Capítulo 23

2.7K 130 3
                                    


Las horas habían pasado, mi padre llego a la hora del almuerzo como nos dijo, la pasamos muy bien los tres. Giorgio había pasado por mí, mis padres se habían ido los dos juntos. La graduación fue muy bonita hubo muchas felicitaciones y más. Me sorprendió cuando mire a Caled solo con su padre y no con su madre.

Yo me le acerque a felicitarlo y él estaba algo raro no me preocupe por eso y seguí disfrutando de mi último día en la universidad. Tantos recuerdos lindos que me llevo de este lugar.

Ahora nos encontramos en la fiesta de noche. Mis padres se fueron a las siete. La verdad me la estoy pasando muy bien con los chicos, Emanuel no me a dejado sola en ningún momento la verdad el es un amor.

Por otra parte no eh visto a Caled no sé si agradecer o preocuparme, decido no pensar en eso y disfrutar de la fiesta junto a Emanuel que no se cansa de invitarme a bailar.

Los minutos pasan al igual que los tragos, Elliot y su novia no se cansan de bailar a cada rato lo hacen. Me siento mal con Emanuel ya que en todo el rato no eh querido salir a bailar con el.

Estoy bebiendo no se que lo que me trajo Emanuel, mientras él está a mi lado. Pongo mi vista en un lugar justo en la entrada de la fiesta y se me revuelve el estómago por lo que acabo de ver y no se porqué.

Caled viene del brazo con la china que dice no ser su novia. No quiero que me duela al verlo con ella pero no lo puedo evitar y eso me frustra.

— Lía esta ves si quieres bailar - Me pregunta una ves más Emanuel sacándome de mis pensamientos mientras pongo mi vista en el.

— Lo siento Emanuel por ser una tonta.. si ven vamos a bailar - Lo hago levántese de su silla y trato de darle mi mejor sonrisa para que no vea mi amargura por ver a Caled con esa.

— No ahí problema - Me dice restándole importancia mientras nos metemos a la masa de gente.

Asiento mientras comienzo a moverme junto a él ya que la música es algo movida. Pego mis nalgas a su cuerpo y me comienzo a mover, decido soltarme y disfrutar.

Siento la mirada de Caled en mi. Estoy segura que es él pero decido ignorarla mientras bailo y bebo como loca.

— Deja de beber así te vas a embriagar - Me dice Emanuel en un grito para que lo pueda escuchar mientras tomo como demente.

Decido no decirle nada y solo seguir disfrutando. Siento que Emanuel besa mi cuello y pasa sus manos por el escote trasero de mi vestidos asta situar sus manos en mis caderas.

Su toque me eriza o no se si es por la mirada de Caled sobre mi. Cambia la música a una mas suave y romántica. Me volteo viento esos hermosos ojos café que me miran con intensidad.

En su mirada hay un brilla muy hermoso. también adoración. Porque puedo leer con más facilidad a Emanuel que a caled. Y pensando en él.. ya basta lia.

Decido pegarme a su pecho y aferrarme mas a él, no sé si ya están haciendo efectos los tragos en mi pero se siente bien. Nos movemos suavemente de un lugar a otro.

Cuando la música acaba decidimos irnos a sentar unos minutos. Le digo a Emanuel que tengo que ir al baño y que ya vengo. El solo asiente.

Una ves hago mis necesidades y me encuentro lavándome las manos, siento que alguien me toma del hombro volteándome. Pego un leve grito.

Rápidamente sierro la boca al encontrarme con esos ojos azules que me miran con enojo frustración y algo de disección que no entiendo porqué.

Estamos en un incómodo silencio, no sé qué decirle me siento muy mal al verlo con la perra esa llegar.

— Nos vamos ya - Dice rompiendo el silencio y hablando con vos dura.

— Yo no vine con tigo así que ve y le dices eso a tú acompañante - Me siento patética diciéndole eso, sonó más como un reclamo.

— Lía estoy hablando enserio - Me dice entre dientes.

— Y yo también Caled. Ya estoy cansada de esta situación - Digo ya desesperada.

— Entonces ven con migo y vamos hablar - Dice tomándome del brazo y asiendo que salga con él.

— No tengo nada que hablar con tigo.. vete y déjame en paz - Trató de no sonar dolida por lo que él siempre hace.

— Lía por favor.

— Por favor ni una mierda Caled. Me dices que no tienes nada con ella y a cada rato los miro juntos - Me rio sin gracias — Soy una completa idiota cuando se trata de ti pero ya va a cambiar.

Él se sorprende con lo que le acabo de decir. Cuando me iba a responder la voz de mi mejor amigo lo interrumpe.

— Qué pasa lía - Pregunta sin entender lo qué pasa entre Caled y yo.

— Nada Elliot, yo ya salía. Ven vamos - Lo tomo del brazo saliendo y dejando atrás a Caled.

Mi mejor amigo no me pregunta nada al ver mi cara de enojo. Agradezco que no lo haga porque no quiero hablar de eso todavía.

Escuchamos un ruido a nuestras espaldas y rápidamente nos volteamos para ver a un Caled enojado mientras golpea la pared da dos golpes más y se encamina a la salida del lugar.

Me siento mal por un momento debí escuchar lo que tanto quería decirme y verlo así me enoja con migo misma ya que yo lo quiero mucho y no dejo que me diga lo que necesita decime.

No siento cuando mis pies están casi corriendo detrás de él pero alguien me jala del brazo impidiéndome seguirlo, volteo y me encuentro con Elliot.

— No lía. Deja que se valla - Lo miro sin entender y él prosigue — No se que tengan usted dos pero no puedes hacer lo que pensabas. Cuando discutan o algo así, no lo busques porque así será todo el tiempo, él no te buscará porqué ya sabes que tú lo harás aun sabiendo si fue él quien se equivocó. te lo digo porque soy tu amigo y soy hombre, nosotros siempre queremos que ustedes nos busquen aun sabiendo que fuimos nosotros quien nos equivocamos.

Asiento a lo que me acaba de decir mi mejor amigo.

Lo abrazo fuerte por lo que me acaba de decir no sé cómo él hace para reconfortarme tan rápido.

Posesivo حيث تعيش القصص. اكتشف الآن