Capitulo 20 [Maraton 5/5]

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Austin’s Point of View:

Gimiendo mientras la luz de la ventana entraba haciendo que aleteara mis ojos abiertos y los despertara de mi sueño. Tragando saliva a pesar de mi seca y pegajosa garganta, empecé a limpiar mis ojos atontadamente. Haciendo una mueca ante el tirón en mi pecho, suspiré con frustración antes de relajarme una vez que mis ojos cayeron en _____, profundamente dormida al lado de mi cama.

Fruncí el ceño ante la imagen de ella echa una bola en una de las claramente incómodas sillas del hospital, con una raída sábana cubriendo su, probablemente, congelado cuerpo. Estirándome, le insté suavemente a que se despertara con mis dedos, sin ser capaz de verla dormir así, mas tiempo.

“Nena,” Dije con voz áspera mirándola mientras ella se movía un poco antes de batear sus pestañas, sus ojos encontraron los míos antes de que rápidamente lanzara su cuerpo rápidamente a una posición sentada.

“¿Estas bien?” Ella murmuró aturdida, buscando alrededor algo mal, “¿Pasó algo? ¿Quieres algo?”

No pude evitar la sonrisa que instó a mis labios esbozar, ante su urgencia por venir en mi ayuda. “Nah, estoy bien cariño, pero sin embargo, quiero que hagas por mí algo”

“¿Que es?” Ella preguntó, confusa sonriéndome en respuesta.

“Quiero que vayas a casa y descanses un poco antes de que te pongas tan agotada que ellos tengan que internarte.”

“Estoy bien,” _____ replicó con un rodamiento de ojos, exasperada.

“Has estado aquí cada minuto del día. Probablemente te estas alimentando de la mier*da que venden en las maquinas expendedoras en la cafetería y de café.” Le disparé, tratando de empujar mi punto de vista. No es saludable para ella estar aquí las veinticuatro horas del día todos los días de la semana, sin una buena noche de descanso o comida regular en su sistema.

“Yo no lo llamaría exactamente mier*da; en realidad no es tan malo... una vez que te acostumbras a ello.” _____ se encogió de hombros descuidadamente, tratando de convencerme de lo contrario pero nada que ella iba a decir, me hará cambiar de opinión.

“De cualquier manera, todavía no es comida. Necesitas tomar un poco de aire también, a parte de viajar del baño o buscar a la enfermera. Necesitas salir, ver el sol, el cielo... estando encerrada aquí no va a hacer nada mejor. Eso simplemente empeorará las cosas para ti.”

“Tuve suficiente aire fresco;” _____ agitó una mano con desdén, “Carly me llevó a un restaurante hace un par de días y fui a casa una vez, también.” Ella protestó, sus labios se hicieron un puchero.

“Una vez,” Repetí, “Exactamente. Te estas desgastando por nada.” Suspiré, “¿Que bueno vamos a hacer cualquiera de nosotros si sufres un colapso justo cuando recibo el alta?”

“No quiero dejarte... que si--”

“No,” Le señalé que parara antes de que continuara hablando. “No hay que-sis. He pasado por lo peor, ¿vale? No te preocupes por mi. Soy el único que esta bien aquí. No estoy muy seguro de como vas a llegar a un par de días, si sigues así.” Lamiendo mis labios, tomé una profunda respiración, “No quiero que esto se convierta en una discusión. Solo haz lo que te digo, ¿vale?”

“Estas desplomado sobre tu espalda y todavía encuentras maneras para controlar mi vida,” _____ murmuró en broma, lanzándome una tímida sonrisa mientras ella descruzaba sus piernas y se levantaba, estirando sus extremidades.

Riendo entre dientes, sonreí, “Solo ve a casa y duerme un poco. Me sentiré mucho mejor sabiendo que estas descansando.”

Frunciendo sus labios, _____ no pensó mucho en ello mientras sus hombros se encorvaban en consternación. “Bien,” Ella enfatizó, inclinándose y presionando sus labios contra los míos en un dulce beso, “Pero volveré mas tarde.” Ella me señaló con un gesto de advertencia.

