ERDIYSA PRIMERA PARTE

Capitulo 48. Fuerte oponente

Aunque la gente inferior había perdido su estatus de noble, los que trabajaban en los puestos importantes no estaban influenciados en absoluto.

Las personas inferiores sin gran poder no pudieron obtener esos altos cargos. Es posible que hayan obtenido esas publicaciones a través de conexiones, lo que hizo que algunas personas se sintieran descontentas. Sin embargo, las personas inferiores que estaban en las altas posiciones realmente poseían una gran fuerza, como Qing Mingyu.

Dado que pudo convertirse en el líder del Groupo de Caza Verde Abismal, su fuerza no debe pasarse por alto. Además, este hombre también se destacó en la generación joven por su notable talento.

Qing Mingyu estaba en el tercer grado del reino del Rey Dios, lo que significaba que su nivel de cultivo era solo dos grados más bajo que el Señor Oscuro Nether.

Sin embargo, si se tuviera en cuenta su edad, todos se sorprenderían de lo talentoso que era porque Qing Mingyu no había cumplido los cien años.

Causó revuelo en la Ciudad de la Noche de Descanso debido a su talento. En ese momento, todos lo adoraban como si fuera la estrella más brillante del cielo que atenuaba otras estrellas a su alrededor.

En ese momento, Qing Mingyu tenía a toda la Familia Nether como su apoyo, por lo que su velocidad de cultivo fue tremenda.

Después de haber tomado todas esas excelentes píldoras, su nivel de cultivo avanzó rápidamente. Hace unos dos años, atravesó el primer grado del reino del Rey Dios y alcanzó el segundo grado.

Sus logros tuvieron algo que ver con la ayuda de la Familia Nether, pero su propio don también fue un factor importante. Sin su fuerte percepción, no podría alcanzar este nivel.

En ese momento, todos sabían que solo sería cuestión de tiempo para que Qing Mingyu estuviera en una posición más alta.

Sin embargo, cuando la Familia Nether quiso enviar a Qing Mingyu al Reino de Dios y los Demonios, este joven tomó una decisión que superó todas las expectativas.

Decidió quedarse en el Inframundo y se unió al Groupo de Caza Verde Abismal por su cuenta.

La Familia Nether no quería que Qing Mingyu, el heredero legítimo de la familia, se quedara en el Inframundo. Aunque este maravilloso mundo estaba protegido por el Rey del Inframundo, también había demasiadas restricciones que iban en desventaja para el desarrollo de un cultivador. Cualquiera que quisiera alcanzar un nivel más alto de cultivo tenía que pasar por dificultades en lugares peligrosos, porque el potencial de uno solo podía inspirarse en batallas de vida o muerte.

Por lo tanto, un hombre talentoso como Qing Mingyu estaba destinado a ir al Reino de Dios y los Demonios.

Sin embargo, su decisión fue vista como una gran lástima.

Nadie sabía por qué se unió al Groupo de Caza Verde Abismal, pero todos fueron testigos de su talento y su arduo trabajo.

En solo dos años, atravesó el segundo grado del reino del Rey Dios y alcanzó el tercer grado sin tomar ninguna píldora de la Familia Nether. Ahora su fuerza era superada solo por el Señor Oscuro Nether, quien era considerado como la persona más poderosa de la Familia Nether por los forasteros. Como todos estaban asombrados por sus logros, también tenían algunas suposiciones de su intención de unirse al Groupo de Caza Verde Abismal nuevamente.

Además, este hombre talentoso, excepcional y extremadamente guapo cautivó a toneladas de chicas del Inframundo.

Tanto en el Groupo de Caza Verde Abismal como en la Ciudad de la Noche de Descanso, Qing Mingyu era muy popular.

Feng Xi nunca podría alcanzarlo en ese sentido.

Feng Xi le pidió a Dios de los Libros que presentara toda la información sobre Qing Mingyu para aprender más sobre la persona con la que se llevaría bien en el futuro. Mientras Feng Xi escuchaba la historia de Qing Mingyu, quedó muy impresionado.

"Maestro, los hombres nunca pueden ser juzgados por su apariencia. No asuma que es fácil llevarse bien con los talentos. En realidad, el personaje de Qing Mingyu es bastante extraño y debe tener un secreto en su corazón. Aunque todos elogian que sea talentoso y tolerante, todavía no puedes creer los rumores. Creo que es un tipo insondable. Si te unes al Grupo de Caza, ¡debes tener cuidado con este tipo! " El Dios de los Libros parecía conocer algunos secretos, pero no podía decirlos en voz alta. Sin embargo, todavía advirtió a Feng Xi que tuviera cuidado con Qing Mingyu.

"No se preocupe. Todavía no me he unido a ese grupo. Además, ¿me veo como alguien que es fácil de ser intimidado? "

Aunque Feng Xi sabía que Dios de los libros solo se preocupaba por él, no pudo evitar quejarse de eso.

"Maestro, no tome mis palabras descuidadamente. Qing Mingyu es realmente un tipo duro ". Al ver que Feng Xi seguía siendo descuidado al respecto, Dios de los libros dijo eso nuevamente.

"Ya lo has dicho".

El Dios de los Libros, después de mirar a su alrededor y dudar por un tiempo, se acercó a Feng Xi y dijo en voz baja: "Maestro, le diré un secreto sobre Qing Mingyu, pero debe prometerme que no se lo contará a nadie más. De lo contrario, las cosas se pondrán feas ".

"¿Que secreto?" A Feng Xi le encantaba escuchar a otros contar secretos. Le hizo sentir como si hubiera encontrado las debilidades de otra persona.

El Dios de los Libros seguía susurrando al oído de Feng Xi.

Después de un tiempo, Feng Xi de repente abrió mucho los ojos y soltó: "De ninguna manera, quieres decir que él ... Eh ..."

Dios de los Libros cubrió la boca de Feng Xi de inmediato con terror, temiendo que Feng Xi dijera ese secreto en voz alta. Si El Rey del Inframundo supiera de esto, el Dios de los Libros estaría condenado. Luego dijo: "Maestro, baja la voz, no puedes decir el secreto, ¿recuerdas?"

"No dejaré que obtenga lo que quiere". Feng Xi dijo eso con firmeza con una mirada seria, que parecía haber tomado una decisión importante.

Dios de los libros se preocupó un poco. Sintió que no debería haberle dicho el secreto a Feng Xi Qing Mingyu. Sin embargo, a veces le resultaba difícil no escuchar esos secretos. A algunas personas les encantaba contar secretos a los libros. Siempre que esos libros que también eran sus amigos supieran sobre los secretos de los demás, le informarían de inmediato. ¡Qué podía hacer al respecto!

Al ver a su maestro en un estado de ánimo combativo, Dios de los libros no pudo evitar tocarse la nariz y pensar: "¡No es mi culpa!"

Esa era una misión para él que le había sido encomendada por el Rey del Inframundo.

El Dios de los Libros solo había seguido la orden del Rey. Si Feng Xi se enterara de esto después, Dios de los Libros aún podría afirmar que el Rey debería ser responsable de todo.

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