ミSurvivorミ [Hawaii 5.0]

Capitulo 24

Relamío sus labios mientras se acomodaba su traje anaranjado. La luz chocó en sus ojos lastimando los. Suspiró mientras salía de agujero como todos le decían. Ahí es donde los aislaban para que nos les hicieran daño o como castigo. Salió con cuidado acariciando la superficie de la paredes. La luz del sol fue todavía peor. Pero se acostumbró de inmediato. Sacudió un poco de polvo que había en su hombro. Su reciente roce con su padre le había abierto heridas, si, pero ella seguiría de pie. Era una sobreviviente. Gerald había apelado para que el castigo fuera revocado, quería que estuviera al aire pues aún era incrédulo ante la idea de que Elizabeth podía ser vulnerable en un ambiente muy diferente al ámbito policíaco o militar. Claramente no era consiente de que ella era más que una agente cualquiera.

—Liz— Charli tenía un golpe en su rostro, solo faltaban veinte años de condena.

—Cooper— repitió sin emoción.

—Ten, lo acabo de conseguir... Creo que ya estoy entendiendo las reglas de la cárcel.

Elizabeth recibió la botella de agua.

—¿Asi te hiciste el ojo?— señaló el golpe. El asintió no muy orgulloso.

Abrió la tapa mientras bebía con cierta necesidad. Soltando un sonido de satisfacción al terminar de beber toda el agua. Se sentó en una banca desocupada mientras buscaba al hombre que le protegía en la cárcel. Pero no estaba.

—Esta en su desayuno— informó—. Es una de las pocas personas con privilegios de comer cuando quiere.

Lizzie asintió. Disfruto del sol y el sonido. Hasta que el receso terminará. Mordió su labio. Los hombres podían ser algo dóciles si se trataba o intimidaba. En cambio las mujeres eran más agresivas con alguien que no fuera de su entorno. La correcional de mujeres no era un problema. Podía sobrevivir como lo hizo en Israel. En África en todos los lugares donde estuvo. Escuchó la alarma mientras todos eran escoltados hasta sus celdas. Charli se levantó sin esperar a su amiga. Elizabeth se enderezó para irse. Dándose cuenta de que ya estaba prácticamente solo todo el patio. Inflo su pecho con aire puro antes de dirigirse a su celda en la ala este. Pero dos brazos le detuvieron. Se giró con mala cara ignorando el hecho de las risas de aquellos guardias. Quiso volver a su rumbo hasta que volvió a ser detenida. Una mano se enrollo en su hombro. La alejó con brusquedad.

—Señorita D'Angelo— hablo con sorna uno de ellos—. Este es un mensaje de su padre...

—Quiere que sepa que tal vez el no puede golpearle... Pero nosotros.

Elizabeth abrió los labios. Detuvo a uno de ellos con una patada que lo desestabilizó cayendo al suelo. El segundos que en su placa decía Martin venía completamente impulsado. La azabache uso esa fuerza contra el, se inclinó hacia atrás para alejarse del ataque. Agarró al atacante del brazo mientras le intentaba dar el puñetazo. Lo jalo hacia ella y derribo su cuerpo utilizando una de sus piernas para golpear las de el haciéndolo caer de igual manera.

Elizabeth recibió dos puñetazos limpios en su plexo solar ocasionando que su aire se escapará de sus pulmones. Se alejó considerablemente mientras intentaba vanamente recuperar el aire. Pero colocó sus brazos a la altura de su cara para cubrirse. Los cuatro se veían furiosos. Cuando otro corrió hacia ella dió una vuelta mientras se preparaba para darle una patada directa a su mandíbula. El cayó de nuevo, inconsciente. Volvió a alejarse entonces sintió un jalón de cabello. Su espalda choco contra el suelo. Soltó un gruñido. Cuando se acercaban a ella los otros dos mientras el tercero le jalaba el cabello , pateó fuertemente la pantorrilla de uno que juro oir su hueso crujir. Enterró sus uñas en las manos de quién le jalaba el cabello logrando que le soltará. Se levantó inmediatamente, al último lo miro con frialdad antes de unir sus dedos corazón e índice para darle un "apuñalamiento" en el hoyo entre sus clavículas tan firme que logró que su faringe se hundiera evitando que respire. Pero no tan fuerte como para causarle daños en ella. Un gancho le atacó por el costado. Detuvo otro con su mano antes de que causará más daño. Lo jalo hacia ella ,rodeó su cuello con su brazo dominante, su codo estaba rozando su barbilla. Apretó mientras hacía para enfrente su cabeza logrando una llave perfecta. El último de pie intento ayudar a su compañero ,aunque dió un puñetazo en el rostro de la azabache rompiendo su labio está no soltó al su amigo hasta que terminó perdiendo la conciencia. Lo dejo en suelo.