Transmigré al cuerpo del villano, ahora trataré bien al protagonista

189. Lin Jingsheng lo entendió todo

Lin Jingsheng los miró con incredulidad, sin notar que el pañuelo que sostenía con fuerza en su mano se había caído al suelo.

Su rostro estaba un poco pálido y rezaba para que las cosas no fueran como ella pensaba.

En este momento, Ke Ruan se puso de pie después de terminar.  Se sintió mareado debido a que estuvo en cuclillas durante demasiado tiempo.  Podría haber mantenido el equilibrio, pero Si Yuhan fue más rápido.  Se puso de pie primero y rodeó la cintura de Ke Ruan con los brazos.

"¿Estás bien?"

Ke Ruan negó con la cabeza.  Cuando la sombra negra de sus ojos finalmente se desvaneció, dijo: "No es nada.  He estado en cuclillas durante demasiado tiempo.  Eso es todo.  Es normal."

Ella lo vio.

Esta vez, lo vio claramente.

Vio claramente la preocupación de Si Yuhan por Ke Ruan.  Incluso si fue solo porque Ke Ruan se sintió un poco mareado por estar en cuclillas por un tiempo, sus ojos estaban llenos de preocupación.

Vio claramente el amor y la indulgencia que mostró cuando Ke Ruan le susurró.

¿Cómo podría ser esto?

Lin Jingsheng abrió la boca con incredulidad.  Siempre había pensado que la razón por la que Si Yuhan hizo de Ke Ruan su emperatriz era que quería humillarlo.

Ella había pensado que Si Yuhan quería torturar a Ke Ruan separándolo a él y a su hermana.

Ella había pensado desde el principio que él convirtió a Ke Ruan en una espina en la carne de las personas porque quería lastimarlo usando la mano de otros.

Sí, ella lo había pensado.

Con su estado y capacidad actual, Si Yuhan podía torturar a cualquiera de cualquier forma posible.  ¿Por qué molestarse en humillar a Ke Ruan haciéndolo emperatriz?  Y después de todas esas veces que le respondió a Si Yuhan y enojó a Si Yuhan, Ke Ruan pudo mantenerse sano y salvo.

Incluso a su hermana se le confirió el título de Princesa Changle.

Ni siquiera podía entender por qué no había visto esto durante tanto tiempo.  Todo fue por amor.

Si Yuhan amaba a Ke Ruan.

¡Estupendo!

¿Por qué nunca había pensado en la posibilidad?

¿Qué pasa con Ke Ruan?  ¿Amaba también a Si Yuhan?

Lin Jingsheng miró inconscientemente a Ke Ruan.  Nunca parecía haberse dado cuenta de que Si Yuhan lo había complacido en exceso una y otra vez.  Había desarrollado una tendencia a la dependencia y la confianza.

Quizás lo amaba.  Simplemente no se dio cuenta de eso.

La mirada de Lin Jingsheng se congeló por un momento y pronto fue reemplazada por determinación.

A ese joven suyo nunca le gustaría Si Yuhan.  ¡Nunca!  Solo podía pertenecerle a ella.

Cuando volvió a levantar la vista, sus ojos se encontraron con los de Si Yuhan, que eran oscuros como la tinta.

Como un vórtice sin fondo que llevaría a la gente al infierno.

Lleno de extrema indiferencia.

Lleno de crueldad escalofriante.

Lin Jingsheng estaba tan asustada que su cuerpo tembló.  Si Yuhan trataba a las personas como si estuvieran muertas a excepción de Ke Ruan.

Una vez que te convertiste en el objetivo de un hombre como él, la única forma de escapar era morir.

No, siendo el objetivo, solo podrías ser un fantasma a merced de él incluso después de morir.

Lin Jingsheng sintió un escalofrío que se elevaba desde sus pies hacia todo su cuerpo, como si hubiera caído en un invierno extremadamente frío donde no podía sentir nada más que un dolor punzante.

Ke Ruan estaba demasiado preocupado por Si Yuhan, por lo que olvidó por completo su miedo hacia él.  Ahora estaba actuando basándose en los instintos de un médico.  Seguro que tendría miedo cuando se diera cuenta de la situación.

Miró a Si Yuhan en silencio.  Bien.  No había señales de enfado.

Afortunadamente, no parecía tan furioso como antes.  Recientemente, Ke Ruan casi pensó que el protagonista masculino sufría de esquizofrenia.  Por un momento, estaba triste y enojado;  para el siguiente, estaba feliz e incluso amable.

Casi sintió simpatía por Qi Cheng.  Ni siquiera sabía si era una bendición o una maldición servir a un maestro como Si Yuhan.

Miró hacia arriba y dijo: "Salgamos y hablemos".