Capítulo 44: "Planes"

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El día anterior

Andaba Bersatán deambulando en los confines más ocultos de la "Gran Mansión" se abre una enorme puerta de hierro, blindada hasta las tuercas, son pocas las personas que pueden acceder, es una zona muy restringida, ni siquiera Nima tiene permiso de entrar. Retira su huella del escáner, adentro se enciende las luces y pisa una enorme plataforma sostenida por las cabillas de arriba, al fondo advierte un enorme cilindro azul, de esta levitaba un cuerpo inmóvil como si estuviera dormido, era Eva.

Aquel elegante joven se acerca en pasos relajados y observa el cuerpo cubierto por un traje plateado siendo guindados por varios cables, era de un material especial pues la mantenía inmóvil para que no escape. Bersatán le observa con detenimiento, sus ojos agarran un pequeño brillo pues le atrae su belleza, para él es la verdadera imagen de un ser superior, en lo más fondo de su interior anhelaba tenerla, sentía una atracción por ella, la única mujer que ha picado su oscuro corazón.

A pesar de que Nima tenga su parecido, jamás estará a la altura de la original, no para Bersatán. A pesar de que la desea, sabe muy bien que no la puede tener, él le ha propuesto en muchas ocasiones diversas cosas; riqueza y poder e incluso su amor pero ella se niega rotundamente, eso a él le molesta, le llena de emociones que lo arraigan a la debilidad.

Pero hoy vino con otra intención, una bien estremecedora para la pobre Eva.

— ¿Por qué lo haces?— dice con una mirada aborrecedora—No lo entiendo— se queda contemplándola.

— ¿Por amor?

— ¡JAAA!... ¿Cuál amor?— inquiere con gracia— Ellos, no te aman. Te odian, si estuvieran aquí—sonríe—Tú no lo soportarías... ¿Qué dices sobre eso?

No da respuesta pero tiembla un poco.

— ¡Es Estúpido!— exclama— Sabes que no puedes hacer nada. Tus hijos ahora son míos, yo soy su nuevo padre, el padre que siempre debieron tener— extiende las palmas— No sabes lo mucho que me respetan, lo mucho que me aprecian y lo mucho que hacen por complacerme— sonríe con el cejo fruncido.

—En cambio— añade— Tú has estado todos estos años aquí encerrada, terca muy terca. Te eh ofrecido todas la salidas pero tú me niegas. Debes estar conmigo, ellos deberían ser mis hijos, ¡juntos podemos cambiar al mundo!— El eco de su voz se extiende hasta el descenso fondo, Eva sigue ignorándolo.

—Me desesperas Eva, enserio me haces sentir, no lo sé... ¡pero no lo soporto!— se queda pensando— Pero, nada es para siempre y esto no será eterno— suelta con una mirada severa.

Bersatán ríe pero esta risa era de un tono diferente como si ocultara un profundo vacío. Sabe que se le está acabando el tiempo, "El Gran Varón" espera en que la dome. Él desea otra cosa pero sabe muy bien el riesgo que debe correr. El reloj de arena está a unas piedras de culminar y si no logra controlarla perderá todos sus privilegios con la peor de las deshonras, pues El Gran Varón espera muchas cosas de su hijo y si le decepciona, ya no pertenecerá a la secta y será expulsado de la familia.

Bersatán afinca los puños con cólera y miedo, teme perder la aprobación de su padre, pues espera que por fin le reconozca y lo trate con honor. Gime un poco y se restriega los ojos, rasga su garganta y dice —Sé que no puedo matarte. Eres indestructible o tal vez no, puedes que tengas una debilidad o más bien dos debilidades— sonríe— eh creado un virus, mi meta va más allá que la de mi padre y que mejor candidato si no tus hijos. Podrá no tener una debilidad física pero ellos no son como tú, si no cooperas, veras como tus criaturitas infectaran al resto del mundo y después se destruirán entre ellos— ríe con perversidad— ¡Ya lo veras!

Prototypa II -Versus-Where stories live. Discover now