Los chicos estaban almorzando en un bar del centro de Madrid, habían decidido salir esa mañana y comprar algunas cosas que necesitaban ya que tenían el día libre. Mientras comían comentaban ciertas cosas.
Simón: ¿Y que tienen pensado hacer para esta tarde perros?
Martín: No había pensado en ello ¿Qué propones Moncho?
Simón: Podríamos ir a visitar el museo del Prado, han abierto una sección nueva.
Isa: Ya lo tenías más que pensado Simón -dijo riendo-.
Nath: Villa, invita a Laura porfa -dijo mientras se apoyaba en el hombro de Simón-.
Villa: No sé Nath, no quiero molestarla quizás tiene cosas que hacer -Dijo rascándose la nuca nervioso-.
Isa: Venga Villa, así la vamos conociendo.
Villa: Bueno si lo ves así, le avisaré a ver si esta tarde está libre.
Después de confirmar la idea volvimos al hotel. Ya se acercaba la hora y cada uno se fueron a su cuarto, Pedro consiguió asignarle a cada uno una habitación individual. Mientras Villa terminaba de arreglarse Isa llamó a su puerta.
Villa: ¡Adelante!
Isa: ¿Cómo vas perro?
Villa: Ya estoy listo ¿Qué querías Isa? -Dijo sentándose en un sillón-.
Isa: ¿Al final Laura viene? -Dijo sentándose en el borde de la cama -.
Villa: Si, ahora iré a recogerla y nos veremos todos allí.
Isa: Villita ¿te puedo hacer una pregunta? -Villa asintió- ¿Tú que sientes por Laura?
Villa se quedó en silencio durante unos segundos sin saber exactamente que decir y aclarando bien las palabras que diría.
Villa: La verdad no sé lo que siento, tampoco sé si la veo como una amiga o como algo más. Pero sé que cuando estoy con ella soy feliz, se me para el mundo y me quedaría así toda la vida, me trata como una persona normal y no como un famoso, no lo sé seguro que está sonando todo esto cursi. -Isa rió-.
Isa: Usted amigo mío se está enamorando -Dijo mirando sonriente a Villa-.
Villa: ¿Tú crees? -Dijo mirando a Isa con curiosidad-.
Isa: No lo creo, lo afirmo y estoy seguro de que Laura estará en la misma situación que tú.
Isa se levantó y se fue de la habitación dejando a Villa pensando en lo que había dicho. Termino de prepararse y se dirigió donde todos estaban reunidos.
Martín: Muy bien ¿Ya estamos todos?
Simón: Sí, pero Villa ¿Laura va allí o vas tu a por ella?
Villa: Voy yo a recogerla, ir ya para allí y esperarnos así entramos juntos.
Todos asintieron y Villa cogió el coche y se dirigió a casa de Laura. Villa llegó a casa de Laura, se puso a mirar Instagram y de repente escucho como Laura abría la puerta de coche y entraba.
Laura: Buenas -Dijo y le dio dos besos en las mejillas-.
Villa: Es la primera vez que subes al coche y no dices ¿A dónde vamos? –Laura río-.
Laura: Buenos señor Villamil ¿A dónde vamos?
Villamil: No, ahora ya no sirve -Dijo con tono dramático-.
Laura: ¡CUIDADO! El drama se acerca. –Ambos se miraron y comenzaron a reír-.
Llegaron al museo y cuando ya aparcaron se dirigieron a donde estaban los chicos, ya allí todos saludaron a Laura y se dirigieron a la entrada. Nath se acercó a Laura para saludarla y las dos juntas se dirigieron a la entrada.
Nath: Menos mal que has venido, pensaba que me iba a quedar sola con esta manada de burros –Dijo y ambas rieron-.
Isa se acercó por detrás y le colocó los brazos en los hombros de ambas y se colocó entre las dos.
Isa: Saben que os he escuchado y me he ofendido –Dijo y los tres se pusieron a reír-.
