One Shot's Izuku x Kyouka

Y eso es eso

Un día, Kyoka entró en la sala común y se enamoró.

Sí.

Así. Más o menos. Un poco más que menos, en realidad.

Eri los estaba visitando ese día y el único que había sacado su trasero de la cama para saludarla tan temprano, después de esa horrible sesión de entrenamiento que Aizawa les había hecho pasar, era Izuku.

Durante los últimos tres años, Kyoka había descubierto que Izuku no era una persona mañanera. Para nada. De hecho, fue tan malo que Bakugo tuvo que abofetearlo todas las mañanas para ponerlo en un estado utilizable. Y dado que Kyoka generalmente no deambulaba por los dormitorios de los chicos por la mañana, en realidad no había visto a Izuku en su delirante estado matutino antes.

En resumen, era un desastre somnoliento.

Ignorando que su cabello era literalmente un pájaro, parecía como si simplemente se hubiera puesto la ropa y procediera a salir rodando de su habitación. Todo lo que podía estar torcido estaba, bueno, torcido. Y si sus pantalones iban a deslizarse más abajo ... bueno, probablemente debería tomar una foto.

Pero su aspecto sexy recién salido de la cama no fue lo que de repente la enamoró. Nah. Kyoka no era tan superficial.

Cuando Eri entró en la sala común, Izuku le sonrió adormilado y la levantó en el aire mientras se lanzaba hacia él. La hizo girar. Ella chilló. Fue lindo. Luego la sentó sobre su antebrazo, se dio la vuelta y sonrió cuando la vio parada allí con su taza en las manos.

"Oh, buenos días Kyo," dijo, arrastrando las palabras ligeramente.

Kyoka chasqueó la lengua. Kyo. * THUMP * Está bien. ¿Qué fue eso? Ella miró su café. ¿Cuánta azúcar había puesto allí? ¿Quizás tuvo un infarto? No. Es improbable. Pero fue realmente molesto escuchar su propio corazón tronar en su pecho. ¿Y por qué le ardía la cara?

Hm. "Buenos días", dijo, tomando un sorbo de su café.

Ella siguió mirándolo incluso cuando Izuku regresó para hablar con Eri sobre lo que sea que el pequeño había hecho ayer. Eri le dio un beso en la mejilla y él se rió, devolviéndole el favor tan autoritariamente como pudo.

Fue demasiado saludable.

Una vez más, Kyoka chasqueó la lengua. Maldita sea. ¿Sus ovarios simplemente explotaron? Un sentimiento estúpido. Un buen sentimiento.

Bien. Entonces no fue el azúcar. Ella acababa de caer cara primero en el amor. Menos mal que ella era consciente de sí misma. Y engendrar un huevo, lo más probable. Suspiró en su taza. Supongo que tenía algo que hacer este domingo.

"¡Oye Izu!" llamó, dejando su taza sobre la encimera.

Izuku se sobresaltó. "¿I-Izu? Uh, ¿sí?"

"¿Quieres ir a una cita?"

Sí. Ser franco era lo suyo.

Él la miró fijamente, entrecerrando los ojos. Luego se volvió hacia Eri. "Uh, Eri."

"¿Sí?" chilló la niña, sonriendo ampliamente.

¡Ah! Fue así una vez verla feliz.

"¿D-Kyoka me acaba de invitar a una cita ...?" le preguntó, agachándose a la altura de sus ojos.

Eri inclinó la cabeza, le tapó la nariz y asintió. Kyoka casi vomitó un arcoíris. "¡Sí, tonto!"

Izuku se volvió hacia ella de nuevo. "¿¡Lo hiciste!?"

Kyoka sonrió. "Demonios, sí, lo hice. ¿Estás despierto?"

"¡Ve, hermano mayor!" escuchó a Eri susurrar, dándole a Izuku un pulgar hacia arriba.

Izuku le dio una sonrisa nerviosa. "Uuh, ¿de acuerdo?"

Kyoka resopló. "Por supuesto que está bien. Vamos." Ella sonrió. Y vuelve a ponerte los pantalones.

El chillido más juvenil del campus escapó de la garganta de Izuku mientras saltaba directamente al techo. Perdió sus pantalones en la cabeza de Eri mientras lo hacía. ¿Podría esto volverse más divertido?

Y ese fue el momento en que Aizawa entró.

Kyoka tuvo un gran día. Le gustaría decir que Izuku también fue genial, pero Aizawa casi lo asesina por saltar frente a Eri en ropa interior.

Al menos Eri tuvo el mejor momento de su vida contando la historia a toda la clase de cómo Izuku se "desnudó" para ella. Aizawa luego casi asesina a Mineta por existir.

Y eso es eso. Kyoka tenía un hombre ahora.