RWBY: ZX Legacy

Visita Familiar

En la entrada de lo que era el campamento de los bandidos, Cinder Fall, Arthur Watts, Emerald Sustrai y Mercury Black sólo estaban esperando mientras los bandidos los rodean, mirándolos con atención. A su vez, que Cinder pensaba que esto iba tan bien como lo pensó.

Raven sale de su tienda con su máscara puesta mientras se dirige a sus bandidos. Vio a los 4 peones de Salem... sabía que era la hora de actuar y de que otra oportunidad, no tendría jamás.

-No recuerdo haber invitado a tantos invitados a nuestra casa. ¡O estoy perdiendo la memoria o todos han perdido el valor! – Lo dijo con un tono de voz que daba a entender su sarcasmo, pero a la vez su molestia.

-No te enfades demasiado con ellos, Raven. – Cinder de le acercó a la mujer. - Tus hombres simplemente reconocieron el poder de una Maiden cuando lo vieron. – Raven vio como sus ojos brillan y crea un rastro de fuego en la mano. - Por eso nos gustaría hablar contigo.

Era la hora de la verdad... no había otra salida. Raven se dirigió a los bandidos.

-Déjennos. Empaques sus cosas, luego desarmen el campamento. Nos estamos mudando.

Todos los bandidos se van para hacerlo dado que una vez ella dice algo, se cumple. Todos sabían que Raven Brawnen era una persona con la que no te deseas meter. Y una vez se fueron

-Un poco tarde para correr y esconderse. Has estado en nuestra lista de maestros durante algún tiempo, por lo que debes comprender que no podemos permitir que te escapes.

Raven no miro al hombre, se notaba como un pelele y que pensaba que por ser muy listo, nadie lo superaría. Je... ya verá.

-Sé todo sobre tu maestro, pero no creo que nos hayamos conocido. – Trataba de jugar, quería ver cómo reaccionan.

-Somos los chicos a los que debes temer. – Dijo con Mercury con una sonrisa que mostraba su sentimiento de superioridad.

-¿Cómo puedo temerle a una persona que en sí, no tiene ni la convicción de hacer las cosas a la cara? Veo que no sabes nada de cómo son las cosas, niño.

Mercury estuvo a punto de responderle, pero...

-Silencio. – Cinder cayó al chico antes de que haga algo más.

-Eso es lo que pensé. – Raven tenía que llevar el ritmo de las negociaciones. Tenía que hacer, que se traguen la mentira.

-Soy Cinder Fall. Este es mi socio, Arthur Watts, y mis discípulos, Emerald y Mercury.

-Dos niños a los que engañaste para que te siguieran, un científico atlesiano caído en desgracia y una doncella de otoño con un apellido tan apropiado que probablemente lo eligió ella misma. Algo me dice que tienes más que un leve caso de egomanía, ¿no lo crees?

Raven sabe que este es un juego peligroso, que puede que las cosas le salgan más que mal. Pero tampoco tiene otra salida. Tiene que hacerlo, tiene que hacer esto...

Mercury y Emerald intercambiaron una breve mirada, mientras Watts se aclara la garganta.

-Técnicamente, también era médico, pero debo decir que el resto fue acertado. – Raven rodó los ojos, vaya que ese hombre le gustaba mostrar que tenía la razón.

-¿No eres perspicaz?

-Es lo que me mantuvo con vida. – Más veces de las que desea admitir. Además, que jugar este teatro, es lo que...

-Me temo que la única razón por la que sigues viva es porque tienes algo que nuestro maestro quiere. Por supuesto, si me equivoco ...

Cinder activa su poder de Doncella nuevamente y extiende una pequeña llama en su mano derecha, sonriendo maliciosamente.