Topkapi

Capitulo 31: Benevolencia

Una ola de calor transcurrió por su espalda haciendo que una gota de sudor recorriese su espalda.

Presa del miedo.

Asqueada pero indefensa no pudo cerrar sus labios que por la sorpresa se habían entreabierto, hizo una mueca de asco al sentir la lengua de su verdugo tocar sus apretados dientes. Al instante removió con más fuerza que la vez anterior, las cuerdas de sus muñecas.

Se sentía indefensa, pues nada de lo que hacía parecía funcionar. No obstante, ese sentimiento se esfumó en el momento en que separo sus dientes y mordió la lengua que intentaba enminiscuirse en su cavidad bocal.

- ¡Perra! - había gritado adolorido aquel miserable, luego de azotar la mejilla izquierda de esta.

Dicho comentario causo distintas reacciones a lo largo de la habitación, la Gözde sonreía para sus adentros, la Hatun observaba asustada la situación e Ibrahim de Pargali sostenía (rabioso) con su indice y pulgar su adolorida lengua.

Sultan Solimán :

La búsqueda era esauxstiva, no obstante parecía que a mi rosa almendrada se la hubiese tragado las rocosas y elegantes paredes del palacio. ¿Donde estaba? Se que no había salido del harén. ¿Quien le hizo daño? ¿Acaso escapó por propia voluntad? Me niego.

Inocencia, transparencia.

Extrañaba la sensación de despertar a su lado mientras observaba sus brillantes avellanas, su rostro en forma de corazón, sus alargadas y obscuras pestañas, y sus apetitosos y carnosos labios.

Y de pronto me invadió la tristeza al saber que tal vez, jamás volvería estar en su presencia.

Tal vez, no volvería a escuchar su risa...

Tal vez, no volvería a ver su mirada...

Tal vez, no volvería a oler su cabello....

Tal vez, no volvería a sentir...

Sin embargo sabía que se avecinaba la guerra, temía no poder encontrarla en el palacio y tener que dedicar a decenas de soldados en una búsqueda por los alrededores, más aún cuando serían prioridad.

¿Que mas da?

Haría lo que fuese por despertar siquiera una noche más con aquella pequeña koala prendida de mi.

Dos días, sin saber sobre ti es demasiado.

Cada soldado, cada hatun y cada Agha habían sido interrogados. Por su puesto que no olvide a mis consortes, me encargue de ellas personalmente. Aunque no encontré indicios de que alguna halla tenido la osadía de hacerle algún mal.

¿Quién podía hacerle mal a esa alma tan caritativa e inocente?

Oh Belinay estarás a mi lado, te encontraré, criaras a nuestros hijos y envejecerás a mi lado.

- Majestad. - oí la armoniosa voz de mi amigo de la infancia.

- ¿La has encontrado?- pregunte aún sin voltearme.

- Lo siento Majestad, he hecho todo lo posible. Pero...pareciese que la Gözde no quiere ser encontrada.

De pronto sentí una ira invadiendome y no me costó nada darme la vuelta para mirarlo por primera vez, sentía que la vena de mi cuello bombeaba con ira.

¿Que tan difícil podría ser revisar un harén entero?

- ¡Es tu deber! ¡Como kraliyet odasının ilk subayı, tu deber es encargarte de la seguridad del harén! - di dos pasos hacia él - no seré benevolente contigo Ibrahim.

Dejaré de buscarte cuando el extenso lago de Estambul se extinga, y la luna deje de brillar.

¡Oh mi sultana, mi luna!

¿Como fui capas de escuchar tu voz y ver tu rostro antes de conocerte?

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Hola! Capítulo corto.

Ay Ibrahim...

Sin más que agregar, espero hallan tenido un bonito comienzo de año junto a sus familias amigos o tal vez junto a ustedes mismos. Les deseo un feliz año.

E.