Capítulo especial: Brigette II. Navidad.

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POV Narrador

La nieve caía poco a poco sobre la ventana, la pequeña se acercó para intentar ver mejor la calle, pensaba que tal vez así sus padres llegarían más rápido. Suspiro, llevaban ya dos semanas sin llamarla, tampoco le habían dicho cuando regresarían, pero le habían prometido pasar el año nuevo con ella.

Sus navidades no eran como lo escuchaba de los demás niños, sus abuelos nunca llegaban y sus tíos ni siquiera asomaban, de vez en cuando aparecían cartas de felicitación para sus padres, pero, tampoco tenían visitas en esas fiestas. <<Es navidad- se dijo en voz baja- al parecer solo estaré con la Sra. Smith>>

Decidió que lo mejor era jugar un rato con sus bloques de madera, ya que la Sra. Smith, una anciana adorable de ojos azules, se adueñaba de la televisión, no le gustaba bajar mientras ella estaba, siempre le presionaba las mejillas demasiado fuerte. Comenzó a juntar todos los bloques que tenía regados por su cuarto, algunos estaban debajo de la cama, otros cerca de su ropero, había unos escondidos en el baño << ¿Cómo los deje aquí? - los tomo con cuidado y salió de su baño para dejarlos sobre la alfombra ovalada que estaba enfrente de su cama- Seguro, cuando venga mamá me ayuda a construir un castillo>>

Escuchó los pasos de la Sra. Smith subir por las escaleras, hasta llegar a su puerta. La amable niñera la observo al abrir la puerta de par en par.

- ¿Cómo estás? ¿Por qué no bajas? - los ojos de la pequeña se fijaron en los de la Sra. Smith- Ya casi esta lista la cena y necesito de tu ayuda- La chiquilla asintió.

- ¿No han hablado? - pregunto, pero, al ver el rostro triste de la niñera supo que no había ni rastro de una llamada.

- ¿Escribiste tu carta a Santa Claus? – Brigette frunció su ceño, que hizo una pequeña v en su entrecejo.

-No creo en Santa- La niñera observo a la pequeña- He visto cuando mis papas ponen los regalos debajo del árbol, es gracioso, piensan que no lo sé.

-Bueno, yo deje de creer en Santa cuando tenía solamente 6 años- la pequeña la observo- me tocó trabajar muy duro, y el jefe de la tienda en la que trabajaba, me dijo que Santa no existía. Lo bueno es que tú te diste cuenta sola.

-Siento que le haya correspondido trabajar a esa edad- La amable niñera solo se sonrió.

El olor inundaba toda la casa, haciendo que la niña sintiera un poco de emoción por comer. Desde que sus padres se habían ido, se le había quitado el hambre, no salía de su cuarto a menos que tuviera que comer, a la fuerza. La Sr. Smith se separó de la chiquilla para poder preparar la mesa, que solo tenía puesto dos platos sobre el mantel color blanco que la adornaba.

- ¿Quieres pierna o pechuga? - Rose, miro a la tierna anciana, pensó un momento que podía comer.

-Pechuga- contesto, tímidamente.

-Elegiste la mejor parte- La niñera, sirvió un puré de papas, ensalada y por ultimo derramo jugo del caldo sobre el puré- Bueno es hora de comer. Feliz navidad, pequeña Rose.

-Feliz Navidad Sr. Smith.

***

Acostó a la pequeña sobre su cama, pensaba que tal vez la vería sonreír de nuevo cuando sus padres volvieran del viaje, acaricio la frente de la chiquilla con mucho cariño; la Sra. Smith cerro lla puerta del cuarto de la pequeña cuando salía de él, decidió que lo mejor era, leer un rato antes de irse a la cama por completo.

Mientras bajaba las escaleras, escucho que tocaban a la puerta, unos fuertes golpes parecían decirle que se apresurara a abrir, camino un poco más rápido, lo suficiente que le permitían sus piernas, cuando llego la Sra. Llevaba su ceño fruncido.

