Capítulo 38

1K 65 44
                                    


*Narra Laura*

Acababa de salir de la ducha con Villamil cuando nos pusimos a terminar de organizar las ultimas cosas.

Laura: No sé para qué lo colocamos tanto si nos vamos dentro de dos días.

Villamil: También es verdad –Dijo dejando de hacer las cosas para tumbarse en la cama-.

Laura: Gandul –Dijo mientras le miraba-.

Villamil: Por una vez tienes razón –Dijo mientras le miraba con una sonrisa-.

Laura: ¿Cómo que por una vez? –Dije haciéndome la ofendida, Villamil al darse cuenta se sentó en la cama-.

Villamil: Ven aquí microondas –Dijo mientras le miraba extrañada-.

Laura: ¿Cómo que microondas? –Dije mientras que Villa me abrazaba por la cintura sin levantarse de la cama-.

Villamil: Porque te calientas en mitad de tiempo –Dijo y yo comencé a reír-.

Laura: Si tú te enfadas más rápido que yo –Dije y el rio mientras asentía-.

Villamil: Pues nada, nos tocó ser microondas, pero microondas felices –Dijo levantando su vista y posando en mí esos ojos verdes que me volvían completamente loca-.

Empecé a acariciar cariñosamente el pelo de Villa mientras él permanecía abrazado a mí, se le veía tranquilo y relajado, pero de un momento a otro eso cambió. Villamil se tensó casi por completo en cuestión de segundos y se separó de mí.

Villamil: ¡LAURA! -Dijo alarmado mientras se llevaba las manos a la cabeza- En la ducha, DIOS NO –Dijo mientras yo le miraba sin entender nada-.

Laura: Relájate –Dije mientras tomaba con delicadeza sus manos para tranquilizarlo- ¿Qué te pasa? –Le pregunté, él tragó saliva y se relajó un poco-.

Villamil: Lo hicimos sin protección.

Mi cuerpo se paralizo por completo, mi cabeza se bloqueó, no podía decir nada ni sabía exactamente qué contestar, era algo que habíamos pasado por alto y eso nos podría afectar a ambos de forma drástica. No sabía qué hacer, estaba completamente bloqueada, no estaba lista para convertirme en madre. Villa al darse cuenta de mi bloqueo me abrazo.

Villamil: Esto se puede arreglar, solo hay que encontrar una farmacia para comprar las pastillas –Dijo Villa con la intención de hacerme ver que había solución y mi cuerpo se fue relajando poco a poco- Vamos a buscar una rápido.

Laura: No, tienes concierto dentro de nada –Dije mirando a Villa que me miraba preocupado, pero en su cara no faltaba una sonrisa con la que quería relajarme-.

Villamil: No te voy a dejar sola.

Laura: No estoy sola, llamo a Ali y ella me acompaña –Dije aún alterada por la situación-.

Villamil: Vale, pero relajate todo va a salir bien –Dijo acariciándome las manos con ternura-.

Laura: Eso espero, nos vemos en el concierto.

Salí de la habitación corriendo, la habitación de Alicia estaba bastante lejos de la mía y lo peor es que no sabía si estaba ahí, así que decidí llamarle mientras corría.

*Llamada telefónica*

Laura: ¿Dónde estás?

Alicia: En mi habitación.

Laura: No te muevas de allí –Dije con desesperación-.

Alicia: Vale –Dijo con un tono extrañado-.

El chico del corazón de cristalWhere stories live. Discover now