ⓉⓀ Puerta ⓎⓂ

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Jimin recordaba constantemente los primeros años de su amistad con Jungkook, cuando ambos eran bajitos y algo rellenitos por compartir sus dulces todo el tiempo, iban de la mano a todas partes (porque Jimin amaba la idea de ser un hyung para alguien y guiar a su dongsaeng) e incluso se había esforzado mucho para ayudar a Kookie a leer y escribir, y que fuera un chico listo al crecer.

También quería dejar en claro que no tenía planeado llorar al ver a Jungkook cuando bajaron del tren.

La idea era saludarlo como un mejor amigo normal haría, pero apenas pusieron un pie en la estación y lo vieron de espaldas, mirando en todas direcciones, buscándolos, la emoción fue tanta que Jimin se apresuró a llegar a donde estaba él y saltó sobre su espalda para asustarlo, sintiendo como sus ojos picaban y sorprendiéndolo enormemente, pero de inmediato el menor lo sujetó para que no cayera y sonrió en grande, viendo también Seokjin acercarse algo presuroso a ambos.

— No tienes idea de cuánto te extrañamos. — y Jungkook bajó con cuidado a Jimin, quien con la manga de su camiseta se refregaba los ojos maldiciendo todo. — Siento como si hubiera sido una eternidad, incluso te ves más grande.

El menor sólo sonreía, mirando entonces a Jimin, y rodeó sus hombros con uno de sus brazos, dando palmaditas en su espalda.

— Estoy muy feliz de verte, Kookie. — le sonrió, acomodando mejor el bolso con sus cosas.

— Sabía que lloraría. — mencionó Seokjin, tomando la valija que llevaba para que los tres comenzaran a caminar. — Se lo dije cuando veníamos.

— No molestes. — murmuró avergonzado, y Jungkook se rio. — No puedo entender porque tardamos tanto en hacer esto, serán las mejores semanas del mundo, especialmente explorando Seúl. — dejó escapar un gran suspiro, con una pequeña risa. — Estoy muy emocionado.

— Yo igual, e incluso mi corazón late rápido. — comentó Seokjin, contagiándose de Jimin.

— Nunca pensé que tendríamos que tener un reencuentro. — mencionó con diversión, prestando entonces atención al movimiento de manos de Jungkook, y Jimin sonrió llevando una mano a su propia cabeza. — Ah, es cierto, ¿te gusta?

Jungkook ya lo había visto en la foto que Jin hyung envió, pero realmente creía que aquel tono rubio que Jimin hyung tenía ahora en su cabello se veía genial, y no dudaba en hacérselo saber.

"Yo también quiero teñir mi cabello antes de ir a Daegu" dijo usando sus manos, y Seokjin sonrió entusiasmado.

— ¿Decidiste algún color? — el menor se encogió de hombros. No realmente. — Yo quería teñirlo de rosa, lo haré antes de graduarme.

— Creo que te verías bien de rubio, hyung.

La casa que Jungkook tenía en Seúl era mucho más espaciosa que la de Busan, quizás porque su hermano ya no vivía con él, y su madre estaba ausente la mayor parte del tiempo, pero el menor siempre la había sentido demasiado para él solo, aunque ahora al menos no se sentiría así, por lo menor durante esas semanas.

Jimin y Seokjin estaban impresionados, y sintieron un poco de nostalgia cuando, al entrar a la habitación del menor, vieron todas sus cosas acomodadas de una manera diferente en una habitación también diferente, más grande, a la que ellos jamás se habían acostumbrado. Dejaron las maletas y Jimin se sentó de inmediato en el colchón, intentando comprobar que fuera el mismo de siempre, mientras Seokjin se acomodaba en el puf de color azul, ese que era nuevo y generalmente Taehyung siempre usaba.

Jungkook entró con tres latas de refresco y una bolsa de frituras que acabaron apoyados en el suelo mientras Jimin optaba por bajarse de la cama y recostarse en el mismo, sobre una manta, Jungkook se cruzaba de piernas sobre una almohada y Jin acercaba el puf hacia ellos, armando una pequeña ronda. 

𝙏𝘩𝘦 𝘵𝘩𝘪𝘯𝘨𝘴 𝘵𝘩𝘢𝘵 𝘐 𝘭𝘰𝘷𝘦 «ᴛᴀᴇᴋᴏᴏᴋ» • 𝐂𝐎𝐑𝐑𝐈𝐆𝐈𝐄𝐍𝐃𝐎 •Where stories live. Discover now