Veinte

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Gimo, jadeo, grito, me muevo buscando más y más placer.

Su lengua tortuosa está entre mis piernas lambiendo y acariciando como le place volviéndome loca. Trato de mover la cintura para buscar más contacto cuando lame despacio desesperándome pero me tiene bien sujeta y presiona su mano en mi pelvis manteniéndome quieta contra la cama.

Apenas acababa de despertar porque teníamos que ir al trabajo y después de la semana maravillosa de descanso y diversión cerca de los Everglades no tenía ganas de volver a la oficina y nada más despertarse Ethan ya lo tenía entre las piernas para convencerme de ir a trabajar usando esa portentosa lengua hecha por el diablo para el más tortuoso y delicioso pecado.

—Joder —sonrío—, es impresionante lo bueno que eres con la lengua para algo más que para alabarte a ti mismo.

—Sabes de sobra que soy muy bueno en todo lo que me propongo —alardea apoyándose en el codo.

—Mejor sigue usando la lengua en mi cuerpo —lo agarro del cuello y enredo mi lengua con la suya—, es más útil para eso.

—En tu cuerpo quiero usar algo más que mi lengua —responde pellizcándome en la cintura.

—Ya usas más que tu lengua en mí todos los días.

Aparto la sabana de mi cuerpo y me pongo en pie aun temblorosa por el orgasmo que acabo de tener. Entro en el armario para buscar la ropa que me pondré hoy, un vestido color crema corto y ajustado de mangas y botas altas de tacón. Lo más seguro es que acabe sobre el escritorio de Ethan así que es más fácil de quitar y de poner y a él le vuelven loco las botas negras de terciopelo.

—Hablo enserio nena —se incorpora cuando salgo del armario sentándose contra el cabecero de la cama—. Quiero usar algo más en ti.

Dejo la ropa sobre la cama y frunzo el ceño.

—¿De que hablas?

Una sonrisa traviesa cruza sus gruesos y rosados labios poniéndome los pelos de punta. Cuando sonríe así puedo esperarme cualquier cosa.

Se inclina hacia el cajón de abajo de su mesilla de noche y casi se me salen los ojos de las órbitas cuando veo el extraño vibrado con forma de huevo alargado con un pequeño cordel.

—¿Qué es eso? —pronuncio despacio con la esperanza de estar viendo mal.

—Algo con lo que pienso divertirme mucho, y tú más aún —extiende la mano para coger su móvil donde toca la pantalla varias veces y el pequeño huevo de color rosa que descansa en su mano empieza a vibrar ligeramente.

—No sé que planeas hacer con eso pero ni de broma —sentencio cogiendo mi ropa interior para irme al baño.

Antes de que pueda quitarme el pijama ya tengo a Ethan detrás.

—Tienes que probarlo antes de decir que no, nena —se pega a mi espalda y su olor masculino llega a mi nariz embotando mis sentidos.

Aparta el pelo de mi hombro y pega sus labios a la piel sensible detrás de mi oreja y baja por mi cuello. La imagen erótica de nosotros dos así de pegados se refleja en el espejo, el calor en mi vientre se hace más intenso y la humedad entre mis piernas aumenta.

—Lo vas a disfrutar mucho —murmura mordiendo el lóbulo de mi oreja paseando sus manos por mi cuerpo—. Solo déjame...

Su mano derecha baja por mi vientre levantando la camiseta dejándome expuesta ya que me había quitado las bragas nada más despertar. Sigue bajando hasta que su dedo me roza y nota lo mojada que estoy y sonríe contra mi cuello.

Llama de la pasión ✔️ [Llamas #2]Dove le storie prendono vita. Scoprilo ora