Inesperado [Drarry]

Capítulo Cuadragésimo Noveno: Albus

-Astoria Greengrass, en este momento y  deliberando por el asesinato de su madre, al ser cómplice de la desaparición de Ginny Weasley y mintiendo sobre la verdad de la mencionada, los miembros del Wizengamot la condenamos a tres semanas en Azkaban...-

Harry cerró los ojos con dolor. El sabía lo que iba a suceder.

- Y posteriormente arreglados ciertos detalles, será besada por un dementor.

La cara de Astoria era un blanco mortal, sin embargo no mostró ninguna emoción. Cuando le pidieron su varita, la tendió sin miramientos al Auror frente a ella. Su cara había permanecido impasible al ver como el mismo  la había partido por la mitad para posteriormente, quemarla.

Astoria no miro a nadie más que a Harry cuando la escoltaron a su celda provisional.

Y en esa mirada, Harry entendió que tenía que cuidar a sus dos hijos y a su novio.

Y lo haría. Harry sería capaz de dar la vida por ellos.

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-¿Porque no moriste ese día? - La pregunta había sonado más cruel de lo que hubiera querido. Cerró los ojos con arrepentimiento, imaginando que Draco lo odiaria por la mención del suceso mismo.

En cambio, Draco se sentó en sus piernas y lo abrazó por el cuello.

-Creo que tiene que ver con el hecho de que tú me amas, cariño. Tu madre hizo lo mismo contigo ¿no? Ella te protegió a costa de tu vida. Eso y pues... Tú magia es muy fuerte pero creo que no lo pudiste notar. Todos ese día estábamos asustados. Tu magia se sentía tan poderosa...

-¿Qué pasará con Scorpius? - le preguntó sin sentimiento en su voz.

-Legal y biológicamente es mi hijo, así que solo tendré que esperar a que le den el alta en el hospital. A pesar de que les dije que Astoria no le había dañado, quieren hacerle unas pruebas.

-Y tú vivirás con él solo... ¿No?

La cara de Harry reflejaba miedo. Con Draco como padre ¿Qué le aseguraba que su relación tuviera más futuro?

-Harry... - sonrió- Me gustaría demasiado que me acompañaras en esto de ser padre. No se como tratar si quiera a un bebé pero estoy seguro de que junto al Salvador del Mundo Mágico, quien además es mi novio y un león con todas  las de ley en la cama, lo lograré - Finalizó otorgándole una sonrisa que escondía perversión.

Harry sólo pudo esconder la cara en el cuello de su novio. Sorprendido por las palabras dichas por éste y sonrojado por lo último.

-No puedo ser un león con todas las de la ley si no me he sabido ganar el título, Dragón.

Draco rió y le sonrió. Dándole un beso en la comisura de los labios.

-Y... ¿Si Scorpius tiene un hermano?

Draco lo miró sin comprender ¿Había escuchado bien?

-¿Un hermano? Pues a menos que le pidamos a alguna bruja que sea madre de alquiler....

Calló a medida que Harry negaba lentamente.

-No sé cómo vayas a tomar esto pero... Creo que soy padre.

Por la cabeza de Draco pasaron miles de ideas. Que si Harry le había sido infiel, que si Harry había adoptado a un pequeño mago...

-Explicame - Draco usó ese tono serio que Harry no había escuchado desde Hogwarts.

-Verás, cuando rescatamos a Ginny de Dean tú no pudiste saber nada de lo que pasó pues... Moriste -Aún le dolía decir eso. - Fui al hospital a saber su estado y me dijeron que una de las pócimas que le habían hecho beber, al parecer hacía que ella quedara en cinta. Aún no sé como pero... Cuando la rescatamos estaba casi por dar a luz. No podían ni siquiera hacer una cirugía muggle porque al sellar su magia... Esta hizo un campo para proteger al bebé. Costó mucho que Ginny logrará... Tenerlo.

Draco lo escuchaba atentamente.

-Ella no me reconocía. O al menos eso pensaba hasta que el prometido de Hermione me dijo que ella había decidido que yo me quedara con el bebé. Y lo hice. Draco, si decides aceptar eso... Scorpius no crecerá solo... No crecerá cómo nosotros.

Draco no dijo nada. Harry comenzaba a arrepentirse.

-Bueno - Harry levantó la cara - Habrá que buscar donde vivir ¿no?

Harry se abalanzó contra el y besó sus labios con todo el cariño posible.

-Estaba pensando en Grimmauld Place pero... Esa casa no tiene buenos recuerdos. Tal vez después veamos eso - murmuró Harry besando el cuello de su dragón.

-Harry, quiero ver a nuestros hijos... - murmuró cariñoso Draco, besando su mejilla.

Nuestros hijos...

Qué hermoso suena eso.

Harry abrazó a su novio del cuello mientras el rubio hacía lo mismo con su cintura.

-A San Mungo... - Susurró Harry sobre los labios de Draco.

-A San Mungo - Repitió Draco, besando esos labios que sólo lo estaban tentando. Al finalizar, Harry sintió la conocida sensación de la desaparición e inconscientemente abrazo (si cabía más) a su novio.

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-Son hermosos ¿no? - Preguntó Draco mientras tomaba al bebé  y lo cargaba. Harry hacía lo propio con Scorpius.

-¿Como se llamará? Me gusta mucho el nombre que escogiste para Scorp... - murmuró Harry distraído.

-¿Sabes? Scorpius es el nombre de una constelación... Pero me gustaría un nombre que no tuviera nada que ver con Astronomía. Toda mi familia tiene nombres así, incluso yo. Me gustaría que se llamara Albus...

Harry lo miró sorprendido. No podía creer que Draco, su narcisista novio, no quisiera seguir una tradición muy arcaica de su familia.

-Pero si quieres elegir otro nombre también puedes, Harry. - murmuró nervioso al ver que su novio no le respondía.

-Severus... Quiero que se llame Albus Severus. - murmuró besando la mejilla de Scorpius, mientras el bebé lo veía atentamente.

-¿Severus? - murmuró sorprendido- me gusta como suena, a decir verdad.

-Y James.

-Amor, solo dos nombres... - respondió Draco aguantando una risa.

-No me refería a eso - dijo el ojiverde riendo- Scorpius James... O James Scorpius. Es tan difícil escoger la combinación perfecta para nuestros bebés.

- James Scorpius y Albus Severus... Pero cariño, yo quiero mi apellido antes que el tuyo - le dijo acercándose a él y mordiendo su labios provocándolo.

-Eso ya lo veremos - Harry besó ferozmente los labios del rubio. El clic de una cámara hizo que se separaran. Draco vio la puerta y descubrió a Hermione con una cámara parecida a la que le recordaba a Collin Crevey.

-Salen hermosos, chicos. - Dijo la castaña con una hemorragia nasal, siendo de la puerta y dejando la cámara.

Harry se acercó y vio la fotografía. Sus ojos se empañaron al ver a su rubio con Albus en brazos y a él, haciendo lo mismo con Scorpius, mientras Harry besaba a Draco, tomando su camisa para acercarlo más a él.

Ahora, todo estaba bien. Con Draco a su lado y dos hijos hermosos, Harry sería que era capaz de todo.

Tomó la foto y se la mostró a Draco. El rubio le sonrió y beso su mejilla.

-Harry...

- ¿Si?

-Tú cambiarás los pañales