CAPÍTULO 31

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Una semana después de que regresaran de Estados Unidos, el trabajo de la Hacienda y el Rancho aumento tanto que Rogelio y Paula casi no tenían tiempo de verse en el día, solo por las noches, pero con el exceso de labores, lo único que él deseaba era descansar. Margarito volvió a la escuela y Alejandro se fue a Tuxtla tres días antes de la audiencia de Carlos

Fonda de Macaria y Ulises.

El día de la audiencia había llegado y desde muy temprano Rogelio salió de la Hacienda rumbo a Tuxtla. Paula y Margarito lo acompañaron hasta San Gabriel para despedirlo. Cuando se fue, el jovencito se dirigió a la escuela y ella a la fonda a tomar un jugo. Se encontraba un poco deprimida pues los meses más importantes de su embarazo los estaba viviendo sola.

Macaria: ¿Te sucede algo Paula?

AP: (¿?), No Macaria, ¿por qué la pregunta?

Macaria: Ese jugo lo traje hace media hora y aún no lo pruebas. También tu rostro se ve triste.

AP: Creo que sigo con los ascos y por eso me ves así.

Macaria: ¿A quién quieres engañar?, vi cuando la camioneta del patrón pasó por aquí y al parecer salió del pueblo. Eso significa que se fue lejos.

AP: Tiene un citatorio para la audiencia del hombre que me estuvo molestando, ¿sí lo recuerdas?

Macaria: ¡Cómo olvidarlo!, si hasta el patrón tuvo que darle sus buenos catres para que la dejara en paz, (medita), oiga, pero si el problema fue aquí, ¿por qué salió del pueblo?

AP: Porque el tipo tiene una demanda por intento de homicidio en Santa Catalina y otras del D. F. por hostigamiento, y tú sabes que todo eso es atendido en Tuxtla.

Macaria: ¡Sí es cierto!, (mira hacia la calle), bueno, yo me retiro, ahí viene otra persona igual de triste porque está solita y sé que juntas podrán darse ánimos.

Paula voltea y ve a su amiga subiendo la escalera.

Dany: (sentándose), Por tu cara no necesito preguntar si ya se fue Rogelio.

AP: No lo tuve ni una semana y ya se fue de nuevo. Además casi no lo veo por todo el trabajo que tiene.

Dany: Según Alejandro, en cuanto se estabilicen los pedidos a surtir para el señor Sanders, las cosas se irán más tranquilas y por eso Rogelio está trabajando muy duro... quiere estar contigo unos días antes de que nazca mi sobrino.

AP: Sí eso es verdad entonces me alegra que se esfuerce, pero la otra parte no deja de preocuparse por su salud.

Dany: Rogelio es muy fuerte, aguanta eso y más.

AP: No te creas, lleva meses sobre esforzándose, (trata de sonreír), pero dime, ¿tú qué tal?, no has querido contarme lo que sucedió cuando te llevaste a Alejandro el día que volvieron de Estados Unidos. Me intrigó mucho porque después él comenzó a regalarte margaritas, ¿a ti te gustan las margaritas?

Dany: ¡Ahora sí!, aunque no pasó nada especial, al menos no lo que yo esperaba.

AP: Sé más específica, ¡yo sí te cuento lo mío con Rogelio y tú te guardas todo!

Dany: Tú porque no te da vergüenza darme detalles, (sonríe), bueno, la verdad necesito contarte esto porque si no me muero de la emoción.

AP: ¿Te estás refiriendo a lo que creo que es?

Dany: ¡Eres igualita a Rogelio!, lamento decepcionarte pero no es lo que supones, (suspira), para mi mala suerte.

AP: ¡Ya no me tengas en ascuas y cuéntame que pasó!

LQNP: HISTORIA DE AMORWhere stories live. Discover now