91. Vuelvo.

1.2K 70 22
                                    

Narra Gastón.

  Soy un ausente de mi presente. No puedo creer que tan solo en un día pasaron tantas cosas, Nina me dedicó una canción, revelé que soy Roller Track, Ámbar me defendió de las fans,   y...

– Bueno, bueno, tenemos al fin al chico fuera de la pantalla.- aplaudió Matteo entrando al vestidor mientras buscaba mi mochila. – Hay alguien esperándote para hablarte.- indicó haciéndole señas a alguien, Nina. Al verme, lo primero que hizo fue abrazarme. – Mejor los dejo solos...- acotó mi amigo cerrando la puerta.

- ¿Cómo estás?- preguntamos los dos a la vez.

- Las damas primero.- indiqué nervioso, siguiendo las normas que mi mamá me había inculcado de muy chico.

- Bien, me duele un poco la cabeza, pero estoy bien, feliz de que esta vez me lo dijeras tomando todas las precauciones posibles. Me es difícil creer que no pude ver que todo este tiempo estabas a mi lado.- declaró dándome un suave golpe en el brazo. -¡¿Tienes idea de las horas que me pasé pensando en vos?! Es decir si no pensaba en Roller Track pensaba en vos y todo porque eran la misma persona.

- Perdón, Nina, quise decírtelo antes pero no pude.- Armé una cárcel en mi mente que cerré con llave con temor de que sentiría Nina, ¿y si volvía a tomárselo mal? ¿Y si se sentía engañada? Pero superé mis propias barreras, perdí mi miedo por un breve lapso de tiempo.

- Matteo me explicó...- sonrió.

- ¿Todo?- consulté sintiéndome liviano. 

- Eso creo, Andrés y mi salud, ¿se salteó algo?- Matteo realmente me sacó un gran peso de encima.

- Bueno, la primera vez que te dije que era Roller Track te enojaste por lo que pasó con Manuel...- dije haciéndome cargo de mi vida, revelándole mi mayor desmotivación. Me sentí libre, todo parecía en calma.

- Ah... Te quiero como a nadie.- sonrió volviendo a abrazarme.- Nunca voy a conocer a alguien como vos, sos único, ¿podes creer que me enamoré de tus dos identidades?

- Nina, no sé que decir...- admití volviendo hacia atrás el tiempo, recordando todas las acciones y cada momento que nos llevó a este instante.

- No digas nada, vos después de todo sos el novio que buscaba.- dijo cuando la interrumpí con un beso. - Con vos no existe el ayer porque vos reescribiste nuestra historia y creaste una versión todavía más épica. Tanto que viví, tanto que sentí te lo debo todo a vos. Tengo Un Corazón es una canción completamente tuya como mi corazón.

- Te amo.- pensé en voz alta sonrojando a Nina.

- ¿Estoy soñando? Jurame que esto es real, ¿o es un recuerdo?- cuestionó ella perdida.

- No, Nina.- reí.- Es el ahora.- indiqué.

- Es que yo también te amo pero me asusta hacerme ilusiones y luego despertar lejos de vos.

- ¿De verdad?- me toco enrojecer.

- ¡Sí! Con vos siento que no necesito recordar porque sos como la letra de mi canción favorita, no la olvido aunque quisiera intentarlo. Por ahí, me confundo en algunas partes si paso mucho tiempo sin oírla, pero una vez que la vuelvo a oír, se vuelve una parte de mí.- declaró quedándose sin aire, cayendo en mis brazos. 

- ¿Nina?- la llamé. - ¡Nina!- exclamé sin recibir respuesta. La recosté con delicadeza sobre el suelo y comencé a hacerle respiración boca a boca. Sin resultados, llamé a una ambulancia. No quería volver a perderla.

En el hospital llamé a los padres de Nina, ellos tenían que saber que su hija estaba siendo nuevamente analizada y luego estaba por llamar a Matteo cuando él me llamó antes.

- ¿Qué onda, hermano?- saludó él.

- Nina se volvió a desmayar y ahora está siendo analizada por el médico. ¿Y si le pasa algo?

- ¿Se golpeó la cabeza o algo?

- No, cayó en mis brazos pero...

- Dudo que sea algo malo, es  más, creo que ella estará mejor que nunca cuando despierte.

- ¿Por?

- Corazonada mía.- admitió él. - Mañana Luna y yo vamos a visitar ¿sí?

- Bueno, está bien.- asentí sentándome en la sala de espera, atento a novedades.

- Joven ¿qué hace aquí?- me cuestionó una enfermera.

- Espero a mi novia.- dije sin pensar en nadie más que en Nina.

- Ay, muchacho, ella seguirá aquí mañana, no creo que sea nada grave. Ella dió resultados positivos en sus estudios.

-¿Eso significa que ya despertó?

- No, pero estará bien.

- ¿Puedo verla?

- Según el reglamento no, pero siempre quise participar en una novela de amor.- dijo ella abriéndome la puerta hacia la sala en dónde Nina dormía. - Los dejaré solos.- indicó retirándose.

- Nina, no sé si me puedes escuchar pero...- aún me costaba hablar con ella, incluso dormida. -... te quiero dar las gracias, por todo. Me cambiaste la vida dándole un giro de trecientos sesenta grados. Nunca creí que llegaría a tu corazón, pero por tu voluntad, me permitiste alcanzarlo dos veces. Nunca creí que Matteo acabaría siendo mi mejor amigo, que revelaría cantando que soy Roller Track. Lo único que siempre supe es que te amo y eso nunca cambió.- declaré besando su frente con la intención de posar mis manos sobre sus hombros rocé su pecho en la oscuridad.

- Joven, acaba de recibir autorización de la familia de hacer guardia esta noche.- anunció la enfermera.

- Gracias...

- Isabel.- completó ella.

- Muchas gracias, Isabel.- sonreí antes de que ella se retirara. Acerqué un sillón a la camilla de Nina y me dormí a su lado tomando sus manos.

- Gastón...- me despertó la mamá de Nina al día siguiente.

- ¿Ana?

- Sí, desayuna algo.- me dijo dándome dinero para la cafetería.

- No, gracias, pero no tengo apetito.- dije volteándome a Nina.

- Gastón, te prometo que Ricardo, Mora y yo vamos a vigilar a Nina por vos, y te vamos a avisar apenas despierte.

- Insisto, Ana, no tengo hambre. Pero si quiere tiempo a solas con su hija, lo entiendo.- respondí soltando las manos de la chica de mis sueños. Sentí que ella presionó sus manos para que no la suelte, pero debía hacerlo... tengo que respetar los deseos de su familia.

- Gracias.- sonrió Ana mientras me retiraba.

Decidí ir al baño a mojarme la cara para despabilarme. Me sentía con energías suficientes para esperar a que Nina despertara. Me llegó un mensaje de Ana anunciando que Nina estaba despierta y buscándome. Aceleré mi paso hacia la sala en donde mi corazón se encontraba. Vuelvo, y me encuentro con Luna, Matteo y Nina sonriendo.


¡¡¡¡SORPRESA!!!! La inspiración definitivamente no tiene horario(son las 11 p.m en Argentina). Me voy a dormir tranquila porque encontré a Gastón, jajaja.

Éxitos!

L4N

Cambios de Roles | Gastina (Completada)Where stories live. Discover now