Pellizcando su cadera, le di unas palmaditas en su cu*lo, “No puedo esperar.”

Estrechando sus ojos hacia mi, ella golpeó mi mano alejándola juguetonamente antes de volverse para coger su chaqueta mientras ella empezaba a ponérsela.

“Espera,” Informé justo cuando ella se volvió para alejarse.

“¿Que?”

“Abre la puerta por mi, ¿vale?” Le hice un gesto hacia ella con mi barbilla.

Frunciendo sus cejas, ella me dio una mirada perpleja pero hizo lo que le dije, de todos modos. “¿Vale? Iba a hacerlo de todos modos... ¿Y ahora que?” Ella me preguntó mientras giraba el pomo, abriendo la puerta.

“Spencer!” Grité lo suficiente como para no hacerme daño a mí mismo pero lo suficientemente alto para que el escuchara. Disparando su cabeza alrededor de la entrada, _____ casi salta del repentino rostro que apareció.

Spencer era uno de los guardias con los que Paul me había asignado, que resultaba ser alguien que había conocido durante años, pero con el que perdí contacto una vez que había ido a prisión. Solíamos bromear juntos cuando nos asignaban para atender a los mismos tratos de negocios.

“¿Me llamaste?” El bromeó con una sonrisa, sus manos estaban entrelazadas juntas en frente de él mientras el se quedaba de pie delante de mi, al entrar a la habitación con _____ justo detrás, los ojos de ella estaban mirando hacia atrás y adelante entre nosotros.

“¿Te acuerdas de cuando te decía sobre como asignaría a unos cuantos guardias?” Volví mi atención hacia ____ por el momento.

Ella asintió, “Si,”

“Bueno, este es Spencer. El va a ser tu chofer.”

Apartando sus ojos de los míos para mirar a Spencer, ella lo observó de la cabeza a los pies, “Vale,”

“Tú,” Miré a Spencer, “Tú vas a estar vigilando a ____ a partir de ahora, ¿entendido? Lo que ella quiera, lo consigues para ella. Donde quiera ir, tu la llevas. Si ella quiere que las lleves en tu espalda, maldita sea, es mejor que creas que la llevarás. Si ella quiere ir al centro comercial y luego volver cientos de veces, tu la llevas.”

Arqueando una ceja, Spencer sonrió ante mis órdenes.

“Quiero que ella se sienta cómoda a tu alrededor Spencer, así que no trates de ser un cabr*on irritable, como eres el noventa por cien del tiempo. Esa es la vida de mi chica la que esta en tus manos y si algo le pasa a ella, es mejor que creas que te voy a matar.”

“La protegeré con mi vida.” Spencer me dio su palabra de honor mientras el chocaba sus manos conmigo. Mirando a _____, el extendió su brazo para que ella lo cogiera.

Vacilante al principio, ella me miró como si fuera a pedir permiso. Cuando le di una pequeña sonrisa, ella giró su mano alrededor de su bíceps.

“¿A donde, hermosa dama?” El puso fin con una vibrante sonrisa, evitando los puñales que actualmente yo le estaba disparando en su dirección.

“Uhm,” ____ se sonrojó, mordiendo el interior de su mejilla, “a casa, supongo. ¿Sabes donde esta eso?”

“Se donde esta todo. Tuve que memorizar esa mier*da durante horas,” Spencer se quejó, irrita, completamente olvidando mi existencia pero fue rápidamente recordado una vez que aclaré mi garganta. “Lo siento,” El se quejó, sacando a _____ por la puerta. “Ya sabes, tu novio puede ser un ca*bron.”

“Es mi novio del que estas hablando, sabes.” _____ fulminó, claramente disgustada ante su elección de palabras.

Sonreí.

Esa es mi chica.

“Lo se,” Spencer encogió su hombro derecho solo, “Pero eso no significa mucho para mi. Solo estoy diciendo la verdad--el es irritante como la mier*da.”

Danger's back {Austin Mahone}Onde histórias criam vida. Descubra agora