Capítulo 30

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Me despierto gracias a mi alarma a las seis am, espero que todo me salga bien hoy y me acepten en el trabajo.

Me levanto dejando la pereza a un lado para ir a la regadera en el lavabo me aseo antes de ducharme, como amo el agua caliente.

Salgo de mi fabuloso baño y me voy a el closet a ponerme lo de hoy, opté por una falta negra no tan larga ni tan corta con una blusa blanca por dentro, me maquille natural como siempre y mis zapatos negros.

Me prepare mi rico cereal para desayunar, ya lista agarro mi bolso y llaves del carro para irme a la empresa, salí con buen tiempo no quiero llegar tarde.

Después de unos buenos minutos conduciendo llego a el estacionamiento de la empresa aparco mi auto y me encamino a la entrada.

En la parte alta está escrito el apellido en palabras grandes y doradas es de unos 20 pisos más o menos la verdad es demasiado grande.

Llego a la recepción y me encuentro con una chica rubia más alta que yo pues mi estatura fue robada se ve de unos 23 o 24 años.

— Buenos días en qué puede ayudarle - Me dice una ves que me ve.

— Buenos días.. tengo una entrevista a las siete en el piso quince - Ella asiente buscando en su computadora para luego mirarme.

— Efectivamente, suba a el quinto piso a mano derecha al fundo ahí una puerta con la letra M entre ahí - Asiento alejándome a el ascensor.

Se demoro mucho en subir la verdad paro en la mayoría de los pisos, sigo las indicaciones que me dio la chica llegando a la puerta doy tres toques y escucho el pase.

Abro la puerta algo nerviosa y la oficina es bastante grande tiene vista a las calles en una pared tiene algunos libros y él está de espaldas hacia mi en su silla.

Siento que eh visto esta persona en algún lugar tengo que verle la cara para saber en donde así que me dispongo a caminar para ponerme enfrente de él, poco a poco se va volteando en su silla y mi boca cae a el suelo.

— Toma asiento - No lo puedo creer si es el mismísimo miran el amor platónico de mi amiga Laura y primo de Caled.

— Ya puede serrar la boca y sentarse - Salgo rápidamente de mi ensoñación serrando la boca y sentándome frente de él.

— Oh.. Disculpe - Digo tomando mi compostura. ¿Porque Caled no quería que viniera si es su primo el que podrá ser mi nuevo jefe? Porque me habrá dicho que no, necesito averiguar esto.

— Cómo sabe yo soy el primo de Caled trabajo aquí y necesito una secretaría - Asiento mientras habla.

— Si usted logra pasar la entrevista será mi secretaria por ahora asta que esté preparada para darle otro lugar de trabajo como jefa - La verdad eso sería increíble.

— Ya con esto dicho comencemos con la entrevista - Asiento mientras él toma unos papeles.

— En que trabajaba antes - Pregunta él con su vista en el papel aun.

— Hera mesera en una cafetería - El sabe donde es porque varias beses lo atendí.

Asiente y prosigue.

— Carrera estudiada.

— Administración de empresas.

— Pareja sentimental.

— Novio - El me da una mirada rápida antes de continuar.

— Vive con familiares.

— no.

— Ah que se dedican sus padres.

— Trabajan en empresas.

— Cuantos años tiene.

— 22

— Con quien vive.

— Sola.

— Se siente capacitada para este trabajo.

— Si.

— Bueno no ahí más que decir esta contratada y puede iniciar desde mañana - Lo miro asombrada ni me pregunto porque eh escogido este lugar. así de sencillo es.

— Ah.. y otra cosa - Interrumpe el — No me gusta la impuntualidad, me gusta que el trabajo esté por encima de cualquier cosa.

— Si señor - Le digo una ves termina con lo suyo.

— Mañana le enseño su oficina que por ende está a un lado de la mía - Asiendo levantándome.

— Es un gusto trabajar con usted - Le digo cuando nos levantamos y estoy estrechando su mano.

— Lo mismo digo. Para mañana también estará el contrato listo. Voy a enviarle un correo para que lo lea y me diga si está de acuerdo o no. Ya con esto se puede retirar - Asiento dándome la vuelta para salir de la oficina de mi nuevo jefe.

La verdad me siento rara no se porque creo que me está mirando siento sus ojos en mi espalda y eso me incómodo.

Ya en la puerta respiro profundo mirando así el camino del ascensor y mis ojos lo ven, es el se ve algo estresado caminando con unos papeles en mano.

— Caled - Lo llamó y él rápidamente voltea a mirarme.

— Lía - dice el.

— Cariño que tienes te ves estresado - Digo caminando hacia el.

— Nada - Me dice con su vos ronca, le doy un beso que me corresponde rápidamente como si lo necesitara.

— Ven. vamos a mi oficina - Me dice tomándome del brazo para que lo siga.

Su oficina queda en el piso dieciséis a mano izquierda y en la puerta está la letra C supongo que la inicial de su nombre.

Entramos en esta y él le hecho seguro a la puerta antes de entrar y sentarse en su silla poniendo los papeles aún lado. Le doy un repaso a el lugar.

Es igual de grande como la de mi nuevo jefe esta está pintada de negro su escritorio está de igual color al igual que su silla. Me siento al frente y el me mira con esos ojos azules como el mar.

El me mira unos segundos antes de preguntar — Como te fue en la entrevista - Me muerdo el labio antes de responder.

— Bien.. ya tengo trabajo comienzo mañana - El me mira no muy feliz — Qué pasa cariño, no me digas que tu primo es un mal jefe - Trató de bromear pero creo que no está de humor ahora.

— Me alegro por ti - Habla de mala gana y frunzo el ceño.

— Qué pasa Caled.. porque estás tan cortante - La verdad no lo estoy entendiendo.

— Nada - vuelve a decir pero estoy segura que detrás de ese nada ay mucho más.

Posesivo Where stories live. Discover now