Capítulo 42 "El Reino de los Ángeles I"

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23 de Diciembre del 2018.
Abismo. Capital.

El Primer Batallón de Policía Militar Panzergrenadier llegó al Abismo en vísperas de navidad, gracias al increíbles esfuerzo de los hombres en no hacer paradas largas en el trayecto de regreso. Idea propuesta por Rosamund al decidir que todos merecían volver con sus familias para tal fecha.

Cómo era de esperarse, todos los oficiales aceptaron la idea.

El batallón llegó a primera hora a la frontera, siendo recibidos por los Vigilantes del Abismo, con uniformes de camuflaje gris. Varios saludaron a Alexa, e incluso se encontró con Xia, que estaba de guardia en ese turno.

Los soldados agotados de su largo viaje pero no derrotados, llegaron a los barracones del batallón y se les cedió un permiso de tres días. La euforia y emoción en las filas Panzergrenadier estaba por los cielos. Mientras, Victor se reunía con Volkner.

Fue recibido con un abrazo, bastante cálido, como el de un padre tras recibír la noticia del escape del Híbrido. Luego de ello fue despachado a descansar. Lo necesitaba.

Al dirigirse a su habitación, se encontró con Rosamund y Aldrich, ambos con ropa más, casual. Victor arqueó una ceja divertido.

-¿Se cansaron del uniforme?

-Si.

Respondieron ambos al unísono. El cazador notó que más atrás venían Erika y Giselle.

-Pense que ellas se quedarían en el batallón.

-No, yo les asignare una habitación aquí mientras.-Indicó Adrich- ¿Cuando las liberas?

-Mañana, estoy cansado.

El joven pasó junto a la pareja, acercándose a las féminas. Cerró los ojos por momento, sintió sus comillas crecer al estar cerca de ambas mujeres marcadas como sus seguidoras. Suspiró y abrió sus ojos negros. Ambas lo miraban expectantes.

-Tengo sed de sangre pero al mismo tiempo sueño, así que por hoy ambas están libres de mi.-De un momento a otro el cazador apareció detrás de ambas con una sonrisa.-Pero no implica que no las visite por la noche. Mis fieles servidoras.

Susurró con una sonrisa malvada, antes de dirigirse a su habitación. Su carcajada resonó por los pasillos. Poniendo a los cuatro con los pelos de gallina.

-Creo qué tantos problemas le han afectado.

Comentó Rosamund. Los demás asintieron de acuerdo con ella.

Victor se encaminó por los pasillos del castillo, rumbo a su habitación. Durante el camino se encontró con una patrulla de la Guardia Imperial que al verle se pararon firmes y dieron el saludo Militar. Mientras más se acercaba a su habitación, más era la seriedad, molestia en su rostro.

Antes de abrir la puerta de madera, está se abrió del otro lado revelando a una mujer adulta con ropas de servidumbre. Ella se sobresaltó al ver los orbes rojos del cazador. Rápidamente bajó la mirada en sumisión.

-D-disculpe señor, no sabía de su llegada.-Victor ingresó en la habitación-Su habitación fue limpiada y acomodada según las indicaciones de nuestro señor.

El Cazador (Saga Angel De La Muerte, Libro #I)  Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon