Gamma | NamJin | Terminada

11

Un muchacho alto, de cabello oscuro y traje estaba esperando en la puerta principal del edificio junto a otra mujer con vestido y saco negros.

HoSeok se estacionó justo enfrente y rápidamente apareció un hombre para abrirle la puerta. SeokJin ya se conocía el protocolo y también esperó a que su puerta fuese abierta.

El Delta le entregó las llaves del auto y se acercó a SeokJin que estaba bajando, para tomarle la mano y besarla. Este pequeño acto no pasó desapercibida por los que esperaban en la puerta y las personas que estaban alrededor

— Vamos — Le dijo con suavidad. El Gamma no se inmutó ante el afecto y sólo asintió — Realmente serás duro de conquistar.

— Si, definitivamente — Y con manos entrelazadas comenzaron a caminar.

El muchacho abrió la puerta de cristal e hizo una reverencia ante el hijo del CEO y su acompañante.

— Buenos días , joven Jung — Dijeron al unísono y volvieron a incorporarse, pero no se atrevieron a mirarlo, se limitaron a mantener la cabeza gacha. Eran Betas al servicio de él.

Seokjin miró al rededor de la recepción y observo que no habían sido solo los inquilinos de afuera, sino que todos los que se encontraban ahí dentro también lo miraban sorprendidos, incluso la recepcionista, que era una Omega, no logró ocultar su rostro confundido cuando vio el agarre de protección y guía de su jefe.

— Señor, su padre lo espera en su oficina — El chico caminaba a la par que HoSeok — El señor Kim también está aquí.

— Supongo que es por eso que el joven Kim viene con usted, ¿No es así señor?— Había hablado la Beta que caminaba a un lado de SeokJin.

Se detuvo instantáneamente y volteó a ver a la chica que había chocado con la espalda del otro muchacho. Un silencio se hizo presente de la nada y aquellas personas que los miraban y susurraban, ahora solo miraban expectantes la escena.

SeokJin volteó a ver a la chica que se tensó y se inclinó ante HoSeok. Vio como el chico tragó saliva y se apartó para que su jefe pudiera verla de frente.

Como si de un animal se tratase, Seokjin comenzó a olfatear disimuladamente. Había desprendido feromonas territoriales que mostraban supremacía. Absolutamente todos, Omegas , Betas y Alfas del lugar, se sintieron intimidados  por aquel intenso aroma. Rápidamente se dispersaron. No querían ver al jefe reaccionar a un gesto tan fuera de lugar.

Él dio un paso a ella con una expresión de molestia.

— Eso no te incumbe — Había utilizado su voz de mando de manera fría y seca — ¿O si?

El aroma se hizo más intenso y las piernas de la chica temblaron.

— ¿Porqué una Beta que solo es una guía cree que tiene derecho a hablarme e interrumpir mi camino a una junta importante? ¿Serás tú la que haga el tratado con los Kim? ¿Eres tú la que responderá a la prensa?— La chica abrumada ante aquella imponente presencia, comenzó a llorar.

— Lo lamento, señor— Apenas logró pronunciar.

— Si no es un asunto de la empresa, no quiero que vuelvas a abrir la boca, ¿Entendido? — Ella asintió.

No importa que género seas, este siempre iba a ser superior.

Ese era el poder de un Delta.

Ahora agarró a SeokJin por la cintura y continuó caminando hasta llegar a un elevador y presionar el botón hacia arriba ignorando una que otra mirada que los juzgaba. Justamente habían estado ignorando unas cuantas miradas de ciertas personas que no se perdían ni un solo movimiento de ellos.