¿Destinados?

Capítulo 9

Yuuri quien desde que salió de la habitación no había dicho absolutamente nada y solo asintió al momento en que el Alfa el cual resulta que se llamaba Víctor le pidió que lo siguiera. Decidió preguntar con un poco de miedo - ¿Qué... que hacemos aquí?- Se encontraban en el centro comercial al frente de un negocio llamado "Salón & spa Giacometti", el cual parecía muy elegante y sobre todo costoso.

-Tranquilo, estamos aquí para darle un pequeño cambio.- Víctor sonrió y dio un guiño tomándolo de la mano y arrastrándolo hacia el local, ya dentro automáticamente fueron rodeados de Betas, tres mujeres y un hombre.

-Victya- Grito el hombre abrazándolo - Realmente lo siento, ayer no te pude acompañar, perdóname.

-Chris, tranquilo, ya paso- dijo Víctor correspondiendo el abrazo.

-¡Hey!, pero que tenemos aquí, y esta lindura- decía apartándose y viendo fijamente a Yuuri, quien se sonrojo.

Víctor sin darse cuenta lanzo una dura mirada hacia Chris, quien al instante sin ponerle atención a su amigo, se posiciono junto a Yuuri, caminaba a su alrededor casi escaneándolo con la mirada, de pronto y sin ningún reparo una de sus manos se posaba sobre el bien formado trasero de Yuuri, el cual al sentir la mano intrusa chillo y se sonrojo hasta sus orejas.

-Que excelente retaguardia tienes muchacho, firme redondito y suavecito- decía mientras más apretaba esos jamoncitos 7u7

-¡CHRIS!- grito Víctor apartando rápidamente a Yuuri, el cual ya parecía que su alma había salido volando por la vergüenza.

Víctor estaba a punto de gritarle un millón de cosas a su amigo, cuando el mismo interrumpió diciendo -Tranquilo no te lo quitare- el Alfa no pudo evitar sonrojarse y antes de que replicara, Chris continuo - ¿Dime que es lo que te trae aquí? y con el lindo chico- señalo a Yuuri quien poco a poco se recuperaba de la vergüenza de ser manoseado sin pudor alguno.

Víctor dio un largo suspiro y contesto -Quiero que utilices tu magia sobre él, hazlo ver deseable, totalmente Eros.-

-Eso va a ser fácil solo dame unos minutos y te lo regreso- guiño y después agarro al Omega de la mano -Ven chico, sígueme. ¡Chicas ya saben que hacer, manos a la obra!- dijo esto y se fue adentrando en la tienda con Yuuri y dos de las chicas, mientras la otra dirigía a Víctor a una sala de espera.

...

-Siéntate, y relájate- Chris señalo una silla que parecía realmente cómoda, de inmediato al sentarse las dos chicas tomaron sus manos y comenzaron a hacerle manicura, Chris estaba moviendo unas cosas de aquí para allá sobre una mesa de cristal empotrada a la pared y por momentos lo miraba -Y ¿Cuál es tu nombre?

En ese momento se percató que no se había presentado formalmente y que tampoco Víctor lo había hecho -Yuuri, mi nombre es Yuuri Katsuki-

-Yuuri, te llamas igual que el gatito-

-¿Gatito?

-Si, Yuri Plisetsky, un chico rubio muy gruñon.

-Eh, ¿se refiere a Yurio?

-Si es el primo de Víctor, si- decía mientras se acercaba a él con unas brochas -Cierra los ojos- y no me trates de usted, me hace sentir viejo-

-¡Yurio es primo de Víctor! No tenía ni idea-

-Jajajaaja ¿Yurio? Pues Víctor lo trata más como un hijo la verdad pero si son primos y ambos fueron criados juntos, pero ¿Por qué lo llamas Yurio? ¡Y cierra los ojos!-

-Lo siento- dijo cerrando sus ojos -Le pusimos así al momento de conocernos para que no nos confundiéramos con nuestros nombres-

-¿Cómo se conocieron, tú y Yurio?- Pregunto mientras aplicaba unos productos en el rostro del azabache

-Bueno, yo estudie en la Universidad en Detroit, ahí conocí a Pichit mi mejor amigo y el me presento con Otabek, un año después Otabek empezó a trabajar de mayordomo y guardaespaldas, un día llego muy feliz aunque no se le notaba pero nos contó que había conocido a su destinado y a los días nos presentó en una salida al cine, ese mismo día Pichit le puso Yurio, al principio creía que el me odiaba pero luego fuimos haciéndonos más cercanos, cuando menos me di cuenta él ya era parte de mis mejores amigos.- Decía esto con una gran sonrisa en su rostro.

Yuuri quería preguntarle a el sobre Víctor pero se avergonzó y mejor ya no dijo nada. Minutos después las chicas ya habían terminado y Chris también.

-Levántate, ven, y no te veas en el espejo, no aun.-

-Bien- ambos llegaron a una sala llena de vestidos y trajes, todos eran especiales para Omegas hombres, además de verse súper costosos eran hermosos, también habían zapatos de todos estilos y tamaños, Chris se dirigió a los vestidos y tomo un par luego volvió hacia él y los coloco frente a el, evaluando cual le quedaría mejor, de un momento a otro el Beta arrugo el ceño, aventó los vestidos a un sillón junto a ellos, saco un cinta de medir de su bolsillo y midió la cintura de Yuuri, sus caderas, el ancho de hombros y el largo de sus piernas y brazos.

-No lo había notado, tienes el cuerpo para ese traje, espera por eso dijo Víctor Eros, definitivamente tú tienes un cuerpo envidiable chico, que suerte la de mi amigo.- esto último lo había dicho entre dientes, sin darle la oportunidad de escuchar bien.

-¿He?- Yuuri no entendía nada de lo que dijo Chris, quizás porque lo dijo muy bajo, y de la última frase solo logro escuchar suerte.

-Espérame aquí, ya regreso.- Se dirigió a una puerta que se encontraba del lado derecho, al cabo de unos segundos regreso, con una bolsa de esas que se usan para guardar trajes muy costosos, la coloco con cuidado en el sillón y la abrió, era un hermoso traje negro con incrustaciones de diamantes en la parte del pecho las cuales iban en diagonal y en la cintura rodeándola, tenía una parte con una tela muy fina casi transparente, una larga semi-falta al lado derecho, la parte de adentro de esta era rojo un rojo muy intenso <<hermoso>> pensó, ese traje parecía estar echo para seducir, ciñéndose al cuerpo, perfecto para destacar cada curva, pero sin mostrar nada, no era vulgar ni modesto, solo echo para seducir.

-Ten pruébatelo, detrás de esas cortinas hay un vestidor y póntelo.

-Pero...- no tuvo tiempo de replicar, pues Chris lo arrastro hacia las cortinas, entro, era como dijo el estilista un vestidor, tenía un pequeño asiento, ganchos para ropa y un espejo de cuerpo completo, pero estaba tapado, se dedicó a admirar un poco más el traje en sus manos, realmente le gustaba mucho, pero ¿se vería bien con él?, no lo sabía, una pequeña parte de su mente le decía que era imposible, la otra quería creer que sí.

Obedeció a Chris y se lo puso, ignorando a su mente, no podía terminar de poner el zíper, asique llamo al Beta quien de inmediato entro. -OMG, TE VES HERMOSO, DIVINO- grito al verlo, hizo que diera unas cuantas vueltas viéndolo desde todos los ángulos.

-Me podrías ayudar con el zíper, por favor.- Dijo muriendo de la vergüenza.

-Por supuesto.- dicho esto termino de cerrar el traje, de inmediato lo llevo frente al espejo y lo destapo.