5- Juraría que que nada me haría cambiar

201 31 13
                                    

『•◈ ────※{✧嵐✧}※──── ◈•』

Señala rápidamente el bosque, Amy, Bianca y Henry comienzan a avanzar, Kant aún tarda unos segundos para comenzar su marcha. Se ha quedado consternado, ¿cómo podría detener a una fiera del infierno con tan solo un par de armas? Él ha visto como los de élite superior cazan a dichas bestias, las jaulas especiales son una tortura para esos demonios, pues están selladas por todo el Buffet. Especialmente, selladas por los protectores espirituales.

Kant resopla al sostener su arma con fuerza.

—Bueno... de algo me tengo que morir

Dicho esto, da un paso hacia el frente y se pierde entre la maleza alta de los arbustos. Mientras tanto, Henry y Amy avanzan por el camino que a simple vista se ve menos peligroso. Las ramas se agitan débilmente por el viento, causando un crujido muy tenue entre ellas mismas. Amy mira de un lado a otro, a medida que continúa sus pasos, la densidad del bosque se vuelve cada vez más pesada, causándole cierto temor.
Sostiene su lanza con firmeza, inspirando fuertemente. En el exterior, el bosque tiene un aspecto aterrador, sin embargo, en el interior es mucho más lúgubre, pues ningún rayo de luz traspasa las hojas o ramas de los gigantescos árboles.

—Realmente admiro a las grandes élites...

—¿Ah si?

Henry la mira de reojo y Amy suspira.

—Es decir, no me sorprende que algunas de ellas no volvieran después de entrar aquí..., no se escucha nada, ni siquiera en la lejanía... incluso aunque no hemos avanzado gran cosa, no puedo escuchar el viento de afuera... —mira hacia arriba y después hacia delante. —los árboles son más grandes que los de un bosque promedio

Henry sonríe.

—¿Qué sucede Amy? ¿Tus nervios te están traicionando?

Ella le dedica una mirada traviesa y le da un codazo.

—¿De qué hablas? Al final seré yo quién te salve el trasero

—Sabemos que no es así... después de todo, soy yo quien más te protege, incluso con mi propia vida siempre voy a salvarte

Henry sonrió cálidamente hacia ella, Amy se limitó a mirarlo en silencio.
No quería admitirlo, pero estaba muy consciente de que él siempre estaría ahí para ella, y a pesar de que era lindo saberlo, también era preocupante...

Algún día podría aparecer una situación en la que, inevitablemente Amy se vería afectada, y por ello... Henry se sacrificaría, todo con tal de salvarla. Debido a eso, Amy trataba de mantener siempre una postura de "Yo también puedo protegerme sola".

—También piensa en ti...

—¿Eh?

—¿Qué haré si no tengo a mi compañero de cacería? —dijo al alzar la ceja. —¿A quién le voy a dar codazos después?

Él sonrió.

Pero dicho momento fue interrumpido por el sonido de una rama crujiendo a metros de distancia. Ambos tomaron una postura de defensa rápidamente, sostuvieron sus armas con fuerza y miraron de un lado a otro. Se escuchó como los arbustos chocaban unos con otros y como las hojas sacudidas caían al suelo.

"Quiero escapar..."

Esa voz era muy tenue, era tan pequeña como la de un niño perdido. Amy miró hacia su derecha, sintiendo el viento golpear sus mejillas con suavidad.

"Estoy perdido...
Y todo duele...
Está oscuro y no hay salida;
¿Hay salvación? Dime que la hay..."

Demonio de Pandora (#1 Saga Devoción Inmortal) EDITANDO Where stories live. Discover now