capitulo 141

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Después de un rato, Lisa se quitó la ropa de trabajo y se puso la ropa informal de casa antes de bajar las escaleras. Sin embargo, cuando vio la mesa vacía, miró a Jennie y preguntó: "¿Dónde está la comida?".

Jennie caminó hacia Lisa y rápidamente rodeó su cintura con sus brazos mientras hundía su rostro en su pecho.

Lisa la apartó suavemente y le preguntó: "¿Ya no quieres seguir actuando?".

Jennie negó con la cabeza antes de volver a abrazarla inmediatamente. "No, no más actuación".

Esta vez, Lisa no se alejó y le devolvió el abrazo con fuerza. "¿Qué pasó?"

"Me siento extremadamente deprimida cuando pienso en ese período de tiempo en el que aún no eras oficialmente mía", respondió Jennie mientras suspiraba. Continuó apoyándose contra el pecho de Lisa mientras decía: "Todo es perfecto ahora. Tú me perteneces y eres toda mía".

Jennie siempre tuvo muchas ideas y planes diferentes pero siempre cambiaba de opinión de la nada. Sin embargo, Lisa ya estaba acostumbrada.

"Entonces, señora Manoban, ¿podría subir las escaleras y bañarse conmigo ahora?"

"Hmm... pero quiero que me cargues."

Lisa no pudo evitar reírse cuando escuchó las palabras de Jennie. "Siempre estás afuera lidiando con todo tipo de asuntos trascendentales durante el día, pero ¿incluso el viento podría llevarte cuando estás en casa conmigo?"

"Me encanta estar contigo y estar cerca de ti. ¿Tienes algún problema con eso?" Preguntó Jennie mientras besaba el cuello de Lisa. "Grabaré el quinto y último número de mañana. Esta vez estaré fuera durante casi una semana. ¿No me extrañarás en absoluto?"

"Naturalmente, descubriré adónde tendré que ir si te extraño".

Jennie hizo un puchero porque todavía estaba infeliz. Continuó rodeando el cuello de Lisa con sus brazos y la abrazó con fuerza, negándose a soltarla.

Ella era así de infantil frente a sus seres queridos.

Más tarde, ambos se sumergieron juntos en la bañera y fue solo en ese momento que Jennie de repente se dio cuenta de que Lisa había estado usando su anillo de bodas en su dedo desde la otra noche. Jennie levantó la mano de Lisa antes de preguntarle: "¿Nadie se ha dado cuenta y te ha preguntado por qué llevas un anillo?".

"¿Cómo te gustaría que les respondiera?" Preguntó Lisa mientras colocaba su mano alrededor del cuello de Jennie.

"Tengo a alguien en casa".

"Muy bien, entonces. Si alguien pregunta sobre mi anillo, se lo diré", respondió Lisa y sonrió mientras miraba el anillo en su dedo.

En ese momento, Jennie finalmente sonrió porque finalmente estaba satisfecha y contenta.

...

En medio de la noche, las brillantes luces de neón de la ciudad parpadeaban y brillaban intensamente, resaltando el ajetreo y el bullicio de Seúl.

En ese momento, el hermoso y lujoso candelabro de la mansión de la familia Choi todavía brillaba intensamente.

Después de ducharse, Kim Dasom pensó por un momento y contó los días mientras miraba el calendario. Su marido probablemente pasaría la noche en casa de Hani hoy.

Por lo tanto, inmediatamente sacó su teléfono celular antes de llamar a su marido. "Ven a casa y duerme esta noche. Tengo algo que decirte".

"Está bien, lo tengo", respondió su marido al otro lado de la línea sin mostrar resistencia alguna. Después de responder brevemente, colgó el teléfono inmediatamente.

La mejor actriz más dulce de mi casaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora