44. Un gran compañero

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Después de eso, se escondió detrás de los árboles no muy lejos para que nadie le prestara atención mientras pudiera ver y escuchar claramente lo que estaba pasando.

Si Yuhan caminó hacia la niña desmayada, presionó su pulgar en el surco facial de la niña, luego la niña se despertó gradualmente.  Vio un rostro refinado y elegante de piel clara, que era tan adorable.

A’Lan se sentó derecha de inmediato, tratando de tocar su rostro, "¡Qué lind estás, pequeño!"

Si Yuhan frunció el ceño ligeramente y se inclinó hacia un lado, evitando su mano.

A’Lan no estaba enojado.  Ella preguntó gentilmente: “Niño, ¿por qué estás aquí?  ¿Cómo es que nunca te vi en la montaña Qiaoen el pasado?  ¿Estás perdido?"

Si Yuhan respondió: "Estoy con esos hombres que transportaron dinero del gobierno hoy".

Eh… Eso fue muy directo.

A’Lan preguntó con sospecha: "¿El jefe te trajo aquí?"

"Me atrapó.  En realidad, me atrapó aquí ".

Si Yuhan hablaba muy en serio, no bromeaba en absoluto.  Pero como solo tenía siete u ocho años y parecía un ángel, A’Lan no sospechaba de él en absoluto.  Al contrario, su corazón estaba casi derretido.

"¿En verdad?  Entonces, ¿por qué estabas con ellos?"

Después de vivir aquí durante tantos años, A’Lan naturalmente recibió una pregunta sobre por qué fue atrapado por el jefe si el objetivo del jefe eran en realidad esos soldados.

Si Yuhan, que era bastante bueno mintiendo, dijo: “Traté de escabullirme para seguir a mi padre, así que me escondí en las cajas.  Pero cuando me desperté, mi padre se había ido ".

A’Lan se rió entre dientes, "Eres un chico inteligente".

“Por favor, dime dónde está mi padre.  ¿Dónde encierran a mi padre?  Necesito encontrarlo ".

A’Lan asintió, "Está bien. Te llevaré allí."

Ke Ruan estaba pensando que ese chico era de hecho el protagonista masculino.  Él podría encargarse de todo.

Los siguió en secreto.

A’Lan estaba tratando de tomar la mano de Si Yuhan.  Si Yuhan lo esquivó y dijo con seriedad: "No me toques".

A’Lan, sin embargo, comenzó a reír de nuevo.

Ke Ruan dejó escapar un suspiro.  No se sentía cómodo.

A’Lan fue bastante ruidosa en el camino.  Ella bombardeó a Si Yuhan con preguntas como:

"Niño, ¿cómo te llamas?"

"Niño, ¿dónde vives?"

"Niño, no te preocupes.  Todo va a estar bien."

...

Sin embargo, como de costumbre, Si Yuhan simplemente la ignoró.

De repente, se dio cuenta de algo y dejó de hablar.  Mirando a Si Yuhan, murmuró: “Me desmayé, ¿verdad?  ¡Correcto!  Había un chico malo aquí.  ¡De ninguna manera!  Tengo que decirle al jefe sobre esto.  ¡Dios mio!"

Ke Ruan se sorprendió.  Aparte de la preocupación, también estaba impresionado por su insensibilidad.

"Hermana, ¿puedes llevarme primero con mi papá?"  Si Yuhan dijo con calma.

Al escuchar su voz, A’Lan se rió y dijo que sí: "Está bien.  Te llevaré allí.  ¿Ves?  Está justo ahí.  ¿Lo viste?  Pero ese lugar está vigilado.  Tú…"

Antes de que pudiera terminar su frase, se desmayó de nuevo.  Ke Ruan salió de detrás del árbol, miró a la niña en el suelo y dijo: "¿Otra vez?"

Si Yuhan asintió.

Ke Ruan también vio el lugar del que A’Lan le contó a Si Yuhan.  No era como una prisión o algo así.  Parecía una casa muy bonita, que estaba custodiada por dos bandidos.  Sacó una pequeña bolsa de polvo de su pecho, luego se puso en cuclillas y miró a Si Yuhan.

Todo esto había demostrado que Si Yuhan estaba aquí para ayudarlo.  Sería un desperdicio no aprovecharlo al máximo.

Transmigré al cuerpo del villano, ahora trataré bien al protagonistaWhere stories live. Discover now