Al abrir la puerta una mujer de traje ejecutivo, con sonrisa amable, apareció frente ella. No le permitió pasar, pero le daba curiosidad saber qué es lo que quería ahí, vio el reloj de mano, eran las 11.00 pm... Qué podía hacer una mujer a esa hora, si los padres de la pequeña no estaban <<Quizá por ser navidad-medito mientras la mujer empezaba a abrir la boca-no, sus padres no tienen visitas nunca, menos en navidad>>

-Buenas noches, mi nombre es Margaret Ajax ¿Puedo pasar? - La Sra. Smith le abrió la puerta dejando que la joven mujer entrara por completo a la casa- Disculpe que lo explicara bien cuál es mi trabajo, soy la abogada del Sr. Y la Sra. Collins.

- ¿Abogada? - pregunto la nana con repentina preocupación- ¿Sucedió algo?

-Sentémonos, por favor- La anciana guio a la abogada, hasta la mesa del comedor- Gracias – dijo cuando tomo asiento en una de las sillas.

-La niñera se sentó al lado de la muchacha que sonreía forzadamente- ¿Ahora si me dirá por qué esta aquí?- los ojos de la anciana se entrecerraron.

-Es una pena para mi comunicarle que...-el tono de voz se suavizo- El Sr. Y la Sra. Collins fallecieron este día, aproximadamente hace tres horas- Smith, se quedo helada y perpleja, sintió como sus ojos se cristalizaron, ella los conocía desde ya varios años, antes que la pequeña naciera.

-Pero ¿Cómo? ¿Dónde? ¿Por qué? – Margaret, le tomo la mano a la anciana.

-Necesito que se tranquilice, le explicaré todo – Ella la miro con ternura, intentando que sus nervios se calmaran- Sufrieron un accidente de auto, iban en una carretera, y al parecer se le fueron los frenos, o al menos eso es lo que han descubierto hasta el momento. La policía no ha podido determinar, si fue un accidente real o un atentado- se encogió levemente de hombros- suele tardar mucho tiempo para descubrir que es lo que realmente sucedió.

-Hasta ese momento la niñera se dio cuenta que entonces la pequeña estaba sola- ¿Y la chiquilla? ¿Qué sucederá con ella?

-Eso quería comentarle- la muchacha se levantó y se dirigió hacia el pasillo de entrada, la Sra. Smith no podía creer que la pequeña rose hubiese quedado sola... Y en navidad- Estos papeles son todos los familiares que ella posee- dijo la abogada mientras volvía a su asiento- Pero, ninguno de ellos quiso recibirla en su hogar.

- ¡¿Qué?!- Susurro- Pero todos son su familia, deberían querer cuidarla- la joven negó lentamente.

-Yo quería preguntarle, si usted pudiera cuidar de ella, adoptarla...- La Sra. Smith inmediatamente negó con su cabeza.

-Por más que me duela no puedo cuidarla, me refiero a criarla como a una hija, ya estoy pasada de años para eso, y si me la llevo solo le causaría más problemas- <<Pobre criatura- sintió como unas lágrimas corrían por su rostro- Por qué tenía que pasar y hoy justamente.>>

-Entonces, ella irá al orfanato, pasaré por ella mañana por la noche- la abogada se levantó, con mucho pesar en su interior- Irá a Nueva York, ahí tendrá que pasar un tiempo hasta que alguien la adopte. Feliz navidad- dijo despidiéndose.

-Espero, todo te salga bien allá pequeña- dijo muy bajo, intentando que sus deseos se hicieran realidad para la pequeña... Sin saber, que, le iría peor. 

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Hola... "No estaba muerta, andaba de parranda" Sí, este fue el hiatus más largo que sufrió mi historia, y en serio agradezco que siguieran aquí después de tanto tiempo, realmente me han ayudado mucho. Y como les comentaba la última vez que escribí, mi teclado se había dañado, ahora ya tengo uno nuevo. E intentaré aprovechar, el tiempo que me quedan vacaciones para ponerme al día. Es un honor escribir para ustedes. 

Siento que el capítulo sea corto, pero, quería darles esta sorpresa en navidad, espero les guste y les agrade mi regreso. <3 

¡Feliz navidad! Sherlockian's 

My Reflection (Sherlock) (En edición) Where stories live. Discover now