🌹 21 🌹

6.5K 1.1K 516
                                    

Maratón (2/3)

(Narrador Omnisciente)


El dolor puede ser aplacado de muchas maneras, puede ser ocultado, olvidado, superado y reemplazado.

Sin embargo, para el Omega de cabellera rubia estaba siendo difícil de ocultar, olvidar, superar y reemplazar, el dolor que todo su cuerpo, su lobo y su corazón estaban sintiendo no se comparaba con nada, su pecho no solo dolía, este ardía, le quemaba, al igual que aquella marca en su cuello.

La marca estaba siendo rota, pero solo una parte, lo que estaba causando más dolor en el Omega.

Jimin sentía que moriría en ese momento, no soportaba el dolor, sentía como si estuviesen desgarrando su cuello y apuñalando su corazón, como si todo el sufrimiento que una vez sintió estuviese regresando pero con doble intensidad, como si todo el dolor que vivió en su niñez y adolescencia estuviese ahora presente, pero listo para acabar con su vida.

Jimin pedía a gritos una sola cosa... Morir en ese mismo instante.

Preferia morir antes que seguir soportando tanto dolor, no quería seguir sufriendo por culpa de alguien que le juro amor eterno y termino acabando con toda la felicidad que una vez tuvo.

- Y-oongi... - Susurró en medio de lagrimas y dolor.

Jimin tenía muy presente la imagen del Alfa, aquel Alfa que lo salvó, el Alfa en quien sentía que podía confiar, que podía depositar su vida en sus manos. Pero al cual aún le tenía miedo, puesto que no quería seguir sufriendo o llegar a sufrir de la misma forma en que lo estaba haciendo en ese preciso momento, mucho menos sabiendo que ese hermoso Alfa si es su destinado.

El lobo de Jimin estaba sufriendo, pues un lazo roto para un Omega no era algo fácil de tratar, se estaba dañando al Omega completo, su pureza, su confianza en sí mismo, incluso la posibilidad de jamás sentir emoción o felicidad con nadie más, puesto que los Omegas con lazo roto eran cruelmente rechazados por la sociedad. Sin embargo este no era el caso de Jimin, ya que él si tiene un Alfa que está dispuesto a todo por él.

El lobo aullaba llamando a su Alfa, necesitando de él, aunque no tuvieran una marca, los destinados podían comunicarse de cierta forma, siempre y cuando estos ya hayan tenido contacto de cierta forma, lo cual si ha sucedido entre Jimin y Yoongi.

Por otro lado, Yoongi llegaba a su mansión con toda la velocidad que su cuerpo y piernas le permitían, subió sin dudar una vez recibido la indicación de Hoseok. Cuando llegó arriba y vio a Jin, no le importó nada en ese momento que no fuese solo su pequeño Minnie, su ángel.

Entró y lo que se encontró le desgarró el corazón, el alma. El solo ver a Jimin en aquella escena era lamentable, le hizo doler su pecho, su lobo aulló en dolor y quiso ser él quien sintiera todo el dolor y sufrimiento que el Omega estaba sintiendo en ese instante.

El Alfa corrió hasta la recámara, donde se encontraba su pequeño Minnie, hecho bolita mientras gritaba y sollozaba de tanto dolor que su cuerpo estaba sintiendo.

- Minnie, mi amor, estoy aquí cielo - Dijo el Alfa cuando subió a la cama y abrazo entre sus brazos al Omega.

Jimin no dijo palabra alguna, simplemente se aferró al pecho de Yoongi, tratando de encontrar la calma a su dolor, siendo eso algo casi imposible, puesto que el dolor persistía cada vez más fuerte. El Omega hizo puño sus manos sobre la ropa del Alfa, mientras hundía su rostro en el pecho de este.

- Estoy aquí cariño, estarás bien Minnie, te prometo que estarás bien - Decía el Alfa mientras derramaba lágrimas.

Yoongi sentía el dolor de Jimin, no solo lo presenciaba, no solo era testigo de los gritos desgarradores que soltaba cada cierto minuto el Omega, también era consciente del dolor inmenso que el alma, lobo y corazón del Omega estaba sufriendo. Sabía que ese dolor era terrible y no era justo para ningún Omega, jamás sería justo.

🌹𝐔𝐍𝐀 𝐑𝐎𝐒𝐀 𝐃𝐄𝐍𝐓𝐑𝐎 𝐃𝐄 𝐔𝐍 𝐂𝐑𝐈𝐒𝐓𝐀𝐋🌹 ~Yoonmin~ Where stories live. Discover now