El secreto de un dulce témpano de hielo

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❌PROHIBIDO LEER SIN MÚSICA ❌

Pd: Si no les carga, la canción se llama "Sebastián Yatra, Reik - Un Año" A.K.A "Himno Volkacio"

Ponganla cuando vean este emoji "🎶"

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6 meses después

Los días buenos han sido escasos para la malla, poco a poco los policías iban cayendo a manos de las mafias. Los robos y persecuciones eran cada vez más exitosas para el lado oscuro. Eso no quitaba que el cuerpo había estado dando lo mejor de sí todo el tiempo, aunque esto no fuera lo suficiente para derrotar a la oscuridad de la ciudad.

Cansado de la mañana calurosa, un mediodía de almuerzo basura en el Burger King con un McFlurry en el McDonalds que era mejor que una cita en la cafetería de un hospital, una tarde llena de tiros y una noche donde solo pedía Vodka y dormir, Volkov finalizó con la cereza del pastel queriendo darse una ducha en los baños de Comisaría.

Sin embargo, sus planes aún no podían ser completados al darse cuenta que todas las duchas estaban siendo ocupadas por sus compañeros, con lo cual se retiró hacia los vestidores, donde paró en seco.

—Hernández —llamó Volkov, quien volteó a verlo confundido por el grito, con esto el ruso se dio cuenta de cómo se había comportado, suspirando y tranquilizandose— ¿Me puede decir que está haciendo con esa taquilla?

—Buenas noches, Comisario Volkov —saluda el menor colocando una caja de madera sobre la banca— Estoy limpiando las taquillas, eran del alumno Horacio Pèrez y Gu-Gustabo García... e-el Superintendente Conway me pidió limpiarlas, tenía muchos meses sin abrirse.

A paso lento el ruso caminó hacia la dirección del Oficial I, cuyo ascenso fue obtenido hace pocos meses por su buen servicio y gran utilidad que le hacia al cuerpo mediante el área administrativa.

Carlos había decidido quedarse en Comisaría como trabajo ya que los combates no era algo que le gustará demasiado, el hecho de solo ver sangre lo hacía querer desmayarse, dentro de esto tuvo que aprender a lidiar con ver a sus compañeros entrar a Comisaría bañados en ella.

—Yo la limpiaré —dijo el ruso, dándose cuenta que su voz había sonado más aguda de lo normal al tener un nudo en su garganta.

—No se preocupe, apenas estoy empezando —niega el menor con sus manos en el aire— Usted no ha podido dormir bien en los últimos meses, d-debe estar exhausto.

El Oficial I calló al segundo que los ojos con ojeras del ruso lo miraron fijamente, intimidandolo y hacíendolo sentir la cosa más insignificante que el mundo haya visto.

Se retiró de la taquilla con sus manos en el aire y rápidamente le acercó al superior el cesto de la basura para que tuviera todo a su disposición antes de retirarse por completo.

—En la caja se coloca lo que es de valor —señala el menor en la puerta de los vestidores— y en la papelera lo que se bota... —el ruso asiente mientras de su taquilla saca unos guantes de latex y se sienta en la banca frente a la taquilla

—Creo que lo noté con la etiqueta "Valioso" —toma la cesta y la eleva levemente con una sonrisa pequeña y burlona que Carlos imita con gracia asintiendo— Buenas noches, Hernández.

—Por favor, Comisario Volkov —su dulce voz en modo ruego llamó la atención del nombrado— Descanse.

🎶 <- El amor es más fuerte

El Volkacio pa' miWhere stories live. Discover now