Capitulo 1. La anormalidad

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El universo se dividió en Mundo Celestial, Mundo Demonio y Mundo Humano. Entre los tres, el Mundo Humano estaba en el estado más bajo.

Sin embargo, aparte de los tres mundos, había otro mundo llamado Inframundo.

El inframundo gobernaba el inframundo y el mundo fantasma. Entonces, incluso el Mundo Celestial y el Mundo Demonio no pudieron superar la posición del Inframundo.

Porque los humanos, los dioses o los demonios tendrían que entrar en el inframundo después de su muerte, de lo contrario se convertirían en almas errantes y es posible que nunca se reencarnaran.

El inframundo era el lugar donde se reencarnaban todas las almas errantes. Solo las almas errantes que pasaron la revisión del Palacio de la Transmigración podían ingresar al Inframundo. Sin embargo, la fecha de su reencarnación dependía de las cosas que habían hecho en su última vida. Y el Palacio del Infierno haría el juicio final.

Las almas afortunadas errantes podrían reencarnarse en el próximo segundo.

En cuanto a los desafortunados, tendrían que esperar cientos de años o incluso más.

El Mundo Fantasma era el destino de las almas errantes que habían matado a personas en su última vida.

Las almas errantes con pecados leves podrían ir al Inframundo para la Reencarnación después de que sus pecados hayan sido limpiados. Sin embargo, los que tenían pecados mayores tendrían que ser sometidos a todo tipo de sufrimientos en lugares como el Infierno del Loto Rojo hasta que se limpiaran todas sus pecados. Aun así, tuvieron que esperar cientos o miles de años para reencarnarse.

Sin embargo, la revisión del Palacio de la Transmigración fue la primera etapa antes de que cualquier alma errante fuera a los dos mundos sobre el suelo.

Sin embargo, la revisión del Palacio de la Transmigración fue la primera etapa antes de que cualquier alma errante fuera a los dos mundos sobre el suelo.

Por ejemplo, el hombre de blanco llevó al erudito al Palacio de la Transmigración.

Normalmente, una persona muerta se convertiría en dos tipos de almas errantes. El primer tipo era de los que habían tenido una muerte natural, como morir de vejez o enfermedad. Este tipo de alma estuvo inconsciente por un tiempo después de la muerte. Por lo tanto, el alma volaría al Palacio de la Transmigración por su cuenta para aceptar la revisión.

El otro tipo era de las personas que murieron accidentalmente, como el erudito que había sido asesinado por un carro.

Las personas que murieron de forma no natural siempre tuvieron una fuerte voluntad de supervivencia. Por lo tanto, sus almas todavía tenían conciencia. Y este tipo de alma debe ser traída de regreso por oficiales fantasmas o de lo contrario tendían a vagar por el universo y convertirse en un fantasma para siempre una vez que el tiempo para ir al Palacio de la Transmigración fuera excedido.

El hombre de blanco no era un verdadero oficial fantasma. De hecho, era el asistente del señor del Palacio de la Transmigración.

Un hombre de alto estatus como él no estaba a cargo de tareas como atrapar almas. Sin embargo, durante los últimos cien años, el número de almas de las personas que habían muerto en un accidente siguió aumentando, el Palacio de Transmigración estaba tan escaso de personal que incluso él tuvo que salir para atrapar un alma.

ERDIYSA PRIMERA PARTEOnde histórias criam vida. Descubra agora