Diez

799 69 73
                                    

BIENVENIDXS A LA SEMANA LLAMAS : Día 1/7

***

—Nena —murmura alguien en mi oído y unas manos me recorren el cuerpo llegando a zonas prohibidas—, me tienes muy cachondo.

En medio de la oscuridad gimo y me retuerzo cuando me toca. Me giro entre sus brazos y noto el delicioso olor de la colonia de Ethan, no lleva camiseta y puedo tocar su pecho musculoso todo lo que quiera. 

—Tengo ganas de follarte —murmura besando mi cuello.

Le rodeo el cuello apoyándome sobre él.

—Quédate así un rato —murmuro medio adormilada de lo cansada que estoy.

—Nena...—se queja en mi oído.

—Calla —respondo ocultando la cara en su cuello.

Estaba demasiado cansada para pensar con claridad sabe dios a que hora. Me había pasado la noche del día anterior despierta esperando que Ethan me llamara, ya que era el segundo día que pasaba fuera, pero no lo hizo y yo esperé hasta muy tarde viendo como estaba conectado pero ni siquiera me escribía. 

En cuanto noté que se hizo de día al abrir los ojos y tocar la cama me la encontré vacía. Ya estaba acostumbrada a soñar con Ethan pero esta vez despertar y pensar que no es real me hace desilusiarnarme mas. 

Me doy una ducha larga y relajante antes de salir hacia la cocina cuando oigo ruidos por la casa. Karen no trabaja los fines de semana a menos que se le pida, entonces ahora como comienza la semana imagino que viene a limpiar, ya que sabrá que Ethan no estuvo estos dos días.

Llego a la cocina y la encuentro de espaldas a mi cocinando algo que desprende un olor delicioso por toda la casa. Entonces siento una presencia detrás de mi que carraspea, me giro y me lo encuentro tan guapo vestido con un traje azul marino que le queda perfecto.

No fue un sueño, fue real lo que sentí esta mañana.

—¡Mi amor! —sonrío y salto sobre el aferrándome a su torso como un mono—. Te eché mucho de menos.

—Yo también a ti.

—Ayer no me llamaste —hago pucheros.

—Quería que crecieran tus ansias de verme —responde apretándome el culo—, pero ya veo que no tenías muchas esta mañana.

Es oficial que no fue un sueño cuando sentí que me tocaba y me murmuraba guarradas en el oído.

—Estaba casada —respondo como una niña pequeña—. Después hacemos lo que tu quieras —susurro sensual en su oído para que Karen no me oiga. 

Ethan sonríe pegando su boca a la mía:—Estoy deseando hacer contigo lo que quiera.

Me remuevo sobre sus brazos. Suena tan tentador cuando lo dice el. Le beso los labios con desesperación y noto un sabor delicioso que me hace gemir.

—Sabes a fresa —me río.

—¿Como no? Si este troglodita ya se comió tres vasos de gelatina —dice Karen a nuestro lado sirviendo unas jugosas tortitas.

Miro a Ethan y me río.

—Esta rica —se excusa encogiéndose de hombros.

—¿Más que yo? —pregunto trazando al linea de su mandíbula.

—No hay nada mas delicioso que tú, nena.

Le muerdo el labio inferior tirando con fuerza. Mis ansias por tenerle habían crecido demasiado estos dos días y ahora mismo me siento como una niña pequeña a la que le regalaron el juguete que más deseaba y esta tan encantada que de tanto jugar acabará rompiendolo. Y ahora mismo me siento igual quiero jugar tanto con el que podría exprimir hasta la última gota de deseo y pasión que lleva dentro.

Llama de la pasión ✔️ [Llamas #2]Where stories live. Discover now