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El ambiente en la sala de cine siempre es propicio para querer besar a alguien, sobre todo si ese alguien que está junto a ti es Lauren Jauregui que con quince años lucia jodidamente hermosa.

La oscuridad, las pocas personas que habían y la mano de la ojiverde rozando la de Camila.

Iban cerca de veinte minutos de proyección y la castaña apenas entendía de qué iba el asunto de la película, sería muy incómodo cuando saliera de ahí y no tuviera ninguna opinión respecto a la trama.

La mayor decidió entonces empezar poner atención y dejar de estarse fijando en cada gesto de la otra. Se recargó completamente en el asiento para una mayor comodidad y apoyó su cabeza en el hombro de Lauren.

Todo lo de comenzar a ver realmente la cinta no duró ni un minuto ya que Lauren posó su brazo a espaldas de Camila, la abrazó y empezó a acariciar su hombro.

Sintió que ese tacto le era bastante bueno pero aún así quería más. Miró como el pulgar de Lauren se movía de manera delicada y circular sobre la tela de blusa que llevaba puesta y se pegó un poco más al cuerpo de la ojiverde.

Lauren prolongó sus caricias y estuvo así por un rato mientras Camila en su mente se reía de sí misma ya que no podía creer que se estuviera excitando solamente por como una niña le tocaba el brazo.

— Lo —la llamó delicadamente.

La mencionada bajó su mirada a la mayor, la oscuridad no hacía que la distinguiera a la perfección pero sus ojos oscuros se podían observar claramente gracias al brillo que estos poseían.

— ¿Qué sucede, Camz?

— Creo que tengo un poco te frío.

No podía estrecharla aún más ya que estaban en diferentes asientos, tampoco llevaba alguna chaqueta para ofrecerle a Camila, así que, aprovechando que no había nadie tras ellas a quien pudieran interrumpir, Lauren creyó tener una solución.

— ¿Quieres que te abrace?

—Ya lo estas haciendo.

—No —respondió rápidamente —. Me refiero a abrazarte aquí —, explicó señalando su regazo.

La castaña reprimió una sonrisa y asintió antes de ponerse de pie y sentarse sobre las piernas de Lauren tratando de que fuera cómodo para ambas.

Camila pasó sus manos alrededor del cuello de la otra y esta le rodeó la cintura para sujetarla. La castaña acomodó su cabeza sobre el pecho de Lauren y respiró su aroma sintiéndose completamente satisfecha.

Un par de minutos le tomó a Lauren comenzar a acariciar la cintura de su vecina, quería contenerse pero era bastante débil y terminó haciendo figuras imaginarias en el área esperando no incomodarla, para sorpresa de la menor, Camila le siguió el juego y empezó a acariciar su mejilla y mandíbula con la punta de su nariz haciéndola estremecer cuando su respiración tibia chocaba con su cuello.

El toque de Lauren entonces se volvió un poco más atrevido pasando la punta de sus dedos a la cadera de Camila, luego su mano completa la acariciaba y cuando la mayor rozó su cuello con sus labios, la ojiverde le dio un ligero apretón a la parte superior del muslo de la universitaria.

Camila se ladeó un poco para que una parte de su trasero quedara expuesto. Lauren lo notó y de la pierna de la mayor subió para masajear su glúteo, la más grande mordió su labio al sentir cómo su vecina la tocaba y levantó su rostro un poco para encontrarse con el de la más chica.

— Sigo sintiendo frío —susurró uniendo si frente a la de Lauren.

— Pues yo creo que estoy empezando a sentir calor —contestó en el mismo volumen.

Una sonrisa amplia se formó en el rostro de la castaña, Lauren era demasiado linda incluso en momentos como en el que estaban.

— Tú de por sí ya eres una mocosa caliente —indicó más cerca de los labios de la más pequeña.

— Puedo darte un poco de mi calor entonces —respondió.

— El abrazo no está funcionando mucho ¿Qué más vas a hacer? —cuestionó fingiendo inocencia.

— Y-yo, podría besarte, sudas cuando nos besamos en nuestras habitaciones así que podría funcionar.

La universitária relamio sus labios y cerró el espacio entre ambas lo suficiente para que tocara un poco un poco la boca de Lauren con la suya y crearán una diminuta fricción al hablar.

— Eso suena convincente. Quizá debes comenzar a usar tu lógica en la escuela también.

—Tengo problemas de concentración. Ya te lo dije.

—Lo sé, por ejemplo ahora deberías estar besándome y no tocando nuevamente una charla que ya tuvimos.

Una risilla salió de Lauren ante de humedecer un poco sus labios y posarlos sobre los de Camila.

Fue un beso tierno y los chasquidos que salían eran opacado por el sonido de la película que ambas estaban ignorando.

Las caricias eran suaves, el juego entre sus lenguas lento y sin duda Camila logró conseguir el calor que buscaba de aquella chica.


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Gracias por leer ;)
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(Si te está gustando esta historia házmelo saber votando y comentando cxcxcx)

PD; Dime que cantantes o grupos te gustan más (no vale fifth harmony ni Camila esta vez)

PD2; Te invito a leer mis otras novelas Camren, las encuentras en mi perfil

PD3; Mil gracias por las mil estrellas
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Lauren quiere ser tops || Fanfic CamrenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora