El momento siempre era de tensión con ellos dos, siempre pasaba eso, creo que de cierta forma me había acostumbrado. Jacob fue el primero en avanzar, hasta que los demás lo siguieron, el chico con ayuda de otro más, cargaron a la pequeña, parecía un poco estable, pero sabía que eso no era verdad. Al menos no estaba como la encontramos, su aspecto de perecer se había borrado de su rostro, aún seguía débil, así que necesitaba que venga rápido Adrianne. Ahora el problema sería, como ellos iban a alcanzarme lo necesario, hablamos de 4 vampiros, los de la aldea entrarían en pánico, al menos pensaba eso. Los vampiros significaban muerte y con todos estos acontecimientos, no iban a aceptarlos así de fácil. Tendría que estar a la expectativa con Adrianne y darle el encuentro o quizás algo más fácil, enviar a Bastián o incluso Jacob. Solo debía estar atenta a su llegada, demorarían un poco quizás, ya que estaban lejos, pero eran buenos corriendo. Y también estaba la idea de seguir buscando a Bella, aunque nuestras pistas de agotaban, los vampiros que encontrábamos no planeaban decirnos algo, no venían a conversar.
Los primeros en movilizarse fueron los chicos, acompañados de Jacob, Bastián tomó mi mano apretando esta suavemente y avanzamos también. Éramos un pequeño grupo de lobos, caminando por el espeso bosque, en plena oscuridad. No parecía que íbamos a encontrar a algún vampiro nuevamente, ni mi olfato, ni ningún otro sentido detectaba algo extraño cerca de nosotros.
-¿Crees que a Adrianne le ha ido mejor? - dijo Bastián.
-Claro que sí, estos vampiros estaban pendientes de la manada, no tenían otro objetivo. - aseguré. - Aunque sigo con la duda de saber dónde se encuentra Bella.
-La encontraremos, al menos espero que tengan mejores noticias ellos. - acotó.
-También espero eso o Edward podría estar más frustrado que de costumbre. - asentí.
Hubo un silencio entre ambos y seguimos caminando otra vez, no estábamos a nada de llegar antes los demás, así que Bastián bajo un poco el paso, para caminar lentamente.
-Creo que Adrianne va a matarme cuando le cuente que me secuestraron, dirá que soy débil. - admitió Bastián.
-No es tu culpa, aquellas cosas están diseñadas para inhabilitar la magia, a los seres sobrenaturales. No fue cosa tuya, por el contrario, ella va a matarme a mí. - reí. - Tenía que estar a tu lado, protegerte, no separarme de ti.
-Teníamos que cuidar a todos, era una responsabilidad. - susurró. - Estoy feliz con saber que al menos la mayoría sigue vivo.
-Se que no es fácil todo, pero es un gran progreso. - contesté. -Nuevamente, perdóname por no estar ahí para ti.
-No debo perdonarte nada. - concluyó.
-Si hubiera demorado algo más, quizás.... - murmuré.
Ante lo último, detuvo el paso y me jaló para rodearme entre sus brazos otra vez, sostuvo luego mi rostro ente sus manos dejando un pequeño y suave beso sobre la punta de mi nariz.
-No estoy muerto, sigo aquí. - aseguró. - Deja de lamentarte, estabas ocupada y en algo importante.
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