Capítulo 18: "Dudas"

157 51 26
                                    

  —Porque ni tú, ni tu madre, están a salvo.

Esas palabras daban vueltas en mi cabeza mientras estaba siendo prácticamente arrastrada a la salida por Luke. Salimos del salón sin mirar atrás mientras se armaba un revuelo inexplicable allá adentro.

Matt es hijo del alcalde…

Él nunca confió en mí, nunca me contó quién era su familia tal y como lo hicieron Marcos y Jordan… Pero aún así él no dejaba de ser mi mejor amigo, y algo me dice que ya no lo volveré a ver, una extraña sensación me asegura que él no va a volver.

—¡Detente! —Jalé mi mano de su agarre y él se volteó furioso —¡No pienso ir a ningún lado contigo!

—No hay tiempo para esto… —Volvió a agarrar con fuerza mi mano y me llevó hacia donde estaba su auto aparcado.

Una vez estando junto al Jeep, me dirigió a la puerta del copiloto y me paró frente con frente a él. Luego me miró detenidamente, para finalmente sostener con fuerza mi vestido.

—¿¡Qué mierda haces!? —Le grité mientras veía cómo rasgaba mi vestido hasta dejarlo un poco más abajo de mis muslos.

—Te va a ser más fácil correr así, y veo que traes botas —Respondió sin más, para luego abrirme la puerta y casi que obligarme a entrar en su auto.

Mi corazón estaba desbocado, no entendía nada de lo que estaba ocurriendo. Solo que Luke sabía que Matt no iba a llegar, luego me dijo que mi madre y yo no estamos a salvo para finalmente terminar secuestrandome.

No pienso irme con él…

Saqué la daga que tenía en mi muslo y se la puse sorpresivamente en el cuello en el momento en que se sentó en el asiento del conductor.

—¿¡Qué mierda haces!?

—No pienso irme de aquí contigo, Luke —Presioné la daga un poco más en su cuello pero sin hacerle daño, esa no era mi intención. —¿Qué sabes tú de Matt?

—Eva… no hay tiempo, baja la daga. —Se notaba cierto nerviosismo en su voz.

—¡¿No hay tiempo para qué?!  —Le grité.

—Eva... No quiero hacerte daño, baja la daga.

—¡¡Dime!! —Hice más presión, pero me aterraba la idea de hacerle daño, nunca había derramado la sangre de nadie.

—¡¡Está muerto!! —Gritó.

Una sensación de debilidad se apoderó de mis manos obligándome a bajar el arma. Las lágrimas abordaron mis ojos volviendo mi vista nublada, el cuerpo me temblaba y el vacío llenó mi estómago.

Tranquila —Aún siento su tacto —Sé defenderme, tú me diste el valor.

Esas fueron las últimas palabras que me dijo, sin dudas él sabía defenderse, pero aún así estaba muerto.

—¿Tú lo… mataste? —Mi voz tembló de sólo mencionar esa palabra, luego miré a Luke y extrañamente una lágrima salió de sus ojos.

—No… yo solo quiero protegerte, quienes lo mataron van detrás de tí y de tu madre.

—¿Qué mierda estás diciendo?

—No tienes que creerme si no quieres, pero te pido que confíes en mí porque yo solo quiero mantenerte a salvo. —Arrancó el auto y salimos de ahí a gran velocidad.

El camino hacia Aston sería largo, estábamos a cinco kilómetros del pueblo, pero la carretera estaba llena de agujeros, curvas, desfiladeros, y en una de esa teníamos que pasar por dentro del bosque. Y eso hacía de nuestro viaje algo más peligroso, aunque a Luke no le importaba mucho, pues venía gran velocidad por aquel camino desolado y peligroso.

Sentía lo irregular del camino y por la ventanilla veía el panorama boscoso que nos estaba envolviendo, pero nada de eso me importaba, mientras miraba mi reflejo en la ventanilla lo único en lo que pensaba era en Matt.

—¿En verdad está muerto? —Pregunté sin siquiera mirarlo.

—Fue mi culpa… —Golpeó con fuerza el volante en un ataque de rabia haciéndome estremecer.

—¿Qué eres, Luke? —Él me miró desconcertado.

Y justo en ese momento un ciervo se nos atravesó en el camino, Luke hizo una maniobra con el volante y el auto terminó chocando contra un árbol…

—¿Estás bien? —Preguntó él mientras que yo sólo asentí.

Miró al exterior.

—Tenemos que andar, no hay tiempo. —Bajó del auto, buscó algo debajo de su asiento y sacó una pequeña bolsita de tela que guardó en el bolsillo de su pantalón. Luego rodeó el Jeep y me extendió su mano para ayudarme a bajar.

—Hay que apurarnos, casi se hace de noche. —Repitió él mientras comenzaba a avanzar.

—¿Quién va detrás de mi madre y de mí? —Pregunté mientras trataba de alcanzarlo, pero él me miró por encima del hombro y me ignoró totalmente.

—Ahora no me vas a hablar… ¿Mataste a mi amigo y también me ignoras? —Ese fue el detonante…

—¡No vuelvas a repetir eso! —Me giró con fuerza para que mi cuerpo quedara frente al de él —¡¡No sabes nada!! —La rabia era evidente en sus ojos verdes, los cuales de solo verlos me causaban temblores.

  Yo caminaba de espaldas para vigilar los acelerados pasos que él daba hacia mí, hasta que mi espalda chocó con el tronco de un árbol, quedándome acorralada entre el árbol y la bestia furiosa que estaba frente a mí.

Mierda, me va a matar...

—¡Debí separarte la carne de tus huesos débiles, y ahora no estuviera pasando por esto!

¿La carne de mis huesos débiles?

Yo escuché eso…

—¿Eras tú? —Lo interrogué con la mirada —¿Tú eras un… lobo? —Realmente estaba confundida, ni yo misma creía lo que acababa de decir en voz alta, pero en cambio, el rostro de Luke no era de sorpresa, ni de burla por la locura que acababa de decir.

Él solo inhaló y luego exhaló tratando de recuperar la compostura.

—Como ya te dije… no sabes nada… Tenemos que encontrar a tu madre.

~~{•}~~~{•}~~~~{•}~~~~{•}~~~~{•}~~~~

Hola, hola, fieles lectores.

Ya casi se acerca la Luna de Sangre.

Por favor, locas teorías en este apartado.

Los quiero ❤️

        

Secretos de Sangre  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora