17. El Deseo de Aprender

35 5 0
                                    

Hermione recogió sus cosas y salió de la biblioteca poco después de que Draco se marchara, dejando suficiente tiempo entre sus salidas para dejar claro que no lo había seguido. Colocó un encantamiento protector sobre el diario de alquimia de Ravenclaw para proteger su frágil encuadernación antes de meterlo en su abarrotada mochila.

El Gran Comedor estaba abarrotado a la hora de la cena. Harry no aparecía por ninguna parte, aunque Ginny estaba sentada con Luna. Para sorpresa infinita de Hermione, Ron estaba sentado con Daphne, Daphne, en la mesa de Ravenclaw. Tuvo que mirar un par de veces, y luego sonrió porque en secreto pensaba que Ron sería bueno para Daphne. Como no quería molestarlos, Hermione se dirigió hacia Ginny y Luna y se sentó en la familiar mesa de Gryffindor. Una sensación de agradable nostalgia se instaló en su estómago.

-Hola, Hermione, -sonrió Luna al verla acercarse.

-Buen Godric, trajiste la mochila a la cena, -dijo Ginny a modo de saludo. Luego, poniendo los ojos en blanco-, Claro que sí.

-Yo también me alegro de verte, -resopló Hermione, depositando su mochila junto a ella en el banco. Luna había puesto toda su atención en un número de El Quisquilloso, la primera publicación de la revista desde que Xenophilius había reanudado la producción después de la guerra.

-¡Ooh, pero trajiste drama masculino! -Ginny lo notó perceptivamente.

En su fuero interno, Hermione habría maldecido en todos los colores si hubiera sido propensa a tales reacciones viscerales.

-No hagas que me arrepienta de sentarme aquí.

-Nunca te arrepientes de sentarte conmigo, -dijo Ginny, deslizándose más cerca-. Cuéntamelo.

-No.

-¿Por qué no?

-Porque no hay nada que contar.

-Me comeré un hipogrifo si eso es cierto, -se burló-. Puedo verlo en tu cara, y si no me lo dices, me veré obligada a usar mi imaginación.

-Eres imposible.

-Veamos... estás en medio de un enredo amoroso. Te besuqueaste con Oliver Rivers y fue mediocre, pero no quieres romperle el corazón. Mientras tanto, tanto Nott como Malfoy siguen intentando tenerte a solas... seducirte para que te unas a sus causas oscuras...

-Deberías escribir novelas románticas baratas, -reprochó Hermione.

-...Nott te ha ofrecido sexo en la sección prohibida...

-¡En serio! -se burló Hermione, enrojeciendo ante la sola idea-. Teniendo en cuenta que Slytherin es la Casa que más valora el tradicionalismo, ¿de verdad crees que también es la Casa que produce el mayor volumen de escorias masculinas?

-...Pero Malfoy te desea más porque eres el fruto prohibido, -continuó Ginny, sin inmutarse-. Cuando estáis solos juntos en las cuevas patrullando... -Hizo una pausa y miró a su amiga un momento-. Ni siquiera sabía que conocías términos como "escoria masculina".

Hermione hizo una mueca.

-Y para colmo, Ron ha admitido que aún siente algo por ti. Aunque no estás enamorada de él, es tentador tener una opción segura, así que lo estás considerando...

-¿Has visto a Ron? Creo que ya no está interesado en mí.

Ginny torció el cuello y sus ojos se fijaron rápidamente en Ron, probablemente por su vibrante cabello Weasley. Estaba sentado frente a Daphne, que se reía por algo que él había dicho, y parecía sonreír ampliamente.

The Eagle's Nest - Dramione (Traducción)Where stories live. Discover now