Cambios de Roles | Gastina (Completada)

76. Luz Sin Gravedad.

Narra Simón.

- No, no sé si es buena idea.- decía Gastón.

- Deberiamos ir con seguridad.- asintió Matteo.

- No, es que...- decía mirando su celular quedándose boquiabierto.-... tengo este problema.- admitió enseñándonos un mensaje suyo que rompería el corazón de Nina. Matteo echaba humo de las orejas, parece que estaba perdiendo la paciencia.

- ¡Órale!- lo detuve cuando golpeó a Gastón en el brazo. - Puede que el mensaje le haga daño a Nina, pero ella lo entenderá.- indiqué, aunque no estaba realmente seguro, ni yo entendía realmente. - Podrías cantar el nuevo tema de la Roller Band en el Open próximo.

- No es una mala idea, guitarrista. Después de todo, el otro día Nina estaba recordando la frase que Gastón les dió.- indicó Matteo. - Y luego revelas que sos Roller Track.

- Creo que se lo debo.- asintió Gastón.

- Ya te incribo señor Track.- reí.

Narra Nina.

- Te doy esta oportunidad para que me lo digas a la cara.- dije seriamente cuando se apartó mirando alrededor.

- ¿No preferís oirlo de Gastón?

- Con él hablaré después, ahora decime exactamente lo que le dijiste.- ordené cruzándome de brazos.

- ¡Está bien! ¡Es mi culpa que tengas amnesia! Quería golpearlo a él pero te ataqué a vos accidentalmente.- decía abrazandome y yo lo aparté con una cachetada.

No esperaba oír eso.

Significa que Gastón descubrió al responsable y no me dijo nada, pero ¿por qué?

- Te juro que no lo volveré a hacer...- me decía él con la mano sobre el cachete golpeado.

- Más te vale que cumplas con tu palabra y que tampoco me vuelvas a hablar.- le indiqué furiosa.

- Nina...

- ¡Déjame sola!- le grité retirándome hacia mi casa. No sé qué me molestaba más que fuera culpa de Andrés o que Gastón no me dijera nada apenas lo descubrió.

Estaba en mi habitación sola recordando la noche entera mientras los segundos van pasando. No sé cómo podré olvidar la noche en que Roller Track me besó, la misma noche en que le admití a Matteo confusión por Gastón, quien estaba tan lindo pero esperando a otra. Fue la noche en la que descubrí que Andrés era el culpable de mi estado. Noté que había comenzado a llover por lo que tuve que cerrar mi ventana, y una escena surgió en mi cabeza que me dolía más de lo normal.

- Hola, Gastina.- saludó Luna sentada en su cama mientras Gastón y yo entrabamos a su habitación. Matteo también estaba ahí. - Bien, pero muy aburrida. Además, hoy es un buen día para estar afuera y patinar por horas y horas...

- En realidad, está por llover.- le indicó Gastón.

- ¿Neta?

- Sí, así que será mejor que cierres tus ventanas si no quieres terminar nadando en ella.- reí. - Hablando de todo un poco, adivinen ¿quién va a cantar conmigo en el próximo Open?