Capítulo 5: Feliz Cumpleaños Princesa Sophie.

4.8K 332 25
                                    

— Vine a dejarte el té — miré boquiabierta a Nate.

— Claro gracias, no debías — reaccioné acercándome rápido a tomar mi taza para que salga de aquí.

— La verdad vine porque quería preguntarte algo — apoyé mi taza en el mueble más cercano y Nate entró por completo cerrando la puerta a su espalda. Me puse roja antes de que lo dijera, pero ya me lo debo imaginar, que debo aprender a disimular más, que no le arruine su vida aquí en Nueva York, etc, etc, etc.

— Claro, te escucho — puse mi cabello tras mi oreja y me crucé de brazos de forma suave.

— ¿Quieres ir al baile conmigo? — ¿Me está jugando una broma? me puse a reír y tapé mi boca con la mano riéndome.

— Deja de jugar malas pasadas Nate, sé que lo que te dije el otro día estuvo mal, estuvo fatal la verdad, pero dejémonos de estas bromas — no puedo dejar de reír, yo creo que una parte de mí ríe para ocultar que aún me afecta su rechazo.

— No es una broma Sophie — se acercó tomando mis manos — Es en serio, tú madre dijo que el vestido te había gustado mucho y solo no quiero que pierdas este momento por un idiota — ahí está la razón, mamá, me solté de sus manos rápido incomoda sin saber que hacer con mis manos.

— Gracias por lo educado, pero no es necesario, estaré bien.

— ¿Segura? — asentí segura — No me molesta acompañarte en serio, recuerda que también fui con Diana porque el chico que le gustaba no la invitó y bueno yo no sabía a quien invitar la verdad — lo dudó recordando momentos, yo creo que no sabía a quien invitar de la larga lista que debía tener bajo el bolsillo.

— No es necesario, pero gracias — botó aire y se relajo.

— Bueno al menos lo intentaron.

— ¿Lo intentaron? — pregunté confundida.

— Si, bueno a mi madre se le ocurrió esta idea, que te acompañara para que fueras a tu baile y no fueras sola — que triste, por un momento pensé que se le había ocurrido a él, asentí quitándole la vista — Te dejo buenas noches — levanté mi vista y volví a asentir sin decir nada observándolo marchar. Insisto, no hay nada como Harry Potter para subir el animo.

Mamá le pidió a sus maquilladores y peinadores que vinieran hoy. Me puse lencería, una bata negra y dejé caer mi cabello suelto lista para todo.

— Créeme que es todo un placer maquillar una belleza como la tuya — sonreí al comentario del maquillador, ya sé por qué mamá lo adora — ¿Lista?

— Lista — respondí sentada frente al espejo con luces que se encuentra en mi vestidor y al lado el vestido para que vea el color y el maquillaje sea acorde al vestido.

Mi cabello tiene frizz y no tiene forma, no como el de mamá que es liso brillante, el mío es desordenado y alocado como el de papá y castaño claro como el de él. Para que el cabello me quede presentable todos los días, uso aceite después de la ducha, lo seco, lo peino con el cepillo y me realizo un moño alto bien apretado mientras me visto, tomó desayuno y voy en el auto a Manhattan, así cuando lo suelto, las ondas están marcadas de formas naturales y ya no tiene tanto frizz. Pero el peinador esta vez hizo maravillas, porque las ondas que hizo en mi cabello son de en sueño, memorice cada paso y cómo las hizo para poder hacerlo en casa, porque me enamore de mi cabello.

— Eres muy hermosa Sophie, el vestido es muy hermoso, créeme que si hubieses tenido que ir a la gala del MET o a la gala de beneficiencia que organiza tu madre todos los años, no hubieses podido usar el cabello así para no opacar al vestido, pero esta noche quería que resaltaras tú, tú haces al vestido ¿Te gustó el resultado? — sonreí demasiado feliz frente al espejo.

Si Me Encuentras En Manhattan Where stories live. Discover now