XV. Choque de consciencia

4K 399 34
                                    

𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 𝑶𝒍𝒊𝒗𝒆𝒓:

Me levanté de mi cama y me vestí, hoy va a ser un día largo. Después de desayunar en el gran salón tuve clases de defensa contra las artes oscuras y al terminar me reuní con varios chicos y chicas de mi año en la biblioteca para una sesión de estudio, como hacíamos todos los viernes, aun que hoy fue mas corta por que todos quieren asistir al partido de Slytherin contra Ravenclaw que sería en una horas. De camino a mi sala común me encontré con Mateo y ambos caminamos hacia la misma dirección.

- ¿Iras hoy? - Me preguntó, yo lo miré pensando una respuesta. La verdad es que no tenía ganas, después de lo ocurrido con Adhara no la había vuelto a ver.

- No lo sé, tengo que pensarlo - Respondí finalmente.

- Solo voy a decir que deberías hablar con Adhara - Revoleé los ojos y suspiré, este era un tema que ya habíamos hablado en el cuarto -. Amigo, ella estuvo mal pero hoy capaz tenga problemas y es posible que no hayas escuchado bien ese día - Me detuve y lo miré seriamente, harto de discutir sobre esto.

- Basta ¿Sí? Ella me manipuló y usó. Yo no soy un juguete con el que pueden practicar - Dije enojado, aunque incluso ese comentario me dolió - Ademas no sabemos si es verdad lo que escuché en los vestuarios, capaz solo estaban bromeando. No creo que perjudiquen a su propio equipo. Ahora me voy a la sala común, Percy me espera para arreglar detalles de los horarios del Quidditch y sabes lo insoportable que se pone cuando soy impuntual - Me fui sin dejarle responder. Capaz si deba hablar con Adhara pero estoy demasiado molesto como para poner atencion, preferí concentrarme en otras cosas.

Después de mi reunión con Percy en la que arreglamos horarios y le di los nombres de los jugadores para que no les baje puntos por estar fuera del castillo en determinadas horas, caminé hacia mi habitación, faltaba una hora para el juego y todavía estaba considerando ir, pero tenía tiempo para pensarlo. Me acosté sobre la cama y miré el techo. Entre tantos pensamientos me quedé dormido.


────────── ☪◦•


- Oliver... ¡Oliver...! - Escuché como alguien me susurraba, fui abriendo mis ojos poco a poco, Mateo estaba llamándome - Al fin despiertas, en unos minutos será el juego, ¿Vendrás? - Me lo pensé de vuelta, además de que estaba recién levantado y no tenia la noción de tiempo y espacio - Oye, si es por Adhara, no todo Slytherin tiene su cara. Sera un partido interesante, escuche que los de Ravenclaw armaron una estrategia impresionante este año, tienes que venir - Suspiré una vez mas. Mateo siempre me hace pensar las cosas dos veces.

- Bien, déjame cambiarme de ropa, peinarme y vamos - Sonrió y asintió. Yo me levanté, me preparé y una vez listo salimos hacia el campo de Quidditch.

Cuando llegamos las gradas estaban llenas de gente, por suerte conseguimos un buen lugar y nos quedamos allí. Una vez comenzó el partido los jugadores volaron por la cancha con tal rapidez que casi no se notaban los movimientos. A penas empezaron Ravenclaw anotó 10 puntos gracias a unos buenos pases, pero la victoria no les duró mucho porque Adhara anotó otros 10 puntos para su equipo, yo sonreí y me alegré, aunque me castigué mentalmente por eso.

Después de un rato el partido iba 60 a 50, ganando Slytherin. Miré a Adhara, estaba radiante. A pesar de que Ravenclaw era muy estratégico ella no se rendía e intentaba dar lo mejor de si misma. De un momento a otro, su escoba se detuvo, ella se quedó mirando a la nada, como si estuviese perdida, como si estuviese... confundida.

Me hice paso entre la gente intentando acercarme a los profesores pero se me hizo tarde, su escoba comenzó a dar vueltas y ella no pudo mantener el equilibrio, la escoba subió demasiado alto y en un momento estaba tan arriba que Adhara cayó radicalmente. Todos miraban aterrados y por suerte Dumbledore puso a tiempo un hechizo debajo de ella para que no se lastimara tanto, sin embargo no pudo evitar el golpe. El juego se detuvo, los cazadores pararon de ir tras la quaffle, los guardianes dejaron su estado de alerta, los golpeadores tiraron sus bates y los buscadores se quedaron quietos. Yo corrí con todas mis fuerzas hacia donde ella estaba.

- ¡ADHARA! - Me tiré al suelo arrodillado, la miré y ella no despertaba sin embargo podía sentir su pulso. Respiré profundo, la agarré entre mis brazos y una vez la tuve encima corrí hasta la enfermería. La señorita Pomfrey, quien venia corriendo detrás mio, me ayudó a ponerla en la camilla, seguido a eso los profesores me llevaron hasta afuera de la habitación porque tenia que dejar a la enfermera hacer su trabajo, pero mis nervios no cambiaban. Como último recurso me senté contra la pared al lado de la puerta a esperar, en cuanto tuvieran noticias yo estaría ahí para enterarme.

Tuve que haberle avisado... tuve que haberle dicho....

Esto es mi culpa...

𝐀𝐧𝐲𝐰𝐚𝐲 │Oliver WoodDonde viven las historias. Descúbrelo ahora