Inesperado [Drarry]

El Juicio

Se despidió de las chicas y marchó hacia su siguiente clase con una sonrisa boba en su rostro. La idea comenzó a agradarle.

El rubio estaba completamente fastidiado. Se quejó de su madre pues ella le había dicho que fuera novio de Astoria Greengrass, con el fin de que toda la fortuna Malfoy no se les fuera de la mano, ¿Habría algún momento en el que su opinión contará?

Suspirando se resignó, sus padres nunca verían nada más que por el bien y fortuna del apellido Malfoy

Apartando bruscamente a Astoria se alejó rumbo al castillo.

Llegó a las mazmorras dónde espero ver a Harry, pero sin embargo no se encontraba. Se decepcionó pues el pensaba que irían juntos a la clase de transformaciones. Recordó que le dijo que iría con Granger.

Tomó sus cosas con furia pues al hablar con Astoria lo ponía de un humor de perros. No comprendía como su madre le había pedido tal cosa.

Harry tenía una sonrisa boba en el rostro. Sonrisa que se borró al ver a Astoria Greengrass hablando con Ginny Weasley. Le dio muy mala espina y sacando la capa de invisibilidad de su mochila, las siguió.

-¡Te lo juro! Draco no me hace caso y sinceramente no creo que seamos algo más que prometidos...

-As, no sé que decirte. Harry ya no me hace caso y cada vez que lo veo viene acompañado de esa sucia serpiente mortifaga.

Harry se enfureció, lo cual quedó completamente atrás al ver que Astoria no defendía a su prometido.

-Exactamente, sucio mortifago. Si no fuera porque mi padre me ha exigido que fuera su novia yo estaría con alguien más.

-¿Pero a ti no te gustaba?

-¡Por Merlín! No, claro que no. En familias de sangre pura hacen esto para preservar el apellido. Pero lo tengo que "enamorar" porque Lucius no quiere que su primogénito sea homosexual. ¡Que asco!

Harry pasó por varios sentimientos; asombro, felicidad, angustia, enojo y finalmente furia.

El resto del día nadie se metió con el, bastaba con ver su ceño fruncido y sus labios apretados para darse cuenta que estaba de mal humor.

Evitó al rubio cuanto pudo y en las habitaciones puso un hechizo para evitar que se viera.

Draco se extraño ante ese gesto, extrañeza que abandonó su cuerpo al recordar que faltaban menos de veinticuatro horas para declarar en el juicio de sus padres.

Con nervios en su estómago, se dejo llevar por el sueño.

€£¥§

Harry despertó con el humor considerablemente mejor y mejoró más al ver a su amigo platinado en la cama continua. Era sábado y por lo tanto no tenían clases, sin embargo no pudo pasar por alto el hecho que de ese día era el juicio contra los Malfoy.

Vió su reloj de muñeca y se alivió de ver que faltaban tres horas para la cita así que tomó su ropa y fue a ducharse.

El rubio empezó a despertar y se sintió aliviado al oír el sonido del agua cayendo, señal de que alguien se estaba duchando, pues desde el día anterior, Harry lo había estado ignorando. Harry salió con una vestimenta que dejó completamente con la boca abierta al rubio, pues se veía...sexy. La palabra apareció fugazmente provocando un fuerte sonrojo al rubio. Disimulando le dio a Harry los buenos días y se metió al baño tan rápido que pareció que se hubiera aparecido. No alcanzó a ver un leve sonrojo en las mejillas de su compañero.

Salieron de las mazmorras  hablando de lo que tenian que decir, que no tenía que estar nervioso y sólo responder lo que te preguntaran.

Harry, quién ya había tenido experiencia con los juicios del Ministerio, se sintió muy nervioso pero se obligó a recordar que Draco Malfoy era el que importaba, por lo que no se preocupó más.