Extra 2

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NOAH

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NOAH

Un mes antes de la renovación de votos

El matrimonio es... raro. Sobre todo, en los casos como el nuestro que comienzan de atrás para adelante. Por lo general, las personas buscan conocerse y formar una relación antes de dar el paso, antes de comprometerse formalmente y de una manera más permanente, aunque no eterna. Luego está un grupo más reducido, el mío, que toma malas decisiones una noche y cambia su estado civil sin estar siquiera consciente.

Mi matrimonio salió bien o al menos lo está haciendo tanto como es posible. La distancia no ayuda, la diferencia horaria mucho menos y nuestras obligaciones lo arruinan todo. Cuando mis nuevos amigos me preguntan, les digo con completa sinceridad que no me arrepiento de nada, pero eso no significa que no estaría feliz de poder cambiar ciertas cosas.

Eliminaría la distancia por completo, por ejemplo. Afortunadamente ese cambio no está tan lejos y en un mes sería una realidad. Sin embargo, ni Fran ni yo podemos soportar otro mes más y hoy estoy contando los segundos para verla.

Su avión aterrizó hace tres minutos y me lo hizo saber con un mensaje. Ahora, con la impaciencia al cien por ciento, estoy mirando casi sin pestañear a la puerta para no perderme del momento exacto en que mi esposa por fin regrese a mis brazos.

Mis clases terminan en una semana. Fran finalizó la remodelación hace cuatro días. Se quedará conmigo hasta que comiencen mis vacaciones y juntos regresamos a Nueva Jersey para cerrar los últimos detalles de nuestra renovación de votos. Luego de eso, tendremos una luna de miel en la playa y por fin mi esposa se mudará conmigo aquí en Alemania.

Hace dos años, no sabíamos de la existencia del otro. Un año atrás elegimos no divorciarnos. Y en este momento no puedo dejar de sonreír porque Fran ha atravesado la puerta y viene rápido hacia mí.

—¡Noah! —exclama segundos antes de que sus brazos rodeen mis hombros y termine contra mi pecho.

—Hola, esposa —susurro y beso su mejilla—. Te extrañé.

—Yo más, esposo. Estar con tu familia era un recuerdo constante de que tú no estabas.

Me echo para atrás lo suficiente para poder besarla y la manera en que nuestros labios se encuentran, como si el tiempo no hubiese pasado, me confirma lo que ya sé. Fran es la elección correcta. Es la persona con la que quiero estar a diario y por la cual haría hasta lo imposible.

De una boda y otras mentirasWhere stories live. Discover now