O4|| Pequeño y lindo inocente.

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Pequeño y lindo inocente.

—Todo un día de preparación pero creo que este pollo ya está listo para ser horneado. Ahora si Jimin... —Dijo completamente agotada la pobre mujer entre quejas, mientras se sentaba en la mesa de la cocina junto al pequeño— Estoy libre y atenta, cuenteme sobre sus aventuras capitán ¿Que tal estuvo la escuela hoy?. —Pregunto la señora Park con una sonrisa que marcaba perfectamente sus dulces hoyuelos.

Era una mujer hermosa, de piel canela y cabello oscuro, muy pocas veces maquillada, no siempre le alcanzaba el tiempo para lograr destacar en apariencia, aún así era una mujer bella con facciones reconociblemente adorables.

Al igual que su pequeño ángel de ojos claros y rizos rubios.

—¡Estuvo increíble!. —Mintió con entusiasmo— Tengo un nuevo amigo, se llama Taehyung y es muy tierno. Adora la guerra de las galaxias al igual que yo, su papá acaba de regalarle un pequeño cachorro y dice que le puso Yeontan. —Dijo el pequeño con mejillas robustas y una adorable sonrisa.

—¡Eso es genial! Te dije que te iría de maravilla. —Festejo sonriente a lo cual Jimin se sintio orgulloso— ¿Y que paso con...?.

—¿YoonGi?. —La mujer asintió un tanto incomoda— Como siempre, pero esta vez estaba muy molesto, no quería dejarme ir a ningún lado... Solo me gritaba.

—YoonGi parece ser siempre un amigo complicado... ¿No es asi? pero hay veces en las que tu debes tomar las decisiones y no sólo para detener sus maldades si no para ayudarte a ti mismo, tu bienestar y tu felicidad van primero y si YoonGi opta por quitártela, bueno... Eso no es amistad. —Afirmó la mujer tomando las manos del pequeño— Un verdadero amigo es el que te cuida sin importar que, esta ahí para ti y te hace sentir feliz, no lo contrario, por eso me adelante y deje algunos medicamentos en tu mochila ¿los tomaste?.

—Claro que si...

Claro que no.

Era la cosa más asquerosa que había en este mundo, horrible, era amarga y de un sabor muy fuerte, ni siquiera tenia sabor a frutas o muñecos en el empaque.

Ademas YoonGi le dijo que si la tomaba se acabaría su amistad.

Claramente Jimin no deseaba eso, no quería separarse de el.

YoonGi suele ser malo de vez en cuando y aveces es muy controlador pero es su mejor amigo, es el unico que tiene y si lo pierde... Se quedará solo.

Nadie quiere quedarse solo.

Jimin sentía esa inexplicable protección a su lado, sentía comodidad incluso cuando la luz era apagada, sentía calidez en su tacto, cosa que ni su familia lograba.

Todo era como un sube y baja, aveces estamos bien, otras veces estamos mal pero seguimos queriendonos tanto como podemos.

Jimin era lindo a simple vista, asustaba al conocerlo.

No solo por la presencia de YoonGi, si no por su manera de hablar. Aveces hablaba de una manera inocente como cualquier niño pero otras veces sacaba temas de conversación que asustaban un poco a sus padres.

Como lo bonito que le parecía el sabor metálico de la sangre o su color, le gustaba que fuera cada vez mas oscura al guardarla. Cuando iba a sacarse la sangre, era el único niño que no lloraba, el más alegre cuando le sacaban la muestra y veía los pequeños frascos que estaban un tanto manchados de carmesí a los costados.

Esos gustos extraños empezaron a sus ocho años, cuando "conoció" a YoonGi.

Se encontraba en su pequeña habitación, las paredes tenían un estampado de naves espaciales y estrellitas fosforescentes pegadas en el techo. Varios juguetes en el suelo y todos los muebles de plástico, una pequeña precaución por parte del doctor.

—¿No te cae bien Taehyung?. — Pregunto con curiosidad el pequeño rubio mientras jugaba con su nave espacial de juguete.

