Gamma | NamJin | Terminada

18

|Contenido +18|

SeokJin se estaba desesperando al no poder mantenerse de pie. Intentaba sostenerse de la orilla de aquella cama para caminar hacia la puerta e ir a reclamarle a las personas que lo habían arrastrado ahí.

Estaba teniendo una pelea interna con su zorro, sobre quien llevaría el control de la situación pues desde que la alta mujer lo había llevado a una habitación alejada de la entrada, el olor a pino se intensificó y lo debilitó.

Su vista estaba un poco nublada y el dolor de cabeza iba y venía.

¿Qué sucede contigo? Controlate SeokJin, dijo para sí mismo y respiró nuevamente profundo, creyendo que de esa manera, lograría calmar a su zorro y sus feromonas. Es lo que hacía para inhibir su celo y su aroma, pero esta vez no funcionó. No tenía fuerza suficiente ni siquiera para mover las piernas.

Como consecuencia, el zorro aprovechó ese gran bocado de aire inundado con el aroma de un Alfa para tomar energía y salir un poco más. Sintió su cuello arder cuando  una descarga eléctrica lo atravesó llegando hasta su húmedo trasero. Ese lugar había reactivado su celo.

— Basta...— Soltó cuando otra descarga apareció. Rendido, cayó sobre mis sábanas aprentandolas para no soltar un gemido— Por favor...

Logró girarse un poco para acomodarse mejor y miró a una de las paredes, donde había un clóset y un espejo largo. Vio su reflejo y no pudo evitar sentir vergüenza, lástima y miedo al ver todo el traje que tenía encima descolocado. Su cabello estaba hecho un caos y en su cuello ardiente gotitas de sudor resbalaban de manera vertical.

Eso es lo que más odiaba de ser un gamma. Lucir débil y patético.

Continuó con su intento de relajación, escuchando los ruidos del exterior atento desviándose de su situación. Las puertas de los autos y otra habitaciones se abrían y cerraban con constantes murmullos de lo que, para el eran trabajadores, chocaban lento contra la pared además de unas risas suaves que provenían del corredor.

¿Dónde diablos estoy?

Olfateo levemente cuando, entre el pino, el aroma a hierbabuena se intensificó y tomó espacio en sus pensamientos. Mordió su labio inferior para limitar las palpitaciones de su entrepierna. Tenía años sin experimentar eso, y vaya que lo recordaba como la mierda.

Los pasos se volvieron más rápidos y en un momento la puerta se abrió repentinamente dejando ver al Alfa sudando y con los ojos abiertos, acechando a todos. Unos pasos que lo seguían, disminuyeron y se mantuvieron en la entrada.

— Hyung...— Dijo JungKook cansado de perseguirlo — Yo no logro olfatear na- Oh...

Después de que el líder del clan le escupiera en la cara a NamJoon que jamás mereció a Halsey, inmediatamente se defendió y gruñó.

Pero estamos hablando de la mafia y aquel muchacho audaz se estaba relajando demasiado ante la presencia del otro y esto significaba menor confianza y lealtad ante él, por ello, un golpe no fue lo que se extrañó ahí.

Bang PD se había levantado y le estampó un puñetazo en la mejilla que lo hizo retroceder unos cuantos pasos. No hizo ni una mueca de dolor, solo colocó su mano en su barbilla y regresó con su mirada al frente.

YoonGi y los otros chicos sabían que eso ocurriría, por ello tampoco hicieron nada teniendo en cuenta uno de los dichos del clan.

"El mal agradecido siempre olvida la mano que lo ayudó"

Sin embargo, hay que admitir que estaba siendo muy suave.

— Ella era la Omega correcta para mi vida — Dijo fríamente— Usted sabe cual fue la razón de su pérdida, así que limítese sus palabras mi señor.