Behind the Scenes •|Sebastian Stan|•

Capítulo. 53

Confesiones y lágrimas.

Los futuros padres, Sebastian y Amelía, fueron a celebrar el gran momento en un bar. Los tres primeros aprovecharon bien la tarjeta de crédito de Brown, quien gustosa les estaba brindando los tragos y la comida.

—Yo declaré que sería niña.— Contaba Amelía bebiendo de su piña colada sin alcohol, que pidió para ella y su mejor amiga, por solidaridad.

—Me caíste encima después de gritar cuando recibiste la noticia.— Recordó Sebastian.

—¡Sabía que andaban juntos!— Exclamó Chris algo fuerte, ya con dos vasos de whisky en la cabeza.

Scarlett se rió. —Nuestra niña será una brujita.—

—Si la alejamos de Amelía, no.— Susurró lo suficientemente fuerte Evans.

Lía pateó por debajo de la mesa al actor rubio. —Aún puedo retractarme de pagar esos 2.300$, ¿ok?—

—Te amo, tanto así que he pensado en colocarte como madrina de mi hija.— Dijo Evans.

—Querido, eso ya está decidido.— Comentó Amelía viéndolo con amenaza. —He estado casi cuatro meses aguantando los cambios hormonales de tu novia, comprando ropa y pensando en estilos para decorar el cuarto de mi niña, ese puesto es mío desde antes que supieras de la existencia de un pedazo de ti dentro de ella.—

—Es la madrina, no discutas.— Pidió Scarlett acariciando el cabello de su novio.

—Ahora...— Sebastian se acomodó en su silla. —¿Cuándo será el matrimonio? Necesito que eso suceda.—

Amelía aplaudió. —Yo la organizó.—

Scarlett miró a su amado. —Si, ¿cuándo nos casamos?—

Christopher bebió de su vaso de whisky. —¿Navidad?—

Johansson asintió y le besó la mejilla. —Me gusta.—

—Evans, tú y yo debemos ir compras.— Declaró Brown.

—Yo puedo ir solo, gracias.— Contestó él.
—Tienes pésimo gusto para la joyería. Además, tienes que comprar el regalo de navidad de Scarlett, el de la mocosa, el de tu mamá, el de tus hermanas y por supuesto, el mio.— Le avisó Lía.

—Me conoces muy bien.— Dijo Chris.

—Y vaya que si.— Habló Scarlett con un doble sentido, que solo el miembro rumano de la mesa no pudo entender.

—¡Estamos a finales de abril!— Exclamó Evans.

—¿Y qué? Los días corren, hay que comprar todo por adelantado. En especial mi regalo.— Amelía bebió de su piña colada como la gran diva que era.

Scarlett rió y se puso de pie. —Iré al baño.—

—Voy contigo.— Amelía le tomó la mano a su amiga y ambas se fueron casi que corriendo.

—Y eso que no están tomando alcohol.— Christopher rodó los ojos al decir eso.

Sebastian rió. —Ya déjalas, están felices. Scar porque será mamá y Amelía porque cree que podrá moldear a tu niña a su semejanza.—

—No lo permitiré.— Evans habló de inmediato. —Mi hija será buena persona.—

Stan negó con una sonrisa divertida bebiendo más whisky. —Amelía tendrá una gran influencia en ella, así que prepárate para que deje de ser tu hija a la hora de nacida.—

—Hablando de Amelía.— Comentó Chris con una sonrisa de loco. —¿Cómo te fue con ella?—

—Bien.— Contestó Sebb encogiéndose de hombros.