Capitulo 16

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Elizabeth despertó por el ruido que estaba en su cocina, ni un día y ya estaban molestando. Pero recordó que vivía sola. Saco su arma debajo de su almohada. Sus pies descalzos tocaron el suelo frío, camino con cuidado. Apretó su arma mientras se introducía a la cocina. Pero no había nadie, se deslizó hasta la sala. Una mano se poso en su hombro, la apartó de golpe se dió la vuelta mientras se agachaba y lograba patear sus pies logrando hacer que su contrario se cayera el suelo, al no estar tirada se levantó poniendo sus pies en cada costado del atacante apuntando su arma. Pero el contrario puso sus manos al frente.

—¡Espera ,espera!— dijo el. Elizabeth lo miro.

—¿Steve?— bajo el arma, lo analizó bien. Recordando que la noche anterior lo había invitado a dormir. Paso su mano por su cabello mientras se movía—. Lo siento— hizo una mueca. El SEAL se levantó con una mueca debido a lo frío que estaba el piso—. Espera... ¿Por qué no tienes camisa?

— Dijiste que no podía dormir en calzones— dijo el con tranquilidad mientras volvía a la cocina.

— Touché— le dijo con una sonrisa.

—¿Por qué no estás gritando?— Pregunto.

—He visto más torsos desnudos, comandante— le dijo tomando una manzana—. ¿Se puede saber por qué hace tanto ruido?

—¿Se puede saber por qué duermes con un arma? — Elizabeth entrecerró los ojos.

—Es una manía que me pego Ziva— hizo una mueca—. Además que bueno... Gajes del oficio.

El entendió, sirvió dos tazas de café.

—Con respecto al ruido, es que no sabia donde estaban tus cosas, me soprende que tengas tus estantes llenos, te fuiste 19 meses— le dijo sentándose frente a ella en la barra.

Ella se encogió de hombros.

— Supongo que fue Aarón— le sonrió—. Pero después de unos cinco meses compraré una casa— relamío sus labios.

—¿Te quedarás en Hawaii?

—No tengo trabajo, mis hermanos estudian aquí— dijo mientras tomaba un sorbo de café—. Supongo que todo estará bien que en algún momento.

El se quedó en silencio. Todo quedó en silencio, mientras bebían. Hasta que se rompió gracias el teléfono de Steve. Corrió hasta el sofá ,dónde las cobijas estaba dobladas. Elizabeth sabía que era su trabajo. El comandante de 5.0

—Lo siento, debo irme— le dijo mientras se ponía su camiseta.

—Que no te disparen— respondió mientras levantaba sus dedos en señal de amor y paz.

(...)

Habían pasado meses desde que Elizabeth estaba en la isla. Se había mudado, y ahora tenía una pequeña pastelería con el nombre “Angela” en memoria de madre. No tenía muchos clientes pero era lo suficiente para distraerse. Fue al psicólogo debido a sus alucinaciones, y sus sospechas fueron resueltas. Tenía estrés postraumático. Afortunadamente estaba recibiendo terapia. Sacando viejos traumas familares que ella no recordaba que estuvieran ahí. Espero su gafete de visita. Subió hasta donde estaba el cuartel de 5.0 lo recordaba por qué había estado arrestada, por qué golpeó a Clarisse y por qué si. Entró empujando la puerta de cristal. Estaban todos reunidos mirando algo en la pantalla, seguramente un caso nuevo.

—¡Aloha!— saludo— Detective— llamo la chica con su caja en alto.

—¡Ay dios, si!— sonrió agradecido—. Creí que lo olvidarías.

—Grace fue en la mañana antes de la escuela pidiéndolo por ti— dijo mientras se encogía de hombros, entregando. Danny recibió la caja mientras la abría rápidamente tomando un cupcake con una corbata de decoración.

ミSurvivorミ [Hawaii 5.0]Where stories live. Discover now