Inesperado [Drarry]

Dejar atrás tus miedos

Cuando Harry sanó, el rubio no perdió tiempo y junto a él, echaron a correr hacia las mazmorras.

Tener habitación compartida era una ventaja y si alguno de los dos hacia ruido más de lo debido, un hechizo silenciador lo podría arreglar. Se derrumbaron en la cama y una lucha feroz de besos comenzó...

El rubio quería estar dentro de su novio y su mano viajó por el cuerpo del otro. Harry lo dejó, pero estaba consiente de que tenía miedo. Quizá demasiado.

La lucha siguió y pronto ambos se encontraron sin camisa, admirando el hermoso abdomen bien formado a causa del Quidditch de su novio.

Draco comenzó a trazar círculos al rededor de su ombligo mientras sus labios succionaban el cuello del león. La mano traviesa abría paso a través del pantalón.

Los juegos siguieron, jadeos y gemidos y ninguno fue ya capaz de contenerse, en ambos cuellos había marcas que durarían varios días...

El rubio tomo el miembro del ojiverde y empezó a más turbar lo. Los gemidos fueron ahogados con feroces besos. El moreno ansiaba más y más pero nunca se lo diría a nadie, ante todo el orgullo...

Harry estaba nervioso, nunca había estado con nadie y nunca se imagino que su primera vez fuera con un hombre y mucho menos con Draco Malfoy, su ex-enemigo.

Una duda asalto su mente ¿quien sería el pasivo?

Probablemente el.

El moreno detuvo al rubio y este lo miro confundido ¿lo había lastimado?

El moreno empezó a llorar, desconcertando a su novio.

-¡Hey! ¿Qué pasa? ¡¿Te lastime?! -preguntó con evidente preocupación.

-No... so-sólo tengo miedo... -murmuró con la cabeza gacha.

-Harry, si no quieres hacerlo hoy no te preocupes, estoy dispuesto a esperarte toda mi vida si es necesario.

Las lágrimas de Harry cesaron al instante y miro a Draco, el le devolvió la mirada con tanto amor que el otro se sintió en un estado de ensoñación.

Tomó de la nuca al rubio y lo besó, lo besó con ternura, amor deseo y miedo. Tomó un respiro mentalmente y con valor acarició el cuerpo de su novio, quien tomó esa señal para continuar con su labor.

Después de tiempo de besos y mimos Draco chupo un dedo y cuando estaba escurriendo saliva lo dirigió a la entrada de Harry. El moreno se sobresaltó al sentir la invasión pero rápidamente se acostumbró.

-No vayas tan rápido ¿si?

Asintió en respuesta.

Tres de los dedos de Draco ya estaban dentro de su novio y estos hacían movimientos en círculos, como tijera y algo más que enloquecían a Harry. Sus dedos se retiraron y con su varita hizo un movimiento fluido, Harry supo que había usado un encantamiento no verbal seguramente para traer algo y estaba en lo correcto cuando por el rabillo del ojo vio un vial con poción lubricante.

Draco metió la mano en el vial y empapó su mano con el producto para después dirigirlo hacia su miembro, el cual estaba completamente erecto y exigía atención a gritos. Miró a Harry y éste con un asentamiento le indicó que podía continuar, así lo hizo.

Entró lentamente con
deleite ante tal estrechez y buscó el punto que volvería loco a su amado (el cual tenía cara de sufrimiento total) y cuando la punta de su pene tocó su próstata, Harry soltó un gemido tan alto que se habría escuchado hasta Hogsmeade. El rubio lo supo, ese era el punto.

Pacientemente espero a que Harry se acostumbrara para proseguir, con un movimiento de cadera Harry le indicó que siguiera.

Las estocadas que el rubio producía eran tan placenteras que Harry creyó haber muerto y estar en el cielo ¡Eso era la gloria!

-Dra...Draco...dame...más duro...más-gemia

-Hum, ¿estamos ansiosos? -Sonrió petulante.

- I-diota...

El rubio decidió complacerlo y ahora sus penetraciones eran tan intensas al punto en que sus testículos chocaban deliciosamente contra el trasero de Harry. Draco tomó el miembro de Harry y conforme las estocadas aumentaban la velocidad, el clímax de tan delicioso sexo estaba por llegar, aferraba el pene con tanta fuerza que Harry estaba extasiado de placer intenso.

Draco cubrió el pene de su novio y lo estimuló más con movimientos verticales haciendo que gotas de líquido pre-seminal salieran disparados hasta la cara de Draco.

-Draco... Me ... Me voy a .... Correr- gritó roncamente...

Los movimientos eran tan rápido que Harry no tardó en venirse haciendo que su interior quedara tan apretado provocando que el rubio se corriera dentro de el.

Su semen se sentía como la gloria, dentro de él, tan espeso y caliente, tan fluido y blanco. Harry descubrió su fascinación por el semen de Draco dentro de él ese día.

Sus respiraciones se volvieron acompasadas y el ritmo cardíaco de ambos iba disminuyendo. Draco se desplomó junto a Harry y se acurrucó en su cuello, Harry conjuro un rápido hechizo de limpieza y se acercó más a Malfoy.

-Te amo, hurón desteñido .-murmuró con la voz cansada y los ojos entrecerrados.

-Te amo más, San Potter.

Y ese día Harry supo cuán grandes podrían ser las recompensas si dejaba atrás sus miedos, en esa noche, que sería la primera de muchas.