Sylvie, un sin fin de emociones.

Llamas y desolación

Cristine y Julios después de caminar algunos minutos llegaron a la entrada del pequeño pueblo. La mayoría de casas y viviendas ardian en llamas, mucha gente en las calles estaban tendidas en el piso inconscientes y otras mostraban claros rasgos de estar muertas.

Cristine y Julios ayudaron a la mayoría de la gente que pudieron y las llevaron a un lugar seguro.

Resultaba extraño que los bandidos no estuviesen en las calles. Lo que más le llamo la atención a Julios fue que dos sitios en el pueblo no habían sido atacados, estos resultaban ser la boutique de ropa femenina de Aurelia y la cafetería "Ray-K" donde trabajaban Nephy y Tomás.

Cristine tomó la decisión de ir a la boutique de ropa de Aurelia. De su lado Julios iría a la cafetería "Ray-K" para saber si Nephy y Tomás se encontraban bien.

La hermana mayor de Mía entró con mucho sigilo en la tienda de ropa de su amiga y mentora. El interior de este lugar estaba vacío. Aurelia había sido precavida y ella se había ocultado en un sótano secreto de su lugar de trabajo.

Sin embargo Julios no tuvo la misma suerte, ya que él ingresó a el lugar donde estaban todos los bandidos reunidos en estos momentos.

Cristine pudo sentir como un gran disparo se escuchaba a lo lejos. Ella salió rápidamente de la boutique de ropa femenina de Aurelia y fue a ver lo que había sucedido. Ella quedó impactada al ver como Julios era empujado a las afueras de la cafetería "Ray-K" por una fuerte patada. El cuerpo del guardaespaldas personal de "Miss Mónica" se encontraba en estos momentos tirado en la calles del pequeño pueblo.

El ambiente que mostraba el pequeño pueblo donde antes habían vivido Sylvie y Mero resultaba ser desolador y escalofriante. Las llamas consumieron la mayoría de las casas y viviendas de todos los habitantes de este lugar, los llantos de pequeños niños que movían los cuerpos inertes de su Padres, Madres que lloraban las muertes de sus hijos y esposos, indefensos abuelos que habían sido golpeados hasta quedar agonicos. Para cualquier persona que viese este espectáculo su corazón le diría que era el mismo infierno en la tierra.

Una gran furia comenzó a propagarse por todo el cuerpo de Cristine al ver todo el daño que habían provocado la banda de bandidos a este pequeño e indefenso pueblo. Los quince rufianes acompañados de su cruel y desalmado Lider salieron de la cafetería "Ray-K" riéndose a carcajadas.

Uno de los bandidos vio como el cuerpo de Julios se estremecia en el piso. Él se acercó a el guardaespaldas personal de "Miss Mónica" para darle el golpe de gracia. La hermana mayor de Mía llena de ira corrió hasta el lugar donde se encontraba Julios en estos momentos, ella de forma decidida golpeó con su puño en la cara al bandido. Los golpes de Cristine resultaban ser feroces e implacables. Después de unos segundos el bandido cayó abatido por el gran daño que había recibido de esta furiosa muchacha.

El misterioso Lider de la banda de rufianes miraba asombrado el desempeño en lucha cuerpo a cuerpo de Cristine, el hizo que sus subordinados bajaran sus armas y mando a nueve de ellos a que enfrentaran con cadenas y palos a la hermana mayor de Mía.

Cristine se concentró y enfocó al máximo para poder luchar con todas sus fuerzas contra los bandidos que la atacaban. Ella después de unos minutos de una extenuante pelea pudo derrotar a los diez bandidos que habían sido enviados por su cruel Lider a atacarla.

El misterioso y despiadado sujeto comenzó a aplaudir con mucho entusiasmo. Él de manera serena mencionó las siguientes palabras.

--- Pero que tenemos aquí, eres una linda y delicada señorita que sabe pelear muy bien. Has derrotado a diez de mis subordinados y aún asi veo que tus ojos están llenos de determinación y odio para atacarme. Te felicito, eres increíble, te has ganado toda mi admiración.