Ilegal

Que comience el juego

Austin

Cuando abrí los ojos, note que estaba encadenado, incluso del cuello estaba amarrado, esta gente me estaba tratando como un animal... Las lágrimas no tardaron en salir de mis ojos... Yo solo quería volver con mis padres.

Más tarde entro aquella mujer gorda y me miro con una sonrisa, mi cuerpo empezó a temblar del miedo y de pronto sentí calientitos mis pantalones, accidentalmente me había hecho del baño... Ya podía escuchar a mi madre que no me preocupara, que había sido un pequeño accidente en los pantalones... Ay mi mami, como la extrañaba.

Austin - No me haga daño... yo... solo quería volver con mis papás.

*** - Pues ya ve olvidando a tus padres porque dudo mucho que los vuelvas a ver.

Austin - ¡No, quiero a mi Mami y a mi Papi! - Recibí una cachetada de la señora y mis sollozos incrementaron, lo cual no fue buena idea porque la mujer saco un cinturón para comenzar a golpearme sin piedad.

Zayn

Hazel - ¡Eso no puede ser! - Grito molesta - ¡Mi hijo esta perdido y ustedes aquí sin hacer nada y no tienen intenciones de hacer algo bien!

Zayn - Mi hijo esta perdido, hagan algo por el amor de Dios - Dije entre dientes, tratando de no levantar la voz.

*** - Tiene que pasar al menos veinticuatro horas para que lo podamos dar por perdido.

Zayn - Le están dando suficiente tiempo a la gente que podría hacerle daño a mi hijo, suficiente tiempo para que mi hijo sufra o para que lo saquen del país y no lo vuelva a ver, suficiente tiempo para que mi hijo viva un mal episodio en su vida... Yo no quería eso para mi hijo, tiene solo cinco años, un pequeño que ahora debería de estar jugando en la playa con su hermanito y su hermana mayor - Me gano el sentimiento, ya no pude resistir más... Las lágrimas comenzaron a salir - Quiero encontrar a mi hijo - Los policías solo se me quedaron viendo con tristeza, se miraron entre sí y luego el oficial se acerco.

*** - Sé lo doloroso que es pero... obedecemos ordenes del Jefe... Tiene que pasar por lo menos... - Golpee la mesa antes de que pudiera terminar aquella ridícula frase, tome la mano de Hazel y ambos salimos.

Hazel - ¡Hay que volver!

Zayn - No pienso perder el tiempo, ¿me acompañas a encontrar a nuestro hijo o te quedas a perder el tiempo con ellos? - La mire interrogante, note lo asustada que estaba, incluso me di cuenta que sus manos estaban temblando del miedo... No lo pensé más y la abrace, ella se derrumbo... Nunca la vi de esa manera y dolía.

Hazel - ¿Y si mi padre se lo llevo? - Me tensé al escucharla decir eso - Zayn nunca me lo perdonaré si le pasa algo a nuestro bebé, nunca seré la misma Zayn - Sollozó - Mi bebé, pobre de mi Austin ¿donde estará? - Me aferre a su cuerpo y comencé a llorar yo también.

Zayn - Lo vamos a encontrar, lo sé.

Austin

Estaba débil... veía mi sangre en el piso, parecía una piscina de mi sangre... Aquella mujer me abrió la piel con tanto golpe... Tenía mucha sed y mucha hambre, pero tenía más ganas de querer estar con mis padres y mis hermanos... ¿Me extrañaran, me estarán buscando? Espero que no se hayan olvidado de mi.

Cerré los ojos y comencé a recordar a mis padres, imaginando que estaban conmigo, podía sentir todo muy real que me quede en aquella ilusión antes de que pudieran despertarme para volver a aquella pesadilla.

Hazel

Zayn y yo pasamos todo el día en las calles, buscando a Austin y preguntando a la gente si lo habían visto, incluso habíamos hecho demasiados carteles y los pegábamos en cada poste, en cada pared y en cada tienda de cada calle. La mala noticia era que nadie lo había visto. 

Hazel - ¿Qué hacemos ahora Zayn? nadie vio a Austin - Él se quedo pensando por unos largos minutos, volteo a verme con preocupación - ¿Qué?

Zayn - Necesitamos enviarle una carta a tu padre, no hay más remedio que decirle que nos devuelva a Austin.

Hazel - ¿Si crees que él lo haya secuestrado?

Zayn - Es el único que nos mantiene vigilados. Él sabía de la existencia de Austin y él mismo dijo que estaba a poco de venir a nosotros, bueno pues... supongo esta fue su llegada, su tortura.

Hazel - Lo haré pagar - Dije entre dientes - Si él le hizo algo a mi hijo, realmente no sabe de lo que puedo ser capaz.

Ya era de noche y Zayn me había dejado en la casa para que tuviera que hacer la carta a mi padre mientras que él volvía a las calles para continuar buscando a Austin. Escribí y escribí que llene dos hojas enteras, las doble y las metí en un sobre, las deje en la entrada de la casa y espere por lo menos dos horas, cuando pasaron me salí y note que había otro sobre en la entrada, de inmediato la tome y comencé a leerla.

Hija me halaga mucho que pienses que yo fui quien secuestro a mi nieto, pero por desgracia no he sido yo aunque sinceramente hubiera sido una buena idea ya que me gusta mucho verte a ti y a tu esposo buscar como locos por toda la ciudad, no sé, me fascina verlos así de asustados por su hijo... ¿Donde crees que este? ¿te imaginas lo que le podrían estar haciendo? yo si que me imagino todo tipo de torturas para darle a un niño tan pequeño como él... incluso me gusta imaginar que grita "Mami y Papi ayúdenme" pero por desgracia no estás para cuidar de tu hijo... Saliste igual de inútil que tu madre, ¿recuerdas? ella no hizo nada para evitar que te violara, y ahora... ¿evitaras el que violen a tu hijo?... Al parecer no. Pobre Austin, le haz fallado. Empiezo a dudar que algún día lo puedas encontrar, pero para que dejes de sentirte mal, te ayudare con la búsqueda, sirve que te doy ánimos para aumentar la búsqueda... Si lo encuentro yo, tendrás ahora que encontrarme a mi, pero si lo encuentras tú, prepárate para esconderte de mi. Que comience el juego. Suerte mi niña.

Rompí la carta en miles de pedazos, y empecé a arruinar todo lo que estaba a mi alrededor.

Hazel - ¡Mi madre murió cuando me violabas, mi madre murió! - Grite a todo pulmón para que este me escuchara - ¡No fue culpa de ella, nunca lo fue! - Caí de rodillas al piso, las lágrimas no paraban de salir y de tanto coraje que traía empecé a golpear el piso - No pienso dejar que lo encuentres tú primero - Me levanté rápidamente y salí corriendo de la casa, no pensaba rendirme, ni mucho menos pensaba en descansar, necesitaba encontrar a mi hijo lo antes posible.