¿Te imaginas ser la última víctima de asesinato de alguien a quien creías amar y peor aun reencontrarse en el infierno?
*En proceso de corregir errores gramaticales y espero sus reacciones*
:D
Han pasado 3 días y no he sabido nada de Alastor, estaba bien familiarizada con la cacería gracias a mis abuelos, y con 1 día y medio hubiera bastado para cazar algún venado. Tal vez hubiera sido buena opción ofrecerme a acompañarlo, pero era tarde, solo me quedaba esperar a su llamado. Seguí entregando mis cartas y paquetes como siempre pero el día se sentía vacío ya que al encender la radio no escuchaba su seductora voz. La jornada laboral terminó y me dirigí a mi departamento, me detuve en la entrada mientras buscaba las llaves de la puerta en mi bolsa. El dueño de la tienda se asomó por la puerta de a lado y me llamó.
-Hola _____, alguien a venido a entregarte algo, espera aquí.- entro a la tienda y salió con algo en las manos - toma, linda.- me entregó una caja mediana que tenía una tarjeta amarrada con un pequeño lazo.
Le agradecí sinceramente por las molestias y entre al departamento. Me apresure a revisar que era esa caja y de quién, tomé la tarjeta y la abrí.
"Un lindo y especial detalle para la chica más linda y especial. PD: El taxista no fue fácil de disuadir para darme tu dirección, pero valió la pena para saber a donde debo mandar mis sentimientos. Cordialmente tuyo, Alastor"
Mi corazón latía fuertemente, mi sonrisa no dejaba mi rostro y en mi estómago volaban tantas mariposas que no sabía como contenerlas. Abrí la caja y pude ver un hermoso relicario dorado con una rosa grabada.
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Debajo del relicario se encontraba un pequeño sobre blanco, era una invitación.
"Señorita _____, Por medio de la presente, es usted invitada al baile formal de aniversario del grupo X fundador de la estación de radio, su confirmación de asistencia fue tomada como afirmativa, ya que la negativa no es una opción aceptable. Asistiré a encontrarme con usted en su domicilio el día Sábado a las 8:30 p.m. Mis más cordiales saludos, Alastor"
Corrí a mi habitación y me coloqué frente al espejo, abroche el collar alrededor de mi cuello y lo admiré por un largo tiempo. No podia esperar a que llegara el sábado y por fin verlo.
Encendí la radio para escuchar música mientras elegía mi atuendo para el baile, cuando la canción terminó una noticia de las desapariciones brotó por las bocinas.
-Interrumpimos la transmisión actual para dar una noticia al público, les informamos que se deben tomar medidas de precaución para evitar más desapariciones en la ciudad, si usted debe abandonar su casa durante la noche procure hacerlo acompañado de una o más personas, cualquier ayuda necesaria comuníquese con nosotros al 911 o a la oficina de policía más cercana.- Al terminar la noticia, la trasmisión continuó con más música.
No pude evitar inquietarme por ese anuncio, ¿Qué le estará pasando a esa gente desaparecida? ¿Estarán bien? ¿Cuanta gente ha desaparecido ya?, todas esas dudas pasaron por mi mente pero me tranquilizó la idea de que Alastor me acompañaría al baile.
