, sus piernas se deslizaron hacia delante, arrastrándome a su lado e inmediatamente su cara cayó ante la sorpresa que esperaba. “Wow,” El suspiró, sus ojos estaban muy abiertos.

John se quedo de pie a nuestro lado. “¿Te gusta?”

Austin presionó sus labios juntos, chasqueando su lengua contra la parte de arriba de su boca, no mostrando ningún signo de emociones. Volviéndose hacia nosotros, el se encogió de hombros. “Es... diferente.”

“Se que no es lo que te esperabas pero pensamos que necesitábamos un poco de cambio.” Marcus regañó, mirando alrededor de la casa también.

“Cambiasteis los sofás.” La mandíbula de Austin se frunció desagradablemente, su cara estaba inalterable mostrándonos lo que realmente sentía detrás de su fachada. “Y la alfombra...” El hizo una pausa. “Wow.”

Bruce había cambiado los sofás color burdeos por otros nuevos, de cuero negro. Los suelos de alfombra estaban rallados y ahora estaban cubiertos de madera dura.

“Si,” Me incliné hacia arriba, presionando mis labios contra su mandíbula para relajarle lo que funcionó porque el se calentó bajo mi tacto. “Me gusta. Va con la casa.”

Austin me miró hacia abajo, sus ojos sombreados con desaprobación. “¿Fue tu idea?” EL murmuró en voz baja.

Mordí mi labio. “Quizás.” Susurré.

Suspirando, Austin miro a su alrededor una vez mas. “No esta mal...” Él rastreó en su cerebro la respuesta mas simple que el pudo hacer. “Es extraño que desde que hemos estado aquí fuera la misma casa durante años, pero supongo que un cambio es bueno.” Se encogió de hombros y no pude evitar sonreírle.

Marco se burló, sabiendo exactamente porque Austin había dicho lo que dijo.

Le disparé una mirada haciendo que el devolviera el gesto antes de desaparecer bajo mis ojos y con los hombros caídos, su ceño fruncido apareció. Me reí suavemente, sabiendo que el no podía enfadarse conmigo.

“¿Que es tan gracioso?” Austin me contestó rápidamente, dándole toda mi atención mientras mi estómago saltaba haciendo volteretas bajo su intensa mirada.

“Nada.” Murmuré, dándome la vuelta de manera que ahora le daba mi espalda a Marco.

Frunciendo el ceño, el brazo de Austin hacia mi se apretó. “Mi habitación es...”

“Todavía la misma.” John acabó por él. “Pensamos en cambiarla pero ____ nos convenció de no hacerlo.”

Austin me miró con apreciación hacia mi, sus labios se presionaron contra mi frente. “Esa es mi chica.” El susurró de manera que yo solo le escuchara.

No dije nada. En cambio, me quedé congelada a su lado, sabiendo que esta linda actitud iba a desaparecer de un momento a otro.

“Venga,” Bruce interrumpió, rozándonos mientras pasaba por delante de nosotros para que el ahora estuviera en frente de todos nosotros. “Vamos a sentarnos.” Hizo un gesto hacia el sofá con su cabeza y todos nosotros nos obligamos, siguiendo su ejemplo.

Sentándome al lado de John, Austin me llevó hacia su regazo. Besando la parte de atrás de mi cuello, él me abrazó.

Moviéndome incómodamente, tiré de la mano de Austin hasta que el me soltó. Dándome una mirada confusa, le ignoré mientras me deslizaba de su regazo, sentándome por mí misma en el sofá unos cuantos centímetros mas lejos de él.

Frunciendo sus cejas, el entreabrió sus labios para decirme algo cuando Bruce interrumpió.

“¿Estas hambriento man? ¿Quieres algo de comer? Se que la comida allí es jodida como la mier*da.” El exclamó.

Austin negó con su cabeza. “He perdido todo el sentido de mi apetito en ese lugar abandonado de Dios. Ni siquiera se que como es la comida real.”

“Entonces, lo haré como se debe.” Bruce se puso de pie, sonriendo ampliamente hacia él. “Es bueno tenerte de vuelta, man.”

Austin sonrió, asintiendo con su cabeza en mutuo acuerdo. “Es bueno estar de vuelta.”

Chocando sus manos, Bruce caminó hacia la parte trasera de la casa donde estaba el patio exterior, había una barbacoa lista para ser encendida y usada.

“_____, ¿Puedo hablar contigo?” Carly se levantó y antes de que tuviera oportunidad de responder, ella me agarró mi mano, levantándome y tirando de mi dentro de la cocina. “¿Que co*ño crees que estas haciendo?”

“¿De que estas hablando?” Cerré mis ojos hacia ella, sorprendida por su fuerte interrogatorio.

Ella dejo escapar un suspiro de exasperación. “Sabes de que estoy hablando _____.” Cuando no dije nada, ella se pasó los dedos por su cabello. “Austin, _____. Tienes que parar de joderle la cabeza.”

“No estoy--”

“Si, lo estas. No puedes esperar que él no se de cuenta de como de acaramelada estas, besándole un segundo, y después distante.”

“Simplemente estaba en el calor del momento...” Murmuré, mirando hacia abajo a mis dedos.

“No, su liberación fue como lo acabas de describir. En el coche...” Ella sacudió su cabeza, “no tanto.”

“¿Que esperas que haga?”

“Que le digas la verdad sobre como realmente te sientes.” Carly enfatizó, sus ojos me miraban a los míos con tristeza. “Yo estuve allí en medio de todo. Vi lo que él te hizo y como de dolida estabas cuando se lo llevaron. El necesita saber cuanto dolor te causó.”

Tragué saliva, apartando mi mirada, sabiendo que ella tenía razón. No podía aguantarlo por mas tiempo, incluso si quisiera. No importa lo duro que trate de ocultar mi dolor, todavía venía a mi. Mordí mi labio, asintiendo. “Esta bien, lo siento.”

“No tienes nada de lo que disculparte. Se que es duro ... pero es lo mejor para ti.” Ella me lanzó a un abrazo. “La verdad te liberará, _____.”

Asentí, alejándome y metiendo un mechó de pelo detrás de mi oreja. “Tienes razón.” Suspiré. “Es ahora o nunca, ¿no?”

Carly me dio una aguda sonrisa con sus labios, sabiendo justo como de difícil iba a ser para mi. “Estaré aquí si me necesitas.”

“Gracias Carly.” Suspiré, alejándome, volviendo a la sala de estar con Carly siguiendome detrás. Bruce volvió del patio, ahora se unió con los chicos en el sofá, su brazo estaba alrededor de los hombros de Austin mientras ellos discutían algo en voz baja.

Una vez que nuestros pasos de escucharon ellos pararon de hablar, mirándonos hacia nosotras. Bruce murmuró algo en la oreja de Austin, haciendo que el asintiera a cambio.

Sentándome frente a ellos, tomé una profunda respiración, masticando la parte de mi labio inferior. Carly decidió sentarse a mi lado mientras ella posaba una mano en mi pierna, reconfortándome, dándole un apretón para mostrar que ella estaba allí para mi.

Levanté mi mirada para mirarle, dándole una pequeña sonrisa, evitando los ojos de Austin en mi mientras el matizaba para saber porque decidí sentarme donde me había sentado en lugar de a su lado.

Danger's back {Austin Mahone}Onde histórias criam vida. Descubra agora