5 de diciembre, 2021

21 5 0
                                    

La cena sabía tan horrible, pero no podía crear una discusión cada vez que visitaba tu casa, sólo bebía la limonada y fingía que estaba pasando por un buen momento, como si la vida tuviera buenos momentos. Decidiste dejarme en tu cama, pero no pasaría demasiado para que te involucraras dentro de las sábanas, abrazaste mis disculpas y besaste las cicatrices que habías dejado a lo largo de los años.

El maquillaje no me ayudaba a esconderme, las mentiras ya no podían cubrirme, tenerte tan cerca me hacía sentir tan débil y cuando me abrazabas lograba sentirme inmune de todos los desastres por los que pasé, por los que tú me hiciste pasar.

El amor no era mi mejor compañía, solía abandonarme cuando más lo sentía y le gustaba regresar cuando me perdía, cuando me abrazabas y no lo necesitaba o cuando no lo hacías y deseaba que lo hicieras.

Los poetas malditos nunca mueren IVOnde histórias criam vida. Descubra agora