Es momento de brillar

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Ya llevaba días comiendo bien, haciendo ejercicio he incluso continuaba entrenando con el arma afuera en el campo. Me di cuenta que la niña también le estaban dando clases pero la estaban entrenando para defensa, yo quería esa clase también pero el abuelo dijo que mis clases iban a ir aumentando poco a poco,  que primero haríamos lo esencial para mi.

Conforme iban pasando los meses yo ya estaba teniendo más agilidad, incluso mi estado de antes ya no se comparaba nada con el estado que tenía ahora, antes parecía un esqueleto y ahora tengo más músculo, se notaba en mis piernas, en mi abdomen y en mis brazos. Me sentía realmente bien. El día anterior me habían llevado a cortar el cabello y me veía incluso más guapo, no sé porque pero notaba en mi rostro que tenía un gran parecido a mi padre.

El tiempo paso demasiado rápido que ya en unos días iba a cumplir diez años. Ahora mismo me encontraba en el campo y disparando, en segundos ya tenía las cinco latas en el piso. Sonreí ante mi logro y voltee a ver al hombre.

Gabriel - Muy bien Austin, haz mejorado - Se levantó y me guío hasta la casa para luego entrar al salón de defensa - Ya llego la hora de que aumentes la fuerza - Sonreí - Y el día de tu cumpleaños te daré una tarea demasiado especial.

Austin - ¿Y donde esta la niña?

Gabriel - Ella se llama Anette, ya viene siendo hora que la vayas llamando por su nombre y no niña - Sonreí apenado - Ella ahora comenzara con su práctica de tiro.

Austin - Bien - Dije en un suspiro.

Zayn

Regresamos a casa y de nuevo volvimos a la rutina de desayunar he ir en busca de Austin, Hazel se iba por su camino y ya cada quien escogía su horario de comida, eso si que me ponía mal ya que durante años hemos hecho las cosas por separado.

Cuando anocheció yo llegue a las doce de la mañana, cene y mire un rato las noticias, no sé a que hora me quede dormido pero como por eso por las cuatro de la mañana me desperté por el ruido de la puerta. Voltee a ver y vi a Hazel llorar, se fue cayendo poco a poco hasta llegar al piso, me levanté y corrí hacía ella.

Zayn - Amor ¿qué sucede? - Vi que tenía un sobre en la mano, de inmediato me tensé al hacerme la idea de lo que estaba escrito en el. Lo tome y comencé a leer lo que estaba escrito pero lo único que se repetía en mi cabeza fueron las últimas palabras que eran...

Tengo a Austin conmigo y ya sabe que soy su abuelo, ¿sabes? es demasiado feliz conmigo. He ganado cariño, ¿qué harás al respecto?

Abrace a Hazel y ella no paro de llorar en mi pecho, nos pasamos toda la noche despiertos, ella llorando y yo consolándola. De alguna manera pensaba que esto era mi culpa, pero ¿qué cosa hice mal? digo, todo estaba saliendo bien pero más tarde me entere que mi hijo no estaba con Lara. Ahora no sé que cosas haya vivido mi hijo durante cuatro años, y ahora quien sabe que cosas vivirá junto a su abuelo que era todo un psicópata.

Zayn - Buscaremos la forma de que Austin salga de ahí.

Hazel - Tenemos que sacarlo ya Zayn - Dijo entre sollozos - No quiero que nuestro hijo sea un completo loco como mi padre, no quiero eso para él - Oculto su rostro en mi cuello - Tenemos que reportarlo con la policía, algo tenemos que hacer.

Zayn - De acuerdo, haremos todo lo que sea posible, hay que hacerlo.

Gabriel

Este muchacho tenía un gran potencial, era demasiado trabajador y ahora lo puedo ver un poco más ejercitado, cada vez más se parecía a su padre y puedo apostar a que puedo hacer que este niño trabaje para mi en unos cuantos meses o quizás hasta que este niño cumpla diecisiete o dieciocho años.

Gabriel - Lo haces bastante bien - Le di unas cuantas palmadas en la espalda y él solo sonrió - Ahora quiero mostrarte algo nuevo, tendrás dos clases en un año.

Austin - ¿Qué otra clase me enseñaras? - Me miro interrogante.

Gabriel - Sígueme - Él pequeño venía detrás de mi y al llegar al final del corredor, abrí la puerta y pude ver a algunos de mis compañeros practicar el tiro de navaja.

Austin - ¿Y esto que es?

Gabriel - Tiro de navaja, es casi cuando disparas pero en ves de utilizar una pistola, utilizas tus manos para poder lanzar las navajas.

Austin - ¿Esto también lo voy a practicar?

Gabriel - ¿Quieres aprender a cuidarte?

Austin - Claro que sí - Dijo emocionado - ¿Cuando empezamos?

Gabriel - Mientras más pronto mejor - Sonrió y entro para que comenzaran a entrenarlo.

Salí con algunos colegas en lo que los otros entrenaban a los muchachos. Estacione el auto donde siempre y luego me baje con un amigo para comenzar a vigilar a mi hija y a su esposo desde lejos. Mi otro colega aseguro el auto y bajo más cosas para que pudiéramos vigilar a mi hija, las coloco donde siempre y en cuanto todo estuvo listo, ambos se pusieron a vigilar.

*** - No entiendo el propósito de esto - Volteo a verme.

Gabriel - En unos días mi otro nieto estará por cumplir años y necesitaré investigar hacía donde lo llevaron - Dije pensativo.

*** - ¿Por qué jefe?

Gabriel - Mi nieto Austin no será suficiente para el trabajo, así que... otro miembro de la familia podría llenar aquel hueco.

*** - Pero el chamaquito debe de estar lejos señor, además esta muy pequeño para el trabajo.

Gabriel - Lo sé, pero mi nieto Austin tenía solo nueve años y ahora pronto diez, esta pequeño ha progresado bastante bien, si este otro que esta más pequeño podrá hacerlo mucho mejor.

*** - ¿Qué hay de la niña? - Suspire.

Gabriel - Por lo que sé, esa niña no es hija de mi hija, la niña solo es hija del papá.

*** - ¿A ella la descartamos? - Pensé mejor las cosas y sonreí al saber que si secuestraba a la niña del marido de mi hija, podría hacer demasiado daño.

Gabriel - ¿Sabes qué? ahora que lo pienso no es mala idea - Dije con una sonrisa de oreja a oreja - Creo que esto lo deberemos de hacer de una vez.

*** - Muy bien.

Gabriel - Comenzaré a escribir la carta - Tome la mochila y empecé a escribir.

Más tarde al volver pude ver que los chicos ya habían cenado, se habían bañado ya y ahora cada quien estaba en su habitación, al parecer ambos lo estaban haciendo demasiado bien, los dos tenían los progresos demasiado altos que me tenían bastante feliz y con la esperanza de que mi negocio podría salir bastante bien. Mire las cámaras y vi a los dos, estaba pensando en que estos dos harían buena pareja y de ambos vendría un chiquillo con gran potencial, estoy pensando seriamente en ya poder juntarlos, pero aún no era tiempo, ambos necesitaban ya estar listos para el trabajo y ya ahí quizás podrían empezar a procrear. De momento solo haría que ambos se llevarán demasiado bien.

Gabriel - Es mi momento de brillar.

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