༻ Capítulo 68: Protégelo ༺

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El carruaje se detuvo en la entrada del taller, y sin esperar a que Xiao Zhige extendiera la mano para ayudarlo, An Changqing bajó solo del carruaje. Xiao Zhige miró su espalda mientras se lanzaba al interior del taller y sacudió la cabeza con impotencia, por lo que sólo pudo seguirle dentro.

El taller se construyó justo al lado del campamento militar. En la parte delantera estaba la portería y el vestíbulo, en el centro las dependencias de los artesanos, y en el patio interior era donde los artesanos hacían su trabajo. La primera versión del silo de madera se fabricó en el patio trasero.

Cuando An Changqing siguió al maestro hacia el interior, vio un contendor de casi tres metros de altura que reposaba tranquilamente en el patio, con una gran rueda redonda unida a un tubo de madera para extraer agua, y un abrevadero en la parte inferior. Era casi igual a la que había visto en su vida anterior.

"¿Lo has probado en el agua?" preguntó An Changqing.

El maestro dijo respetuosamente: "Todavía no se ha puesto en el agua. Hemos hecho uno más pequeño antes, pero cuando lo probamos en el agua, cogió muy poca agua, así que hicimos uno más grande."

An Changqing levantó la vista y pensó que en su última vida había visto un contenedor cilíndrico que podía regar dos acres de tierra. Si realmente se pudiera desarrollar con antelación...

"¿Cuándo puedes meterlo en el agua?"

"Está listo para entrar en el agua hoy". El maestro dijo: "Por eso he pedido a Wangfei que venga a ver si se puede mejorar".

An Changqing estaba muy satisfecho con la rapidez del taller y asintió: "Adelante, si lo consiguen, serán bien recompensados".

Tan pronto como el maestro lo escuchó, su expresión se volvió aún más vigorosa. Se apresuró a llamar a otros para que vinieran a mover los silos.

Los artesanos se ganan la vida con su oficio, con ello obtienen dinero para comer. Ahora Wangfei no sólo estaba pagando muy bien, sino que además era muy cortés con los artesanos. Y lo que es más importante, siempre era capaz de ofrecer nuevas ideas, por lo que los artesanos del taller le respetaban mucho.

Los silos se desmontaban simplemente y se llevaban en carretas tiradas por bueyes hasta un cruce predeterminado del río, donde se volvían a montar y se colocaban en la corriente. La corriente era tan fuerte que las ruedas sólo tardaban unos instantes en girar lentamente; el contenedor de la parte superior de los silos se llenaban de agua y se giraban hasta un terreno más elevado, donde el agua se vertía en una canaleta y se enviaba en un chorro constante hacia la acequia.

An Changqing exhaló profundamente, y sus ojos estaban tan radiantes como siempre: "¡Está hecho de verdad!"

Xiao Zhige había desaprobado en un principio que siguiera a los artesanos, pero cuando vio que el silo empezaba a transportar agua, se sintió conmovido. Nadie conocía mejor que él la importancia de este invento para Yanzhou e incluso para la gente de todo Daye.

En el futuro, bastará con cavar una amplia red de ríos y acequias y transportar el agua hasta el sistema de riego mediante silos, lo que antes exigía mucha mano de obra. Con un riego suficiente, los cultivos crecerían bien y aumentaría el rendimiento. La gente común ya no tendrá que preocuparse del riego y podrá dedicarse a otras cosas...

The Tyrant's Beloved Empress // Traducción EspañolDonde viven las historias. Descúbrelo ahora