Entraron a el museo y Nath se fue con Simón que se veía muy emocionado, Isa se fue a hablar con Martín y Villa se acercó a Laura. Cogió su mano y se pusieron a visitar el museo, fue cuestión de minutos que cada uno se esparciera por el museo quedando así Laura y Villamil solos.
Villa: ¿Te lo estás pasando bien?
Laura: He estado tantas veces aquí, que al final se me hace aburrido –Dijo mirando a Villa con una sonrisa nerviosa-.
Villa: Vámonos.
Laura: ¿Cómo? –Dijo extrañada-.
Villa: Vámonos- Dijo cogiendo la mano de Laura y dirigiéndose a la salida-.
Laura: Villa espera ¿Y los demás?
Villa: Son mayorcitos, se saben cuidar solos. - Dijo con una sonrisa que Laura copio-.
Salieron del museo aún cogidos de la mano y se dirigieron a la plaza de Callao hablando y riendo, juntos se sentían tan bien que hasta verse envueltos de gente no se dieron cuenta de que habían llegado. Mientras andaban por la plaza comenzaron a hablar.
Villa: Aquí fueron los comienzos de Morat –Dijo mirando hacia la parada de metro-.
Laura: Tiene que ser una gozada recorrer el mundo con tus amigos haciendo lo que te gusta -dijo sonriendo y Villa asintió- ¿Y cómo os conocisteis?
Villa: Estábamos en el mismo colegio y añadiendo que Martín y Simón son hermanos es como si nos conociéramos de toda la vida.
Laura: ¿Os conocéis desde pequeños? –Dijo sorprendida-.
Villa: Así es -Dijo caminando por la plaza cogiendo la mano de Laura-.
Comenzó a anochecer y se fueron al parque del Retiro a ver el atardecer. Cuando llegaron se sentaron en un banco, Laura apoyó su cabeza en el hombro de Villa y este pasó su brazo por encima de ella. Se quedaron en silencio disfrutando del momento y apreciando el atardecer. Cuando el sol se ocultó por completo, Laura levantó la cabeza y se topó con los ojos verdes de Villa. Ambos acortaron la distancia y se besaron, el beso era tierno y con un amor tan dulce como único. Ambos disfrutaron de aquel momento y de cada movimiento, eran como dos piezas de puzles que encajaban a la perfección. Cuando se separaron, se miraron a los ojos comprendieron mejor que nunca que ambos se estaban enamorando.
Villa y Laura se levantaron, Villa llevó a Laura a su casa. Cuando llegaron se quedaron en silencio en el coche.
Laura: ¿Por qué no te quedas a cenar? -Dijo algo nerviosa- Pensaba pedir una pizza y ver una película ¿Te parece bien viejito?
Villa: Estaré encantado. -Dijo con una sonrisa que no le cabía en la cara-.
Ambos subieron y mientras Laura pedía la pizza, Villa elegía la película. Ambos se tumbaron en el sofá mientras se abrazaban. Cuando terminó la película, Laura miro la hora y se dio cuenta de que ya era muy tarde.
Laura: ¿Te parece quedarte a dormir? Es muy tarde para que ahora vuelvas a el hotel -Dijo Laura levantando la cabeza para mirar a Villa que todavía estaba abrazándola en el sofá-.
Villa: Me parece una idea fantástica -Dijo y le dio un beso en la frente cosa que hizo que Laura sonriera-.
Laura se levantó y ambos se dirigieron a la habitación de Laura, esta le sacó la ropa que Villa le había dejado cuando se quedó ella a dormir en el hotel.
Laura: Se me olvido devolvértela y ahora nos viene de perlas. -Dijo riendo-.
Villa río y tomó la ropa mientras que Laura entraba en el baño para cambiarse. Ya listos ambos se metieron en la cama y se abrazaron, se quedaron en silencio mientras que Villa le daba suaves besos en la cabeza de Laura hasta que ambos se quedaron completamente dormidos.
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El chico del corazón de cristal
FanfictionEl amor aparece cuando uno menos se lo espera pero ¿Qué hacer cuando el amor te llega de golpe y pierdes el control de tu sentimientos?