Posesivo

Capítulo 9

Tomó una bocada de aire antes de encaminarme a la mesa de Caled, una ves en esta les pongo el café en la mesa y cuando me pienso retirar escucho la voz del primo de caled.

— Gracias Lía - Dise mirando mi nombre en la camisa de mi uniforme. Asiento con la cabeza y me voy.

Me encuentro en el auto de Caled ya que me insistió mucho en que llegáramos juntos que que chiste tenía el yo irme en el bus si él iba también para mi departamento.

Al llegar abro la puerta y me recibe ese cálido olor a hogar. Le digo que se siente en el mueble de la sala mientras que yo voy a darme una ducha y ponerme una ropa cómoda, vuelvo y lo miro concentrado en su móvil. Me encamino a la cocina para tomar dos coca- cola en lata para los dos.

— Mira. espero que te guste la bebida negra - Le digo extendiéndole la bebida una ves estoy a su lado, él niega y sonríe.

— Esto va muy poco con migo, pero no importa - dice con una sonrisa.

— Oh.. si gustas te ago un jugo entonces.

— Tranquila no ahí problema - Asiento sentándome a su lado.

Nos quedamos unos minutos así para después ir hacer el trabajo a cada rato sentía su mirada sobre mi. Estoy nerviosa me muerdo el labio para que no me vea temblar, en ese momento miro mi móvil ya que está vibrando y aparece el nombre de Jacod, rápidamente lo cojo me retiro un poco de su lado y lo descuelgo.

— Hola nena.. Perdóname por desaparecerme así hoy y no dejarte aunque sea un mensaje pero es que me toco salir de rapidez a las afuera de Moscú por mi hermana.

— Hola Jacod, espero estés bien y tu hermana también. Y no pasa nada la mayoría del tiempo es así - Le digo de manera fría y enojada.

— Nena por favor no te pongas así se que hice mal pero por favor perdóname si.

— Ya que más da siempre es así Jacod y me alegra que estes bien.. Tengo que colgar.

— Espera nena. Sabes que te quiero no ¿cierto? - Iba a responderle cuando escucho una vos femenina que me es muy conocida o eso creo.

— Jacod qué haces.

— ¿Con quien estás Jacod? esa es Luisa - Ahí un largo silencio asta que responde.

— No.. Claro que no amor es una amiga de mi hermana nada más.

— Bueno adiós - Cuelgo sin esperar una respuesta de su parte.

Me giro para encontrarme con unos profundos ojos azules mirándome. me voy a el baño a lavarme la cara no quiero llorar ni pensar en que probablemente Jacod me esté engañando.

Cuando estoy más calmada salgo y me encuentro a un Caled escribiendo en el trabajo que ya llevamos, su vista se posa en la mía y luego dice.

— Si no te sientes bien podemos hacerlo otro día a demás estoy es para el miércoles.

— Lo dices como si fuera el de la próxima semana. claro que no hagamos más hoy y ya - Él asiente y vuelve a escribir.

— Que te gustaría comer.. pizza, hamburguesa, o arroz chino - Le pregunto a Caled.

— La verdad no soy tan amante a esas cosas, pero esta bien la pizza.

— Entonces que es lo que te gusta comer. Se ve que eres jodido para comer - Él se carcajea como si hubiera dicho lo más chistoso del mundo.

— De que te ríes qué es tan gracioso - Le pregunto levantó una ceja.

— Nada.. Solo me cuido ya que hago ejercicios.

— Entiendo. Sería genial se fuera de estra queso - Asiente y llamo a domicilio para hacer el pedido, mientras llega la pizza seguimos terminando el trabajo asta que se escucha el timbre me levanto rápidamente.

Abro la puerta recibo la pizza y la llevo a la cocina saco otras coca- colas mientras me dirijo a la mesa.

Estamos comiendo cuando lo miro traer su dedo pulgar hacia mi boca limpiando un poquito de salsa que tenía a un lado me quedó en shock viendo cómo hace eso.

— Gracias - digo una ves que puedo y el solo me sonríe.

Terminamos de comer recojo las cosas mientras que él se lava las manos. Una ves dejamos bastante adelantado el trabajo, él se marchó y yo me quedo pensando en todo lo sucedido.

(.....)

A pasado ya un mes desde que estuvo Caled en mi departamento. Con Jacod hemos arreglado las cosas aunque ahí veces que se pierde y no se nada de él a él igual de sus constantes llamadas el solo me dice que es su hermana, con Luisa hemos hablado poco como siempre de cierto tiempo para acá.

Mis padres viajan hoy para Barcelona, con ellos eh hablado siempre en todo momento. Mi mejor amigo por fin se izo novio de su chica cómo le dice siempre. esta muy feliz.

Con Caled nos hemos topado unas que otras veces y eso me está perjudicando ya que no fui capaz de hacer el amor con Jacod por estar pensando en él y pues se enojó mucho con migo asta me dijo que si tenía a otro.

Estoy pensando cómo are hoy ya que me invito a si departamento porque me tiene una sorpresa.

Me encuentre en el jardín de la universidad almorzando sola ya que Luisa está hablando con un profesor y Elliot no asistió hoy a clases al igual que Jacod que ya se le está volviendo costumbre.

Voy camino a mis clases y me encuentro a Luisa en mi casillero esperándome.

— Lía necesito que por favor me ayudes con un trabajo. Nos podremos ver hoy en tu departamento.

— Claro Luisa, pero en la noche ya que sabes que trabajo - Ella asiente y nos encaminamos a nuestros respectivos salones.

En la mira de este escucho que vibra mi celular con un mensaje lo saco para ver de qué se trata y es un número desconocido, decido abrir el mensaje a ver de quien se trata y no puedo creer lo que ven mis ojos.

Me niego a creer o aceptar lo que estoy viendo con mis ojos, tengo la vista nublada por las lagrimas me tiemblan las manos todo.