—Es muy extraño, me da un mal presentimiento... —Contestó YoonGi con los brazos cruzados, parado justo en frente del rubio— No se si es por su sonrisa o el hecho de que siempre pregunte "¿Como te sientes Jimin? ¿Que es lo que sientes?" Es como si estuviera interesado en ti más que por precaución a tu bienestar, parece que el... Esta interesado en tu condición.

—¿Y eso es malo?. —YoonGi observo a Jimin con enojado pero el pequeño solo se encogió de hombros y siguió jugando— Es extraño que otro niño se preocupe por como me siento, es extraño que alguien se interese tanto por lo que sufro, la mayoría solo se aterra o le da nervios al acercarse pero Tae es distinto, yo realmente le preocupo y eso me hace sentir... Bien.

—¿Pero y si su curiosidad es más que por preocuparse sobre tu condición? ¿Y si viene a causa de puro interés?.

—Dices todo eso porque el no puede verte, si pudiera apuesto a que se llevarían genial.

—Lo digo porque siento que algo malo ocurrira si te juntas con el, además... No pasamos tiempo juntos por su culpa. Se suponía que jugarías a los peluches conmigo, ya había reservado a kumamon. —Dijo el pequeño abrazando un peluche.

YoonGi era un niño hermoso. Era bajo pero no más que Jimin, de piel tan blanca y suave al tacto. Tenía los ojos oscuros pero variaba en tonalidad y color; aveces eran azules, grises o castaños en si. Su cabello estaba despeinado y caía sobre sus cejas, su boquita era tan pequeña, adorable.

—¿Estas celoso?. —Cuestiono el rubio con una mirada pícara— No estés celoso, siempre jugaré contigo es solo que ahora iré a la escuela otra vez y no tendré tanto tiempo como antes.

—Ni siquiera podemos hablar, ahora solo buscas evitarme. —Dijo YoonGi mirando hacía otra parte— ¿Porque debes ir a la escuela?, ¿Porque necesitas más amigos? Me tienes a mi. —Se arrodilló quedando justamente al frente al rostro del pequeño rubio, entregándole el peluche en sus pequeñas manos— Para siempre.

—¿Para siempre?. —YoonGi sonrió con aquella expresión que impacientaba a Jimin— T-Tu deberías irte... Mamá dijo que tendrías que irte muy lejos, lo más pronto posible.

—Solo si así lo deseas... ¿Quieres que me vaya Jimine?. —Pregunto con un puchero en sus labios, demostrando una delicada y tierna inocencia.

—No quiero que te vayas... Eres... Eres mi amigo.

—El mejor, el único y último que necesitarás. —Se levanto y empezó a moverse alrededor de la habitación con lentitud, parecía una pequeña sombra moviéndose de lado a lado— La gente fuera de casa es mala Jimin, las personas son mentirosas y mal intencionadas, solo buscan destruir y dañar a los que buscan sueños. No quiero que eso te pase, deseo cuidarte del dolor que otros puedan causarte. —Tomó pasivamente a Jimin de las manos— Recuerda, si alguien me trata mal puedo soportarlo pero si alguien te lastimara...

—Tu no me dejarás ¿Verdad? Seremos amigos para siempre. 

—Cada día, hasta el último... Tal y como siempre lo he hecho. —YoonGi se sentó en la cama, observando como Jimin mantenía su mirada en el suelo— ¿En serio deseas eso Jimin?, ¿Quieres que me quedé?.

—Quiero que te quedes.

—¿Estás seguro? No habrá marcha atras... No podrás abandonarme y yo no podre abandonarte después.

—¿Porque me arrepentiria?. —Dijo mientras sonreía inclinando ligeramente la cabeza con ternura, tan inocente.

—Aunque traten de borrarme, yo siempre volveré... y seremos los mejores amigos cada día, cada hora, cada segundo. —El menor sintió como YoonGi le sonreía y tomaba su barbilla con delicadeza— Jugaremos mucho.

—¿Lo prometes?.

—Lo prometo... —YoonGi sonrió de una manera oscura y adorable.

Quien diría que esa promesa haría tanto daño para ambos.

Las promesas rompen al alma.

Darkside.

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Caught in a lie [Esquizofrenia] Yoonmin Kde žijí příběhy. Začni objevovat